Después de las situaciones adversas por las que han pasado los equipos, debido principalmente a la pandemia, es un hecho decir que iniciar la temporada 2-0 ilusiona. Sin embargo, si analizamos bien lo que han hecho los Bears en 2 juegos de temporada, nos daremos cuenta que distan de ser satisfactorios los resultados. Aquí el porqué.
Antes que nada debemos estar conscientes que estos 2 primeros juegos son el equivalente a 2 juegos de pretemporada que no se tuvieron, por lo que encontramos al equipo en período de adaptación y de creación de ritmo y timing entre los jugadores veteranos. En el caso de los novatos, se encuentran en un proceso de familiarización del plan de juego y a la velocidad que se tiene en la NFL, comparada por el futbol colegial.
Reconociendo lo anterior, no podemos pasar por alto que todos los equipos tuvieron las mismas condiciones y varios de ellos, como los Ravens, los Bills, los Seahawks, los Packers, entre otros, se están viendo muy consistentes y dominadores de sus planes de juego. Así mismo las lesiones han estado presentes en prácticamente todos los juegos, mientras que los Bears solo han perdido por lesión al Edge Robert Quinn. Aqui los highlights contra Detroit y contra NY Giants
Repaso línea por línea
Si hacemos un recuento de como se han comportado Chicago en cada uno de los departamentos, nos daremos cuenta que ha habido subidas y bajadas, no solo de juego a juego, sino dentro de cada uno de los 2 partidos que hemos tenido, lo cual habla de una sola palabra: Inconsistencia.
¿Mitch Trubisky está aprovechando su última oportunidad ?
En este año 4, Trubisky se sometió a un trabajo arduo en pretemporada para mejorar sus técnicas de lanzamiento y su mecánica de su posición de lanzamiento, lo cual ha mejorado ligeramente sus lanzamientos. Sin embargo, su actuación en ambos partidos ha dejado aun cuestionamientos acerca de su constancia. En los 2 juegos, ha acumulado 432 yardas con 5 TD y 2 INT, con un bajísimo 59% de pases completos. Su QB rating total en estos partidos es de 92.71, pero si los diseccionamos en los 8 cuartos jugados, sus números son los siguientes: 57.9, 58.8, 87.5, 143.3, 135.9, 136.1, 27.5 y 8.3. Es decir, ha dado 3 excelentes cuartos, uno regular y 4 muy malos.
Es también prudente mencionar, que varios de los pases que ha mandado, se le han caído de las manos a sus receptores y que tuvo poca responsabilidad en sus 2 intercepciones. En cuanto a su precisión, ya no son tantos los pases que ha fallado a sus receptores, sin embargo, estos se siguen presentando, así como sus lectura de defensivas tardías.
Al final ha mejorado al grado de tener por el momento su trabajo seguro, pero aun no se ve que pueda ser el QB contundente que nos pueda llevar a contender contra los grandes.
Ataque terrestre
Sin duda que David Montgomery se ha significado pieza clave para el funcionamiento por tierra de Bears. En el juego contra Giants, tuvo una actuación destacada. A pesar que estuvo toda el segundo cuarto fuera por una lesión, regresó en la segunda mitad para completar 16 acarreos para 82 yardas, incluyendo una carrera de 23 yardas, cuando los Bears estaban en 2a y 25. Por aire tuvo 3 recepciones para 45 yardas con 1TD espectacular con 20 yardas después de la recepción. Los otros 3 RB, no ha aportado mucho más.
Receptores y Alas Cerradas
Actuaciones agridulces por parte de estos 2 grupos. Allen Robinson bien en el primer partido, pero muy desconcentrado en el segundo, quizá provocado por su situación contractual con el equipo. Anthony Miller brilló en el primer juego, pero desapareció totalmente en el segundo, en el cual dejo ir 2 pases, uno de ellos, una espiral perfecta de Trubisky que de haber agarrado, hubiera significado una anotación mas para los Bears. Quien ha sorprendido favorablemente es el novato Darnell Mooney quien ya lleva 6 recepciones para 74 yardas y 1 anotación, con un promedio de 12 yardas. Nagy se siente tan cómodo con él, que Ted Ginn Jr. no fue convocado para el juego 2.
Jimmy Graham fue factor en el primer juego con un TD, pero en el segundo solo tuvo una recepción de 18 yardas. El novato Kmet tuvo su primera recepción de su carrera en el juego contra Giants. Sin duda que en los próximos juegos debe haber mas involucramiento con los TE para poder aspirar a mejorar los números ofensivos.
El resurgimiento de la OL.
Es de sorprender lo mejorada que se ve la OL contando con solo la adición de Germain Ifedi, quien por supuesto no es la razón, sino el trabajo que ha hecho el coach Juan Castillo. En 2 juegos los Bears tienen 284 yardas por tierra, con destacadas participaciones de Cody Whitehair, pero sobre todo de James Daniels. Los Tackles se han comportado a a altura, sin embargo, contra Giants permitieron 4 capturas al QB. En el caso de Bobby Massie, se dio el lujo de tener una recepción milagrosa que tomó después de un rebote, e inclusive pasó la línea del primero y diez.
Análisis de la defensa
La baja de juego de la línea defensiva es el principal motivo de preocupación, ya que ni el regreso del artífice Akiem Hicks ha logrado parar la carrera como nos tenían acostumbrados. Aquí es donde extrañamos a Eddie Goldman. Detroit corrió para 138 yardas, con un Adrian Peterson de 90 años y Giants, sin Saquon Barkley, se las arregló para correr 75. El pass rush tampoco ha sido lo que se esperaba, ya que se contabilizan 5 capturas al QB. A Giants le metieron 4, con una OL francamente mala. A favor diré que Robert Quinn ya apareció, así seguramente habrá mejoría. Mack ya tuvo su primera captura y un fumble recuperado, esperemos que sea el parteaguas para que eleve su presencia dentro del campo.
Linebackers
Es preocupante la cantidad de yardas que se han permitido en pases cortos por el centro. Danny Trevathan es una gran presencia de liderazgo y motivación. Lo malo es que cada vez se ve mas lento y con coberturas deficientes, al grado de que debe ser apoyado por los safeties Gipson y Bush. Lo peor es que no contamos con alguien de banca que pueda hacerlo mejor. Y quien se veía con potencial, el UDFA Rashad Smith, fue tomado por lo Cowboys de nuestra PS.
Novato que si ilusiona.
Podríamos decir que el perímetro ha jugado un par de buenos partidos, logrando jugadas importantes a la hora buena. El CB Jaylon Johnson se ha destacado plenamente. Los QB rivales lo han buscado frecuentemente, y aun así ha tenido buenas coberturas con 10 tackles con ya 5 pases defendidos. Realmente está complementando muy bien a Kyle Fuller y de seguir así se convertirán en un tándem de cuidado en la NFL. Eddie Jackson está jugando mas en su posición original de Free Safety. Contra Giants estuvo a punto de tener un pick six, el cual fue anulado por una supuesta interferencia defensiva. Gipson con un desempeño regular y Deon Bush jugando bien a la hora buena y con ya una intercepción a su cuenta.
Otra vez batallando con el kicker.
Eddie Piñeiro está lesionado y esperamos que pronto se recupere, ya que Cairo Santos se ve mas inseguro que mi abuelita pateando FGs. De cualquier modo Piñeiro tampoco es Mr. Seguridad, así que mientras los equipos contendientes tienen a Harrison Butker y a Justin Tucker, los Bears están bailando con la mas fea.
Así pues, llevar 2-0 no ilusiona a nadie, ni el QB ilusiona a la fan base objetiva de Bears. El futuro no es para nada prometedor, al habérsele ganado con dificultad a 2 equipos inferiores. A Detroit se le ganó con un excelente último cuarto y debido a que los Lions no supieron manejar el juego a su conveniencia. A Giants se le ganaba cómodamente medio tiempo, pero les pasó lo que a los Lions. Su incapacidad para terminar con el rival desde mucho antes fue frustrante, permitiendo que el juego se definiera hasta el último snap.
El problema es que se vienen juegos contra rivales de mas talla. Sin ir mas lejos, la semana próxima se visita a los Falcons, con una ofensiva aplastante, pero con una defensiva de muy bajos resultados. Para ganarles, no serán suficientes los 22 puntos que tienen anotados los Bears por partido. Después siguen Colts y Bucaneers y ya para que les platico.
No queda mas que seguir confiando en que Nagy encuentre el camino adecuado. Que la defensa se comporte como el top 5 que puede llegar a ser. Y por supuesto, que Trubisky deje de estar jugando al elevador, un cuarto arriba y el otro abajo.