Adiós, AJ Brown, adiós

Con la explosión del mercado de receptores en agencia libre, muchas estrellas emergentes quisieron dejar atrás el bajo contrato de rookie y colocarse también en la élite salarial. Una de esas estrellas emergentes es AJ Brown. AJ Brown se había ganado sobre el campo todo el derecho del mundo a ser pagado como un receptor top en la NFL. Era un factor diferencial en la ofensiva de Titans, piedra angular en el juego de pase y amado a partes iguales por jugadores y staff. ¿Por qué tuvo que ser «tradeado» entonces? ¿Fue un buen movimiento? Vamos a intentar aclarar la situación.

 

 

AJ Brown

Desde su llegada a Nashville hace 3 años, AJ Brown se había ganado el corazón de la afición. Un jugador determinante sobre el campo, que había mostrado su compromiso jugando incluso lesionado cuando el equipo más le necesitaba. Además, AJ Brown había ido ganando peso e influencia fuera del césped con actividades para niños, como el minicamp anual que organizaba, que fortalecieron su vínculo con la ciudad, los fans y el equipo en general.

Pero claro, AJ Brown y su agente, sabían de la importancia que tenía el WR en Titans y buscaron una renovación “masiva”. Los primeros contactos entre el agente de AJ Brown y Titans tienen lugar a finales de marzo, poco después de la agencia libre que dinamitó el mercado. Las extensiones firmadas por Tyreke Hill, Davante Adams o Amari Cooper hicieron al agente de AJ Brown frotarse las manos. Tory Dandy, el representante de AJ Brown (y de Deebo Samuel), lanzó su primera tentativa: 27 M/año por 4 años de extensión. Eso haría un contrato aproximado de 112 M por 5 años (sumando su año de contrato rookie). Eso le colocaría como el tercer WR mejor pagado de la NFL.

Paralelamente a esto, comienzan los entrenamientos voluntarios y AJ Brown no se presenta. El ambiente es de calma. Los entrenamientos son voluntarios, no hay de qué preocuparse. Además, solamente jugadores lesionados o recién incorporados al equipo suelen acudir, por lo que un “veterano” y además sano como AJ Brown tenía todo el derecho del mundo a ausentarse. Y quién sabe, incluso usarlo para ganar fuerza en la negociación.

 

Show me the money! / nfl.com

 

Lo único que rompía la calma por Nashville eran los crípticos mensajes que AJ Brown publicaba en Twitter y borraba minutos (o segundos) después. Nadie sabía muy bien qué significaban.

 

 

Deebo Samuel y Jalen Hurts

Entonces se publicó un mensaje muy claro. Deebo, en un directo de Instagram, se fue un poco de la lengua. El todavía WR de 49ers dijo que Titans había ofrecido 20 M/año a AJ Brown y que ese iba a ser su límite. El equipo sabía que el WR podía sacar más dinero si salía al mercado, pero confiaba en la implicación de AJ Brown en el proyecto de Titans para quedarse por un poco menos.

Pero, ¿Cómo sabía Deebo Samuel esta información? Quizás el hecho de tener el mismo agente tenga algo que ver. Y quizás, el hecho de que AJ Brown pidiera ser «tradeado» tras esta oferta, la misma petición que hizo Deebo, tenga también algo que ver con su agente. Vamos a suponer que es una casualidad.

 

«La que has liado, Deboo» / clutchpoints.com

 

Lo que estaba claro es que AJ Brown había pedido el trade, al igual que Deebo Samuel. La noticia no se había filtrado a la prensa. Quizás fuera simplemente una maniobra de presión. Pero es que al mismo tiempo AJ Brown interrumpió toda comunicación con el WR Coach de Titans y resto del staff. Demasiadas coincidencias.

Y de hecho, añadimos una más: Jalen Hurts. AJ Brown estuvo entrenando con él. Viejos amigos del instituto, tomaron caminos diferentes en College: Hurts fue a Alabama, AJ Brown a Ole Miss. Eso sí, Hurts intentó convencer a Brown de que aceptara la oferta de Alabama. Aunque ese no fue el resultado, ambos permanecieron como amigos. Y estuvieron este abril entrenando juntos. Casualidades de la vida, justo en el mismo momento en que Hurts pide a Howie Roseman (GM de Eagles), que persiga un trade por AJ Brown. El propio Roseman lo reconoció en rueda de prensa.

Lo dicho. Demasiadas coincidencias.

 

 

Tennessee Titans

Pero Titans no quiso tirar la toalla. Tanto Vrabel como Jon Robinson profesaron en público su amor por AJ Brown y su determinación a retenerle. Ambos negaron los rumores e insistieron en que las negociaciones seguían teniendo lugar.

Si la primera oferta del agente de AJ Brown fue 27 M/año, la de Titans fue de 16 M/año más 4 M/año en incentivos. Es decir, un máximo de 20 M/año. ¿Por qué hizo Titans esta oferta?  AJ Brown ha sido un WR diferencial, sí. Pero también ha sufrido demasiadas lesiones. Y en 2021 no logró ni siquiera alcanzar las 900 yardas de recepción. Así que para Jon Robinson la cosa estaba clara: te valoramos, sí, pero no queremos arriesgarnos a pagar una millonada a un jugador que cada temporada se pierde 3 o 4 partidos mínimo. Con los incentivos, Titans se aseguraba pagar más si AJ Brown rendía y se mantenía sano.

 

La cosa se complica / yahoo.com

 

Pero la oferta era, a ojos de todo el mundo, demasiado baja. Con el desarrollo de los acontecimientos ya mencionados, Titans hizo una segunda oferta. No sabemos los detalles de la misma. Quizás sí que fueran realmente 20 M/año, sin incentivos, como dijo Deebo. Entonces fue cuando el agente de AJ Brown llegó con otra exigencia: 80 M de $ garantizados. Y Titans no estaba dispuesto a pasar por el aro.

Es cierto que el equipo podía hacer malabares con el Salary Cap y encajar su contrato así como el del resto de jugadores a renovar como Jeffery Simmons. La excusa del límite salarial es un poco superflua. Pero en cualquier caso, lo que Titans no quería era atarse con tanto dinero garantizado. También podía forzar la situación: obligar a AJ Brown a cumplir su contrato rookie, colocar el Franchise Tag para la temporada 2023 e intentar, en algún momento, llegar a un acuerdo. Contando, claro está, que AJ Brown esté concentrado y no haga hold-out o cosas por el estilo.

 

 

Treylon Burks

Al final, Titans decidió que el riesgo era demasiado. No sólo en términos económicos, sino también en términos deportivos. Tener un jugador descontento en el vestuario nunca ayuda. Así que tomó la decisión más difícil, pero, quizás, la más lógica: «tradear» a AJ Brown.

Aun así, había muchas preguntas por resolver. La primera, quién quería a AJ Brown. Encontrar a alguien resultaría sencillo. La segunda, quien quería pagar a AJ Brown. Eso no iba a ser tan sencillo. Y la tercera, qué iba a sacar Titans a cambio de perder a su mejor WR y referencia. Que Philadelphia Eagles resolviera las tres preguntas en menos de 24 horas es una “coincidencia” más.

Eagles quería a AJ Brown. O mejor dicho, Hurts, el QB de Eagles, quería a AJ Brown. El equipo de Filadelfia ofreció a AJ Brown más de lo que quería: 25 M/año. Según el WR, aunque la petición inicial era de 27 M/año, se habría conformado con 22 M/año. Eagles superando esa cifra hizo olvidar por completo el tema del garantizado. Y lo tercero: Eagles ofrecía un sustituto para AJ Brown: Treylon Burks.

El WR de Arkansas estaba disponible en el #18 y es un calco de AJ Brown. Eagles sabía que tenía la sartén por el mango en las negociaciones y al final, Titans se tuvo que “conformar” con Burks y una 3ª Ronda. ¿Poco botín? Quizás. ¿Había mejores alternativas? Lo dudo.

 

Bienvenido a casa, Treylon / tennesseean.com

 

Pero el problema del trade es el shock en la fan base de Titans. Pocos jugadores «drafteados» han sido tan fríamente recibidos como Burks. Y, haga lo que haga, su futuro en NFL va a estar ligado y comparado al de AJ Brown. Si Burks se sale en Titans, muchos dirán que AJ Brown lo habría hecho mejor. Si falla, los lobos de Twitter, Facebook y demás le hundirán. Y con él caerán Robinson e incluso Vrabel. Mientras, AJ Brown lo tendrá “fácil”. Si se sale en Eagles, los Titans fans se tirarán de los pelos por haberle dejado marchar. Si no funciona, la excusa del sistema ofensivo lo justificará todo.

Sea como fuere, AJ Brown ya no está en Titans. Se ha marchado a otros prados y Titans ha logrado sustituirle con el jugador potencialmente más similar. El riesgo está en ese potencialmente. Así que, como dijo Marcelo Bielsa: “No me quieras porque gané, quiéreme para ganar”. Treylon Burks es ahora nuestro WR y hay que apoyarle, pase lo que pase. Ojalá pronto nos haga olvidar a AJ Brown.

 

Adrián de Blas