Cuando allá por el mes de abril, la NFL publica el calendario de la temporada regularlos aficionados miramos los partidos que tiene que jugar nuestro equipo y se pone a echar cuentas. ¿Cuántos partidos podemos ganar? ¿Podremos entrar en playoff? Cuando tu equipo es malo o muy malo, como el caso de los Jets este año, la pregunta pasa a ser ¿Qué partidos se pueden pelear para evitar el 0-16? Honestamente, sólo marqué cuatro que se podían ganar aunque no tenía mucha fe en ello: Jaguars en la semana 4, en Cleveland en la semana 5, Bills en la semana 9, y Chargers en la semana 16.
En Agosto uno se pone a leer análisis y predicciones de expertos sobre cómo va a ir la temporada de todos los equipos, y muchos por no decir todos, nos dan el pick 1 del draft 2018, y no más de 2 victorias siendo generosos.
Al final llega Septiembre y comenza la liga. El primer partido es en Buffalo: se compite razonablemente, el equipo da lo que tiene pero los Bills son más equipo y acaban ganando por 21-12, lo cual visto con la perspectiva de las 4 semanas transcurridas, no es tan mal resultado.
La segunda semana toca visitar el feudo de uno de los aspirantes en la AFC: los Oakland Raiders. El ambiente la semana previa es de visita al matadero, y los pocos consuelos que se buscan es que sea poco doloroso. Como se prevé, los Raiders se van a más de 40 puntos y se llevan el partido con comodidad, pero contra pronóstico los Jets hacen 20 puntos. Aunque si el otro equipo hace 45, uno puede pensar que la defensa rival se ha dejado llevar. Los artículos hablando de tanking empiezan a coger fuerza y ya se habla del 0-16.
En la semana 3 llega el primer duelo divisional y el debut en casa: los Miami Dolphins. El año pasado jugaron playoff y son muy favoritos, pero el partido avanza y nuestra defensa les para una y otra vez. Al final del tercer cuarto 20-0 para los Jets. Muchos nos frotábamos los ojos, ganábamos a un equipo a priori mejor y con bastante claridad. Aunque la sensación de inquietud no termina hasta que los ceros llegan al marcador y el partido termina. El fantasma del 0-16 ha desaparecido y los Jets ya pueden jugar sin esa presión lo que queda de campaña.
El siguiente rival son los Jaguars otra vez en casa. Vienen de apalizar a los Ravens en Londres. Los Jets empiezan perdiendo pero se colocan 20-10 durante el último cuarto, pero un par de pérdidas hacen que los Jaguars empaten el partido y fuercen la prórroga. Durante el tiempo extra, nervios y errores hasta que Catanzaro patea para la victoria. Han pasado 4 semanas y el peor equipo de la liga va 2-2. Y el domingo viajamos a Cleveland. ¿Por qué no vamos a poder ganar allí?
No vamos a ganar la SuperBowl, no nos vamos a engañar, pero ganar partidos no le hacen mal a nadie. Por si acaso, le voy a poner un par de euros a que ganamos la SuperBowl (adjunto prueba). El objetivo de elegir con el número 1 del draft en Abril del 2018 se aleja mucho, porque hay equipos que no parece que puedan ganar dos partidos en lo que resta de temporada.
En cuanto al equipo en sí, me está gustando mucho el ataque dentro del poco nivel que tiene. Son conscientes que no da para mucho y no se complican la vida en exceso. Mucho pase corto y bastante carrera, en la que McGuire y Powell se están comiendo a Forte, al que se le ve bastante mayor. Kearse se está adaptando bien al equipo, y McCown está conectando bien con él. En defensa me está gustando especialmente Jamal Adams. Es safety, pero parece que puede jugar casi de lo que quiera. Tiene un rango enorme y muchas veces da la impresión que tiene a un gemelo jugando. Él y Leo Williams son las bases sobre las que se debe construir la defensa. En cuanto a lo negativo, preocupa el estado de Wilkerson, ya que su bajón de rendimiento ha coincidido con la firma de su contrato. O se pone las pilas pronto o es posible que sea cortado más pronto que tarde.
En resumen, aparentaba que iba a ser una temporada tirada a la basura en Mayo, pero hay bastantes cosas que hacen ser optimista. Como decía aquél: “Al loro, que no estamos tan mal, hombre”.
@NYJetsSpain