CBA en 2020: un dolor de cabeza

El actual CBA se acaba. 2020 es su último año. Y con su fin llega un período de incertidumbre relativa y cambios. Las negociaciones por un nuevo CBA que mantenga el modelo financiero de la NFL (Salary Cap incluido) llevan tiempo en marcha. Si estas negociaciones no llegan en las próximas 3 semanas a buen puerto, los equipos se van a enfrentar a una serie de peculiaridades.

Os las cuento aquí. Sacad el ábaco de Doraemon y empecemos.

¿Lo tenéis todos ya? / lukinternacional.com

FRANCHISE Y TRANSITION TAG

Esta es, probablemente, una de las condiciones más conocidas entre el público general. Hasta ahora, un equipo podía usar el Franchise Tag (media de los 5 salarios más altos del año anterior en esa posición) o el Transition Tag (media de los 10 salarios más altos del año anterior en esa posición). Uno, pero no los dos. Sin embargo, en 2020, el CBA establece que sí se pueden usar los dos a la vez.

A equipos como Titans o Cowboys les puede venir muy bien. Titans, por ejemplo, debe renovar a Tannehill (QB), Henry (RB) y Conklin (RT). En condiciones normales sólo podía usar un Tag en uno de los 3 y estar obligado a negociar un acuerdo con los otros 2. Ahora, en 2020, Titans podría usar los dos Tags y solamente tener que negociar con uno de los 3. Misma situación en Dallas con Prescott (QB), Cooper (WR) y Byron Jones (CB).

Por si acaso: se puede usar un Franchise Tag y un Transition Tag a la vez. Pero no dos Franchise Tag ni tampoco dos Transition Tag.

 

30% RULE

No vamos a demorarnos más. Tras empezar con una fácil, vamos con la madre de todas las medidas. Por algún motivo, es la más desconocida… y seguramente va a ser la que más lío traiga al fan de a pie.

En su momento os dije que la fórmula comúnmente usada en Twitter para anunciar contratos de X M/año está mal. Pues grabaros eso a fuego porque esta temporada va a ser muy importante saberlo.

La NFL no es tonta. Sabe que, si no se logra un nuevo CBA, el año 2021 podría ser sin Salary Cap. Los equipos aprovecharían esta situación para firmar a jugadores que, en condiciones normales, no se podrían permitir. Se les paga un Signing Bonus desorbitado que se pueda prorratear y descargar en años futuros, y listo. Pues no.

Para evitar esa situación, la NFL ha “capado” de antemano los contratos de 2021 en adelante. Y lo ha hecho a través de la regla del 30%. Esta regla dice que el Cap Hit de un jugador menos el prorrateo de su Signing Bonus no puede aumentar más de un 30% al año con respecto al último año con Salary Cap (2020). No está muy claro, ¿verdad? Pues vamos a poner un ejemplo.

Odell Beckham Jr. firmó una extensión en 2018 por 5 temporadas más la que le quedaba. Es decir, tiene contrato hasta 2023. Pues bien, en su estructura, como el contrato va más allá de 2020, ya debe cumplir la regla del 30%. El Cap Hit de OBJ menos el prorrateo del Signing Bonus en 2020 en de 14,25 M de $. El 30% de ese número es 4,275 M de $. Eso quiere decir que cada año, el Cap Hit de OBJ puede aumentar un máximo de 4,275 M de $. En 2021 aumenta 1,5 M de $ y en 2022 y 2023 solamente 750.000 $. Claramente por debajo del 30%.

Odell, el dia de la firma / elitesportsny.com

Otro ejemplo: Trey Flowers. El Cap Hit del DL de Lions en 2020 es de 16,739 M de $. Si a ese número le restamos los 5,614 M de $ de Signing Bonus prorrateado, nos quedan 11,125 M de $. El 30% de esa cifra es 3,337 M de $. En 2021 el Cap Hit de Flowers aumenta 3,25 M de $, lo mismo que en 2022. En 2023 no crece. Algo más justo, pero sigue por debajo del 30%.

Sin embargo hay un “problema”. En 2022 Flowers tiene un Roster Bonus de 1,625 M de $, lo que haría que su Cap Hit suba 4,9 M de $, por encima del 30% permitido. Pero hecha la regla, hecha la trampa. Basta con poner ese Roster Bonus como un bonus NLTBE, como un escalador por objetivos, o cualquier otro término para que la NFL no lo catalogue dentro del 30%.

Es el caso de Carson Wentz. Su Cap Hit menos el prorrateo Signing Bonus en 2020 es de unos 15,4 M de $. En teoría, en 2021 no debería poder superar los 20 M de $. Sin embargo, el Cap Hit (sin Signing Bonus) de Wentz en 2021 es de 31,5 M de $… ¿cómo es esto posible? Pues muy sencillo. En realidad, el salario base de Wentz en 2021 no son 15,4 M de $, sino 3,9 M de $. Los 11,5 M de $ restantes son escaladores NLTBE que no cuentan para el 30%. Echemos cuentas: 31,5 menos 11,5 igual a… ¡Sorpresa! ¡20 M de $! Los Eagles cumplen con el 30% pero, gracias a triquiñuelas financieras, la realidad es bien distinta.

Lo mismo pasa con Matt Ryan (de sus 23 M de $ de salario, solo 5,5 son reales y el resto en escaladores), con Aaron Rodgers o con muchos otros. Sin embargo, hay equipos que han especulado con que esta norma no entre en funcionamiento. Si se alcanzara un acuerdo de CBA antes del 17 de marzo de 2021, la regla del 30% desaparece. Así que, seguramente, algunos contratos no cumplan la norma. ¿Qué pasa si no hay acuerdo? Pues que la especulación les ha salido mal y van a tener que devanarse los sesos en una reestructuración que cumpla los requisitos del 30%.

Pero esto son contratos ya firmados que debían calcular estas cosas. ¿Qué pasará en la Agencia Libre 2020? Pues que sus contratos van a ser bastante distintos.

Volviendo a Trey Flowers, en 2019, su primer año de contrato, su salario base fue de 805.000 $ y su Cap Hit de 6,4 M de $. En 2020 el salario se disparó a 11,125 M de $ y el Cap Hit a 16,7 M de $. La idea de los Lions era clara: quitar presión a 2019, poder fichar más jugadores y ya veremos en el futuro.

Pues un contrato así, lamentablemente, en 2020 no es posible. Juguemos a adivinos con un caso que me toca de cerca: Ryan Tannehill. Tannehill renueva por Titans en las cantidades que estima Spotrac, es decir: 4 años por 120 M de $. La estructura más probable (simplificada) será esta:

 

  Salario Base Signing Bonus Cap Hit Aumento %
2020 17.500.000 5.000.000 22.500.000
2021 22.500.000 5.000.000 27.500.000 29,41%
2022 27.500.000 5.000.000 32.500.000 29,41%
2023 32.500.000 5.000.000 37.500.000 29,41%
Total 100.000.000 20.000.000    

 

Un Signing Bonus muy bajo y un salario más alto que crece continuadamente por debajo del 30%. Además, eso le da flexibilidad al equipo para poder cortar al jugador. Pero obviamente no podemos descartar que se incluyan escaladores, incentivos NLTBE y demás.

Por eso, más que nunca, esta Agencia Libre tenéis que estar muy atentos a los detalles de los contratos y no fiaros ni un pelo del típico M/año.

 

INCENTIVOS

Como ya aprendisteis en el artículo de Salary Cap, los incentivos son bonus que se cobran por rendimiento sobre el campo. Existen dos tipos de ellos, los Likely to be earned (LTBE) y los Not likely to be earned (NLTBE).

En el primer caso son incentivos que el jugador debería alcanzar sin problemas. Si el objetivo es alcanzable o no, se basa en sus estadísticas los años previos. Como el jugador puede lograr el objetivo marcado, pues el incentivo (o bonus) se descuenta del Cap Room antes de la temporada. Y en caso de no alcanzarse, se devolvía al año siguiente. Por su parte, los NLTBE son objetivos poco realistas o complicados de alcanzar en condiciones “normales” según las estadísticas del jugador. Hasta ahora estos bonus, si se lograban, se descontaban en la siguiente temporada. Y si no se lograban, pues no pasaba nada.

Bueno, pues en 2020 esto no es así. TODOS los incentivos se añadirán o descontarán en el Salary Cap de 2020, sean LTBE o NLTBE, en el momento de cumplirse (o no). Al no haber CBA en 2021, la NFL no va a esperar. Vamos con un ejemplo que es como mejor se entienden las cosas.

Contratazo = hombre feliz / nbcsports.com

Tomemos a Richard Sherman, CB de los San Francisco 49ers. En 2019 Richard Sherman tenía un total de 5 M de $ en incentivos, de los cuales 1,125 M de $ eran LTBE (ya contaban contra el Cap de 2019) y 3,875 M de $ eran NLTBE (en caso de lograse contarían para 2020). El incentivo LTBE lo logró Richard Sherman sin dificultades. Y de los 3,875 M de $ NLTBE, Sherman logró 3,750 M de $. Eso quiere decir que el Cap Hit de Sherman para 2020 es 3,75 M de $ superior debido a los bonus de 2019.

En 2020 tiene una estructura similar. 4 M de $ en incentivos, de los cuales 3,937 M de $ son LTBE y 0,062 M de $ son NLTBE. Desgranémoslos:

0,937 M de $ (LTBE) si juega 15 partidos. A esa cifra le sumamos 0,062 M de $ (NLTBE) si juega todos, los 16.

1 M de $ (LTBE) si juega el 90% de los snaps.

2 M de $ (LTBE) si está en el equipo All-Pro.

Si Sherman jugara los 16 partidos su bonus NLTBE (62.000 $) se contaría en teoría para el año que viene. Sin embargo, al no haber CBA para 2021, el bonus se contará en el mismo momento el que se cumpla. Es decir, cuando se anuncien los activos para el 16º partido de 49ers y Sherman juegue, el Cap Hit de Sherman aumenta automáticamente 62.000 $.

Y también se da la situación contraria. Pongamos que Sherman se ha perdido el partido de la Week 3. Por cada partido que Sherman esté inactivo a partir de entonces, su Cap Hit se reducirá 62.000 $/partido. Supongamos que Sherman, además de la Week 3, se pierde la Week 10. En el mismo momento en el que se anuncie, que Sherman está inactivo, 49ers gana 62.000$ de Cap Room. No se espera a 2021 para ajustar cuentas, se hace en el momento.

Además, semanalmente, una comisión de la NFL se reunirá para decidir si el incentivo va a ser alcanzado o no. Pongamos que un RB tiene un incentivo LTBE por llegar a 1500 yds de carrera de 1 M de $. Tras la Week 15, ese RB promedia 70 yds/partido, es decir, lleva 980 yds. En los siguientes 2 partidos debería lograr entonces 520 yds. de carrera. Como es prácticamente imposible, la comisión decide tras la Week 15 devolver al equipo en cuestión ese 1 M de $.

En los casos LTBE devueltos al equipo le da relativamente igual, ya que la mayoría de incentivos serán devueltos en las últimas semanas de la temporada. Sin embargo, los bonus NLTBE cobrados a mitad de temporada sí podrían suponer un problema para equipos con un Cap Room limitado.

Usemos, de forma hipotética, a Vikings. Su Cap Room antes de disputarse la Week 14 es de 750.000 $. Se juega el partido y un jugador logra un incentivo NLTBE por valor de 1 M de $. Problemas. Vikings se encuentra el lunes con un Cap Room negativo. Probablemente algún jugador tenga que ser cortado para volver a estar dentro de los límites.

Sin un CBA acordado, el vaivén del Salary Cap durante la temporada va a ser mayor que de costumbre.

 

“REGLA DEL 1 DE JUNIO”

Si un equipo corta a un jugador, el dinero garantizado que queda en su contrato se “acelera” y se absorbe de manera inmediata en el año de corte. Esto ya lo deberíais de saber, es el dinero muerto. Sin embargo, como mencionamos en el artículo de Salary Cap y contratos, existe una válvula de escape en el CBA para amortiguar el golpe. Es lo que se conoce como la “Regla del 1 de Junio”. Si el jugador es cortado después de esa fecha, el dinero muerto que deja se puede repartir entre la temporada actual y la siguiente.

Ahora hablamos de ti, David. No corras / cardswire.usatoday.com

Pongamos el ejemplo de David Johnson, RB de Arizona Cardinals. Ahora vamos a hablar de situaciones hipotéticas, así que espero que no os perdáis. Tras renovar en 2018, Johnson no ha rendido bien y Cardinals le corta antes de la temporada 2019. Eso dejaría un total de 25,2 M de $ de dinero muerto en la franquicia de Arizona. Como es mucho para asumir, Cardinals espera hasta el 2 de junio de 2019. Entonces corta a Johnson y entra en juego la “Regla del 1 de junio”. Los 25,2 M de $ de dinero muerto de Johnson se reparten entre 2019 y 2020, aliviando la presión financiera.

También existe la posibilidad de “etiquetar” hasta un máximo de 2 jugadores como “cortados tras el 1 de junio” aunque sean cortados antes. Supongamos que David Johnson fue cortado el 15 de marzo de 2019. En teoría, sus 25,2 M de $ contarían enteramente contra el Salary Cap en 2019. Pero Cardinals le etiqueta como “cortado tras el 1 de junio”. Eso implica que hasta el 1 de junio, los 25,2 M de $ siguen contando contra el Salary Cap de Arizona. Pero cuando llegue esa fecha, Cardinals podrá dividir el impacto del dinero muerto entre 2019 y 2020.

Bien, pues esta regla desaparece en 2020. Es decir, ningún equipo puede “transferir” dinero muerto a 2021. Si un jugador es cortado, da igual en qué fecha, su dinero muerto contará íntegramente contra el Salary Cap de 2020. La regla no era excesivamente usada salvo en casos de necesidad extrema, pero a algún equipo con un Cap Room limitado (como Jaguars o Vikings) les puede suponer un problema.

 

RESCISIÓN DE CONTRATOS

Al igual que en el caso anterior, la rescisión de contratos en 2020 va a traer algún que otro problema a las franquicias.

Quizás os suenen los contratos que firmaron Tom Brady en Patriots o Drew Brees en Saints. Estos contratos son un poco particulares por tener los denominados “void years” o “años ficticios”. Vamos a intentar explicarlos, agarraos los machos.

Drew Brees firmó en 2016 un contrato de 2 años (2016 y 2017) y 24,5 M de $ con un Signing Bonus de 30 M de $. Espera… ¿qué? No, no me he equivocado al poner las cifras ni nada, estos es así. En realidad, Brees firmó un contrato de 5 años por unos 70 M de $. Sin embargo, los años 2018-2020 son humo, no existen. Se incluyeron para prorratear el Signing Bonus. En lugar de computar 30 M de $ en 2 años (15 M/año), se usan 5 años (6 M/año). Así el equipo gana maniobrabilidad financiera a corto plazo. Una vez llegue 2018, esos 3 años restantes se evaporan. ¡PUF!

¿Quién no está feliz con un contrato así, verdad Drew? / Deseret.com

Brees cobró un salario muy bajo pero unos bonus muy altos que se pudieran repartir en años futuros. Al eliminarse su contrato dejaría entonces 18 M de $ de dinero muerto. Pero, y aquí viene el giro, los Saints etiquetan a Bress como “cortado tras el 1 de junio”. Así, esos 18 M de $ se reparten en 2018 y 2019 en caso de que Brees no renueve.

Sin embargo, en 2018 Brees firma un nuevo contrato, una renovación. 4 años por 68 M de $. En esos 68 M de $ se incluyen los 18 M de $ del contrato anterior y 50 nuevos a repartir en 4 años. Pero, otra vez, 2020 y 2021 son años ficticios. Se incluyen para amortiguar el impacto en el Salary Cap de Brees pero nunca, ni en sueños, se van a hacer efectivos.

Así, en 2020 el contrato de Brees se elimina automáticamente y deja 21,3 M de $ de dinero muerto. 15,9 M de $ en 2020 y 5,4 M de $ en 2021. Pero claro, ahora Saints, como hemos dicho antes, no puede repartir ese dinero entre 2020 y 2021 porque la “Regla del 1 de Junio” ya no existe.

Saints tiene dos soluciones: o dejar marcharse a Brees y comerse los 21,3 M de $ de dinero muerto en 2020; o huir hacia delante. Y por huir hacia delante me refiero a firmar a Brees por 2 años y, pongamos, 70 M de $. De esos 70 M de $, 21,3 corresponden al anterior contrato y 48,7 son nuevos. Las noticias dirán que Brees firma por 2 años y 48,7 M de $, pero no os dejéis engañar. Al contrato que firme Brees hay que sumarle 21,3 M de $. Pensaréis, ¿por qué Saints no sigue usando los “void years”? Pues porque al no haber un CBA firmado para más allá de 2021, no se puede especular con esta herramienta.

Si a ello le sumamos la regla arriba mencionada del 30%, el Cap Hit de Brees se va a disparar hasta, mínimo, los 30 M de $ en 2020.

Tarde o temprano Saints va a tener que hacer frente a una cantidad ingente de dinero muerto dejada por Drew Bress. La pregunta es cuándo y si el nuevo CBA les ayudará con esta cuestión.

Igual les pasa a Patriots con Brady, que firmó un contrato de 3 años y 85 M de $… 52 de los cuales eran puro humo. Su situación no es tan complicada, porque Brady deja “sólo” 13,5 M de $ de dinero muerto, pero es similar a la de Brees y los Saints.

Estas tres últimas normas (incentivos, “1 de junio” y rescisiones) van a traer quebraderos de cabeza a algún equipo para poder cuadrar sus cuentas. Por eso, algunos expertos especulan que suceda como en 2010, es decir, que en el verano haya un reajuste al alza del Salary Cap. En 2010 fue del 3%. Si en 2020 se mantiene en ese porcentaje, estaríamos hablando de unos 6 M de $ extra para cada equipo. Aunque esto es pura conjetura.

 

CARRYOVER

En el artículo de Salary Cap hablamos ya de la figura del Carryover. Básicamente, consiste en gastar en años venideros lo que no gastaste el año anterior. Es decir, el Cap Room que te sobra en 2019 puede ser trasladado (carried over) y gastarse al año siguiente, en 2020.

Al acabarse el CBA en 2020, no se puede trasladar el dinero sobrante a 2021. No se sabe si la figura del Carryover continuará como si nada en 2021. También es posible que se haga como en 2011, el año de inicio del actual CBA, y se pongan “los marcadores a cero”. Esta segunda opción significaría que el Cap Room sobrante en 2020 se perdería.

Pongamos un ejemplo sobre cómo actuarían las franquicias. Los Tampa Bay Buccaneers lideran la NFL con casi 85 M de $ de Cap Room disponibles. La franquicia de Tampa se enfrenta a una disyuntiva: ¿gasta los 85 M de $ (o su mayor parte) en 2020 o especula con que el Carryover continuará en 2021?

En el primer caso, significaría que los Bucs firman contratos con poco dinero en el futuro (Signing Bonus bajos y cláusulas) y con muchos incentivos en 2020 (recordamos que los incentivos se cargan en esta temporada, sean de un tipo u otro) para “comerse” ese espacio salarial pero no hipotecar el futuro.

En el segundo caso, Tampa actuaría con “normalidad”. Es decir, firmaría contratos similares a los que hemos venido viendo hasta ahora y especularía con que Cap Room sobrante se pase al 2021.

 

FUTURO CBA

Ahora que llega el final del artículo, os voy a ser sinceros. Es probable que el tiempo que hayáis invertido leyendo estas líneas (y el que yo he invertido escribiéndolas) sea una completa pérdida de tiempo. Si un acuerdo para un nuevo CBA se alcanza antes del 18 de marzo de 2020, cuando empieza el Año Nuevo de la NFL, entonces todo lo explicado aquí dejará de tener valor.

Si hay un CBA acordado, seguramente no se puedan usar Franchise Tag y Transition Tag, sino que se volverá a como era antes, solamente uno de los dos. Al haberse acordado un nuevo CBA y haber Salary Cap en 2021, la regla del 30% desaparece. Lo mismo sucede con los incentivos, que se volverían a ajustar en 2021. Las rescisiones de contratos volverían a ser como las conocemos, lo que para Saints sería un verdadero alivio. Y, probablemente, el carryover siga funcionando como hasta ahora, sin interrupción.

Esto se debe a que el nuevo CBA entraría en vigor de forma inmediata, ya en 2020, y duraría 10 años, hasta 2029. Es decir, no se espera a que el actual termine para que el nuevo empiece. Pequeños cambios en los salarios, sobre todo en los rookies y en el mínimo de veteranos, podrían afectar a las franquicias.

Pero además, la actual propuesta de CBA tiene cambios mayores. Se especula con un partido más de temporada regular, 17 en lugar de 16. ¿Mi apuesta? Si esto sucede, sucederá para la temporada 2023. En 2022 termina el actual contrato entre la NFL y las TV, así que para 2023 habrá que firmar uno nuevo. Es el momento de aumentar la temporada regular y de que la NFL saque tajada. Y si la NFL saca tajada, a partir de 2023 el Salary Cap se va a disparar. Y mucho.

Estad atentos, porque quién mejor sepa leer estos próximos años (2020-2023) va a tener una gran ventaja.

 

Show me the money / performgroup.com

 

Adrian de Blas representando a @Titans_esp