COOLEST DE #COOLLEGE NATION: WEEK 4

#12 NOTRE DAME FIGHTING IRISH Vs. WISCONSIN BADGERS

#GoIrish ☘️ Vs. #OnWisconsin ?

? 25/09/21

⏳ 18:00 / ? FOX

? SOLDIER FIELD, CHICAGO (ILLINOIS) 

 

El sábado a las 18 horas, en horario español, dará comienzo uno de los partidos de la jornada en el College Football, el #12 de la nación Notre Dame y el #18 Wisconsin se verán las caras en un tradicional clásico, que se disputará en terreno neutral, jugándose en el Soldier Field, la casa de los Chicago Bears de la NFL. Wisconsin regresa a la competición después de haber descansado en su semana de ‘bye’, por lo que le da una cierta ventaja frente a su rival, ya que ha tenido una semana más para prepararlo en buenas condiciones. Coolest 

Los Badgers se presentan con un 1-1 en su récord de temporada, perdiendo el primer partido contra Penn State y ganando a Eastern Michigan, por lo que el equipo entrenado por Paul Chryst deberá de ir a por todas para no verse descolgado definitivamente de los puestos altos que optan por los Playoffs. Por su parte, los Fighting Irish se presentan al partido invictos, ganando sus tres anteriores partidos frente a Florida State, Toledo y Purdue, aunque también es cierto que su juego no está convenciendo, ya que han ganado los partidos sin holgura y con ciertas dudas en su juego.

 

 

NOTRE DAME – @NDFootball

Los Fighting Irish deberán convencer en su juego para poder ser considerados como un equipo contendiente de Playoffs. Ellos mismos saben que, al estar fuera de cualquier conferencia, por ser ‘independientes’, un mínimo pinchazo en la temporada les haría perder casi todas opciones de postemporada, por lo que ganar el partido se antoja vital para ellos, y más si se trata de un equipo rankeado.

En ataque, están teniendo bastantes problemas para implantar su juego terrestre, y que es fundamental en los esquemas de Brian Kelly, su RB estrella, Kyren Williams tan solo lleva 211 yardas y 2 TDs en tres partidos disputados. Tras hacer una magnífica temporada 2020, todo hace indicar que el trabajo de la OL a la hora de abrir espacios se necesitará más que nunca frente a una de las mejores defensas de la nación, con un poderoso front seven. Otra de las curiosidades del partido será ver al QB Jack Coan enfrentarse a su antiguo equipo, ya que este año fue transferido desde Wisconsin, por lo tanto veremos cómo se comporta frente a sus antiguos compañeros. El propio Coan está jugando bien en su nuevo equipo, sin cometer muchos errores y sin arriesgar en pases profundos, aunque, como a todo el equipo, le está costando cuajar un gran partido y convencer de su capacidad para liderar el ataque y convencer a los aficionados. Hasta el momento Jack Coan lleva 828 yardas de pase, 8 TDs y 2 interceptaciones, siendo el TE Michael Mayer su mejor referencia en el juego aéreo, con 206 yardas y 3 TDs. Otro jugador que podemos destacar es el RB Chris Tyree, que junto con su compañero de posición, Kyren Williams, está aportando números extra en la faceta receptora, ante la falta de rendimiento en la parte terrestre.

 

Jack Coan, ante su ex-equipo / actionnetwork.com

 

En defensa, tampoco están convenciendo del todo en su juego. Es una zaga a la que le anotan 26’7 puntos de media por partido y que permite 381 yardas.  Lo cierto es que no es típico de los Fighting Irish, y ya en su último encuentro frente a Purdue se notó bastante mejoría con respecto a los dos partidos anteriores. Habrá que estar atentos a su rendimiento en el próximo partido, sobre todo, defendiendo la carrera de los Badgers. Su front seven deberá de jugar al 100%, habrá que prestar atención al LB JD Bertrand, con 34 placajes, 4 para perdida de yardas, 1 sack y 1 fumble recuperado; al DE Isaiah Foskey, con 15 placajes, 3’5 sacks y 1 pase defendido; además de su estrella en la secundaria, el S Kyle Hamilton, con 21 placajes, 2 para pérdida de yardas, 3 interceptaciones y 2 pases defendidos. De momento, Hamilton se encuentra entre algodones para el partido,  pronosticado como cuestionable durante toda la semana, con problemas de espalda. Si definitivamente juega el partido, los de Madison deberán de evitarlo a toda costa.

 

WISCONSIN – @BadgerFootball

Los Badgers se enfrentan primero a ellos mismos, tendrán que hacer frente a numerosas dudas, sobre todo, en ataque, cometiendo errores frente a Penn State, y jugando un ataque que no convence ni hace mucho daño a las defensivas rivales. Les cuesta mucho desenvolverse en Red Zone, pues se bloquea y no se consigue anotar TDs, en cierta manera por su falta de eficacia en el juego aéreo.

En ataque, los Badgers siempre se caracterizan por dominio en el juego terrestre. Ante Notre Dame, con una defensiva fuerte parando la carrera se verá obligada a utilizar más su juego aéreo, por lo que deberá mejorar considerablemente en ese apartado, ya que les está costando mucho generar peligro a pase. La llegada de Graham Mertz al equipo, en 2019, fue muy bien recibida y causó euforia en la afición tejona, pero, tras un 2020 en el que apenas compitió el equipo, y un comienzo de temporada bastante discreto, está desilusionando a gran parte de los Badgers, por lo que hay una gran expectación por ver explotar de una vez a su jugador estrella. Se espera que frente a un equipo de entidad como el de Notre Dame, Graham Mertz juegue a gran nivel y despeje dudas en cuanto a su rendimiento, aunque por otro lado la labor de Paul Chryst siempre deja mucho que desear, sobre todo, a la hora de rodearle mejor, y crear un playbook acorde a las características de su QB también da que pensar a los aficionados. 

En esta semana de descanso, los de Madison han tenido que trabajar en ello, en buscar una mejoría en su juego aéreo, ya que hasta el momento han conseguido tan solo 175 yardas de pase y ningún TD. Solo el aspecto terrestre se salva de la quema, con un magnífico rendimiento por parte del comité de RBs que utilizan, liderándolo el RB transfer de Clemson, Chez Mullusi, el que ha conseguido ya 265 yardas y 2 TDs en dos partidos disputados.

 

Chez Mullusi, eludiendo adversarios / badgerswire.usatoday.com

 

La defensiva badger es su gran arma, una defensiva considerada de las mejores de la nación año tras año, con front seven dominantes tanto en la presión al QB como parando carrera. Este año tan solo ha permitido 33 yardas terrestres en sus dos partidos, por lo que solucionar los problemas de carrera de Notre Dame se antoja algo difícil en el próximo partido. Aunque la defensiva de Wisconsin es dominante en su front seven, tiene un importante talón de Aquiles, y es su cuerpo de CBs, pese a tener safeties de calidad, no consiguen CBs que se impongan a sus rivales por el exterior del campo, por lo que los Fighting Irish deberían de aprovecharse de ello, siempre y cuando le dé tiempo a Coan a lanzar en perfectas condiciones. Habrá que prestar atención al LB Jack Sanborn, mariscal defensivo que lleva 6 placajes, 3 para pérdida de yardas y 1 sack; otros jugadores importantes serán el S Scott Nelson, el DT Matt Henningsen y el OLB Nick Herbig.

 

En definitiva, se enfrentan dos universidades muy similares en esquemas  y con dificultades en su juego, que tienen que convencer a sus seguidores haciendo un gran partido. Siempre han tenido líneas ofensivas dominantes, dando prioridad a la carrera y utilizando bastante a su TE, en defensa suelen tener ‘front seven’ dominantes con secundaria oportunista. Este partido no será menos, por lógica ganará aquel equipo que se imponga en las trincheras, aunque este año se antoja algo diferente, ya que ante las dificultades en el juego terrestre de los Fighting Irish y el aéreo de los Badgers, tendrá que haber cambios para solucionar los problemas, ¿Conseguirá Notre Dame implantar su juego de carrera y ser más convincente? ¿Serán capaces los de Wisconsin de generar peligro con su juego aéreo? ¿Quién será el que gane en ‘La ciudad del viento’? ¿Los Fighting Irish o los Badgers? Se espera una lucha a vida o muerte.

 

@LuisMa_80

 

TEXAS TECH RED RAIDERS at TEXAS LONGHORNS

#WreckEm ⚫️? Vs. #HookEm ?

? 25/09/21

⏳18:00 / ? ABC

? DKR-TEXAS MEMORIAL STADIUM, AUSTIN (TEXAS) 

 

Longhorns y Red Raiders batallan por las The Chancellor’s Spurs (Las Espuelas del Canciller). Un encuentro de máxima rivalidad entre programas tejanos que se remonta al 6 de octubre de 1928, fecha en la que el equipo de Austin doblegó 12-0 al conjunto de Lubbock. El último partido de la serie aconteció el 26 de septiembre de 2020 y resultó ser un trepidante partido en el que los Longhorns consiguieron una remontada imposible (63-56). La serie lleva 70 partidos y es dominada claramente por Texas (53 victorias y 17 derrotas). La próxima batalla por las Espuelas del Canciller tendrá lugar esta tarde a las 18:00 horas.

 

TEXAS TECH – @TexasTechFB

Texas Tech llega a Austin con la moral por las nubes, tras colocarse con un -inaudito- 3-0 y vapulear 54-21 a Florida International. Matt Wells ha conseguido equilibrar el equipo, dejando atrás la -otrora- sempiterna Air Raid y otorgándole más importancia al juego de carrera. El encuentro contra los Panthers no fue tan fácil como dice el marcador, pues FIU dominó prácticamente la totalidad del primer cuarto por 7-0, neutralizando la ofensiva red raider. Al final de este periodo, Texas Tech dominó y dejaría encarrilado el partido con un claro 28-7 en el segundo cuarto. El conjunto de Lubbock arrolló a FIU con 584 yardas totales en ataque, 31 primeros downs y una posesión de más de 32 minutos. Wells está sabiendo confeccionar un equipo que puede aspirar a todo en la Big 12. 

Los Red Raiders arribarán al Texas Memorial Stadium siendo los 41º de la nación en ofensiva aérea, situándose, además, como los 63º en ataque terrestre y promediando algo menos de 200 yardas por tierra en cada envite. La metamorfosis de los Red Raiders es alucinante y fruto del esfuerzo de un técnico como Matt Wells, que está llevando al programa tejano por la senda del éxito. Además, Texas Tech promedia la escalofriante cifra de 40 puntos por partido, permitiendo apenas 21’3 tantos (algo inusual en la historia de las defensivas red raiders). El quarterback Tyler Shough ha encajado a la perfección en el sistema de Wells, erigiéndose en ese líder ofensivo tan necesario para los de Lubbock. Ha completado 55 de 81 pases para 804 yardas, 6 touchdowns y 2 interceptaciones. Su conexión con el receptor Erik Ezukanma (16 recepciones, 350 yardas, 1 TD) es sencillamente espectacular. Ekuzanma ha totalizado 14 recepciones, 226 yardas y 2 TDs en sus duelos personales contra Texas, así que así que Pete Kwiatkowwski bien haría en preocuparse por atarlo en corto. El cuerpo aéreo red raider cuenta con dos muescas más en el revólver, que pueden generar mucho daño en la secundaria longhorn: Travis Koontz (10 recepciones, 81 yardas, 2 TDs) y Kaylon Geiger (9 recepciones, 132 yardas). 

 

Erik Ekuzanma corriendo hacia el TD / Gunsupnation.com

 

La gran baza de la ofensiva orquestado por Wells es su dualidad y su peligrosidad tanto por aire como por tierra, algo que no recordaban, en Lubbock, ni los más viejos del lugar. El running back sophomore Tahj Brooks ha aprovechado los problemas físicos de esa bestia llamada SaRodorick Thompson para erigirse en el auténtico jinete del backfield red raider. Acumula 35 carreras para 284 yardas y 4 touchdowns. Su compañero terrestre es Xavier White, que también está aportando en esta faceta: 18 carreras, 128 yardas, 1 anotación. Para el partido de esta tarde se espera que SaRodorick Thompson también sea de la partida, y si la fanaticada longhorn recuerda su exhibición del año pasado, puede empezar a preocuparse. La ofensiva de Texas Tech se completa con la fiabilidad del kicker Jonathan Garibay, cuya labor puede ser decisiva. 

En defensa, el trío de linebackers formado por Colin Schooler, Riko Jeffers y Krishon Merriweather se presentan como una auténtica baza contra el juego de carrera rival, erigiéndose en implacables placadores. En la secundaria, debo hacer hincapié en la excelencia del juego de Reggie Pearson Jr. y DaMarcus Fields. Además, el lindero defensivo Jaylon Hutchings sabe meter presión al mariscal de campo contrario. 

 

 

TEXAS – @TexasFootball

Las huestes de Steve Sarkisian supieron lamerse sus heridas, tras el infausto viaje a Fayetteville, con un auténtico vapuleo al rival estatal Rice. El conjunto sito en Houston fue destrozado literalmente por Texas 58-0. Los Longhorns totalizaron unas titánicas 620 yardas, con 26 primeros downs y una control del ovoide de más de 30 minutos. 

Las grandes esperanzas ofensivas puestas en Sarkisian por los gerifaltes de Austin aún no han sido satisfechas, pues Texas genera auténtica peligro exclusivamente por tierra (equipo 14º en yardas terrestres). El juego aéreo está en peligro de extinción, pues los Longhorns son los 99º de la nación en yardas por aire, con apenas 192 yardas por encuentro. Cualquier tiempo pasado fue mejor y la sombra de Sam Ehlinger sigue siendo demasiado alargada. Las dudas comienzan por el liderazgo del equipo en el puesto de quarterback. Tras un inicio arrollador del freshman Hudson Card (recuérdese su gran gestión del juego ante Louisiana), el chico de Austin estuvo desaparecido ante la ferocidad de la zaga de Arkansas. Su puesto fue asumido por el junior Casey Thompson, que ha sido ratificado como titular ante la amenaza que supone el partido frente a Texas Tech. Card ha conseguido 24 de 39 pases completados para 314 yardas y 2 TDs. Casey Thompson se presenta como una alternativa más dual, gracias a su amenaza terrestre. Ha completado 24 de 31 pases, sumando 262 yardas, 3 TDs, 51 yardas terrestres y 2 anotaciones. 

 

Steve Sarkisian tiene camino por recorrer aun… / Heartlandcollegesports.com

 

El gran plus del ataque tejano es su omnipotente juego terrestre, que promedia 245 yardas por partido. Bojan Robinson es el adalid de esta especialidad, acercándose -a pesar de ser sophomore- exhibición tras exhibición al circo profesional y siendo el responsable de 52 acarreos, 299 yardas y 5 anotaciones. Por si el concurso de Robinson fuera poco, la navaja terrestre de Texas cuenta con más peligrosas aristas en las figuras de Keila Robinson (19 carreras, 133 yardas, 1 TD), Roschon Johnson (12 acarreos, 142 yardas, 1 TD) y Jonathon Brooks (9 carreras, 63 yardas, 1 TD). Por aire, el agente más agresivo es Jonathan Whittington con 13 recepciones, 152 yardas y 1 TD de carrera. Se espera mucho más de receptores como Xavier Worthy o el propio Whittington. 

El gran arma de la defensiva longhorn esta temporada es su desempeño contra la carrera rival, algo que se presenta vital ante el novedoso poderío terrestre de Texas Tech. La clave del encuentro, para Texas, puede ser tratar de frenar esa potente conexión entre Shough y Ekuzanma. En este sentido, la labor de D’Shawn Jamison, B.J. Foster, Anthony Cook o Josh Thompson se antoja vital. Demarvion Overshown, Luke Brockermeyer y Ovie Oghoufo seguirán dejando su estela de excelentes linebackers sobre el emparrillado del remozado Texas Memorial Stadium

 

@EduVall82

 

#7 TEXAS A&M AGGIES Vs. #16 ARKANSAS RAZORBACKS

“South West Classic Game”

#GigEm 1️⃣2️⃣ Vs. #WooPigSooie ?

? 25/09/21

⏳21:30 / ? CBS

? AT&T STADIUM, ARLINGTON (TEXAS)

 

Texas A&M y Arkansas volverán a ofrecernos -como cada año- un nuevo capítulo de su enconada rivalidad, con una reedición del tradicional Southwest Classic Game. No obstante, en esta ocasión, Arkansas no llega a este envite como la clásica “perita en dulce”, sino como un conjunto imbatido, con una agresiva y espectacular defensiva, siendo dirigido por un entrenador de gran nivel -Sam Pittman- y que se presenta como una alternativa real en la Southeastern Conference. Las mesnadas aleccionadas por Jimbo Fisher también llegan invictos al duelo sureño, con una evolución -desde el año pasado- sensacional y con ganas de erigirse en uno de los conjuntos que puedan ser considerados en la pugna por arrebatar el cetro de la SEC a la inmortal Alabama. Será un duelo de jóvenes valores en el puesto de quarterback: K.J. Jefferson frente a Zach Calzada. 

 

TEXAS A&M – @AggieFootball

Los Aggies llegan a su test más importante de la temporada tras derrotar a New Mexico, Colorado (en un cerradísimo encuentro) y Kent State. El rey murió, viva el nuevo rey. Efectivamente, tras el pase de Kellen Mond a la NFL, Jimbo Fisher ha confiado en el sophomore Zach Calzada para asumir el liderazgo del ataque aggie.  La lesión de Haynes King ante los Buffaloes supuso la entronización de Calzada, que no ha defraudado desde entonces. En su primer partido como titular ante New Mexico, Calzada alcanzó las 275 yardas para 3 TDs y 1 interceptación, completando el 57’6% de sus pases intentados. La zaga de Arkansas supondrá la verdadera prueba real para el joven Calzada. 

La excelencia terrestre de Texas A&M se presupone que pondrá las cosas más sencillas para Calzada, pues ese dúo impresionante formado por Isaiah Spiller (40 acarreos, 250 yardas, 1 TD) y Devon Achane (30 carreras, 203 yardas, 2 anotaciones) asegura una cantidad ingente de yardas por encuentro. La carrera aggie produce una media de 185 yardas por partido. 

 

Devon Achane, rumbo a la tierra prometida / express-news.com

 

Malas noticias sobrevuelan sobre el juego aéreo de los Aggies. A las dudas sobre el desempeño de Calzada ante una defensiva tan agresiva como la de los Razorbacks, se une la ausencia de Caleb Chapman, a la más que probable baja de Ainias Smith (que sufrió una conmoción cerebral la pasada jornada) y al out de una de las claves de la línea ofensiva, Layden Robinson. Por tanto, el excepcional tight end Jalen Wydermyer se antoja que tendrá un concurso decisivo en este partido a la hora de restar presión al joven Calzada. 

El desempeño decisivo volverá a ser -una vez más- crucial para el devenir del encuentro. La zaga aggie solo ha concedido 2 TDs en sus tres partidos de esta campaña, convirtiéndose en una auténtica máquina de producir turnovers y condicionar el rumbo de los partidos. El defensive end DeMarvin Leal es el indiscutible líder de la defensa, consiguiendo 7 tackles y 2’5 sacks. Leal será, sin duda, un talento que será reclutado en la primera ronda del próximo NFL Draft. Junto a Leal, sobresalen el linebacker Aaron Hansford y los defensive backs Antonio Johnson y Demani Richardson. 

 

ARKANSAS – @RazorbackFootball

Arkansas arribará a Arlington con un pleno de victorias en su casillero, tras hacer hincar la rodilla a Rice, Texas y Georgia Southern. Sam Pittman ha reflotado un navío que parecía perdido a la deriva, encomendándolo por el buen camino. Pittman ha partido de la confección de una defensiva excelente, que ya dejó buenas muestras la pasada campaña. Este año se está apreciando una implementación del juego de ataque. Así que, por primera vez en décadas, se anisaban signos de regocijo entre la fanaticada de Fayetteville. 

Defensa, defensa, defensa y… más defensa. Texas A&M se va a ver las caras con una de las mejores defensas de toda la nación, una zaga que solo concede la pírrica cifra de 16 puntos por encuentro. La secundaria razorback es una máquina de forzar errores en el rival, siendo dirigida Jalen Catalon, Joe Foucha y Greg Brooks Jr. Teniendo en cuenta las bajas de Texas A&M, la fragilidad de su ataque por aire y las dudas que puede generar Calzada, este matchup puede ser la clave del partido. 

La defensa contra la carrera de Arkansas es sencillamente sensacional. Los Razorbacks apenas conceden 3’23 yardas por acarreo, teniendo uno de los tríos de linebackers más arrolladoras de la nación. La tripleta Grant Morgan, Hayden Henry y Bumper Pool solo pueden asegurar sudor, pavor y lágrimas para el quarterback rival, así que Calzada tendrá la diversión asegurada esta noche.   

 

Hayden Henry haciendo lo que mejor sabe… / wholehogsports.com

 

Una de las bazas más importantes del ataque de Arkansas es su extraordinario desempeño por tierra. K.J. Jefferson es un quarterback dual que presenta más peligro por tierra que por aire. El sustituto del ínclito Felipe Franks ha completado el 61’9% de sus pases intentados, con 632 yardas, 4 TDs y 2 interceptaciones, sumando 180 yardas terrestres y 2 anotaciones. Su capacidad de escape será la mejor noticia para tratar de escapar de Leal y sus compañeros de defensa. El gran problema de Jefferson es su incapacidad para dar pases en largos, a pesar de tener un talento a su servicio como Treylon Burks (206 yardas, 1 TD). Jefferson se medirá a la mejor defensa contra el pase, una zaga que solo ha permitido 77’3 yardas por encuentro. Burks, uno de los grandes receptores del próximo NFL Draft, ya está totalmente recuperado de sus molestias de inicio de temporada y su concurso será determinante si Pittman y los suyos quieren salir victoriosos del AT&T Stadium. 

Por tierra, el máximo agente de Arkansas es el running back Trelon Smith, que tendrá que superar una compleja prueba ante una defensa tan potente. El corredor junior acumula 42 intentos, 216 yardas y 3 TDs. 

 

@EduVall82

 

SMU MUSTANGS at TCU HORNED FROGS

#PonyExpress ? Vs. #GoFrogs ?

? 25/09/21

⏳18:00 / ? FS1

? AMON G. CARTER STADIUM, FORT WORTH (TEXAS)

 

Uno de los duelos tejanos por excelencia es la rivalidad existente entre TCU Horned Frogs y SMU Mustangs. Ambos campus universitarios se encuentran a pocas millas de distancia -TCU (Fort Wortth) y SMU (University Park)-, lo que agudiza ese sentimiento de rivalidad. Horned Frogs y Mustangs se disputan un curioso trofeo… ¡una vieja sartén de hierro! El primer enfrentamiento se produjo el 18 de octubre de 1915 (TCU arrasó 43-0 a SMU). Desde entonces, se han producido 99 enfrentamientos más (solo hubo un patrón de 6 años, desde 1915), siendo el último partido, el disputado el 21 de septiembre de 2019 (SMU derrotó 41-38 a TCU). El ganador no solo se lleva el Iron Skillet, sino que domina el área de Fort Worth durante un año.

El próximo sábado a las 18h en horario español, en el Amon G. Carter Stadium de Fort Worth (Texas), se vivirá el partido de rivalidad 100 entre SMU Mustangs y TCU Horned Frogs. Por lo tanto, Coollege Nation no va a perder la oportunidad de celebrarlo de la mejor manera posible, dedicándole un #Coolest a esta histórica y centenaria rivalidad. Ambas universidades llevan 100 partidos disputados entre ellas, comenzando su andadura a partir de 1915 (año de creación del equipo de football de los Mustangs), la serie la va ganando TCU 51-41-7.

Ambos equipos se presentan al partido invictos, SMU lleva un récord de 3-0, ganando contra Abilene Christian (equipo FCS), North Texas y Louisiana Tech, este último in extremis en un final de infarto. Mientras que TCU va 2-0, con victorias sobre Duquesne (equipo FCS) y California, con un partido muy igualado hasta el final. La pasada semana los Horned Frogs descansaron, ya que tenían semana de bye, por lo tanto, parten con cierta ventaja sobre su rival, ya que además de jugar en casa, vienen de descanso y de haber preparado el partido con el doble de tiempo que su rival, aunque siendo partido de rivalidad cualquier cosa podría pasar.

 

 

SMU – @SMU_Football

Los Mustangs entrenados por Sonny Dykes son una máquina de anotar, una ofensiva descomunal, muy bien engrasada, consiguiendo hacer una media de 534’7 yardas  y 43’3 puntos por partido.

Para todo aquel aficionado al que le gusten los ataques totales y los equipos ofensivos, no puede perderse a los Mustangs. Un equipo en el que el QB Tanner Mordecai  (transfer desde Oklahoma) se está erigiendo como el líder indiscutible, jugando a un gran nivel y siendo decisivo en los momentos clave. Sus números lo avalan, en tres partidos lleva 1023 yardas de pase, 16 TDs y 2 interceptaciones, teniendo un 73% de pases completados.

 

Tanner Mordecai reparte siempre entre sus receptores / dallasnews.com

 

Sus pases están muy bien repartidos, habiendo hasta 4 jugadores con más de 10 recepciones a estas alturas de competición, los WRs Danny Gray, Reggie Roberson Jr., Rashee Rice y el TE Grant Calcaterra (transfer desde Oklahoma). En el apartado terrestre también hay que destacar al comité de RBs formado por Ulysses Bentley IV, que ha conseguido 250 yardas de carrera y 1 TD, además de 33 yardas y 1 TD en 6 recepciones; y por Tre Siggers (transfer desde North Texas), que lleva 147 yardas sin TD. La defensiva de TCU tendrá que trabajar mucho para sacar algo positivo de este enfrentamiento, y su objetivo será evitar que anoten puntos en cada drive que tengan, para que el ataque de TCU pueda tener opciones de sacar un cierto margen en el marcador.

La defensa de SMU, por el contrario, permite también muchas yardas, 440 yardas de media por partido, por lo que deberá de trabajar para evitarlo. Es una defensa oportunista, ya que saca provecho de las prisas del rival por seguir el ritmo anotador de los Mustangs: llevan ya 6 interceptaciones y 4 fumbles forzados, destacando sus tres safeties Trevor Denbow, Chace Cromartie,  y sobre todo, el freshman Isaiah Nwokobia, que ha conseguido hacer 11 placajes, 1 para pérdida de yardas, 1 sack, 2 interceptaciones, 1 pase defendido y 1 fumble forzado.

 

TCU – @TCUFootball

Los Horned Frogs deberán de frenar el ímpetu anotador de su rival, para ello el entrenador Gary Patterson, seguramente habrá diseñado algún plan durante su semana de descanso.

El ataque de TCU en sus dos partidos de 2021, no se queda tan atrás con respecto al de su rival, ya que han conseguido hacer 468 yardas y anotar 39’5 puntos por partido. El ataque está  balanceado, consiguiendo 243’5 yardas aéreas y 224’5 terrestres. La estrella ofensiva es el QB dual threat, Max Duggan, que en dos partidos ha conseguido 441 yardas de pase 4 TDs y 2 interceptaciones, además de 80 yardas terrestres y otros 2 TDs. Su WR referencia es Quentin Johnston, con 9 recepciones para 133 yardas y 2 TDs. En el apartado terrestre destaca el RB 5 estrellas, Zach Evans, que -en su año sophomore- está demostrando la calidad que atesora, consiguiendo 217 yardas de carrera y 2 TDs, jugando un magnífico partido frente a California.

 

Ochaun Mathis / gofrogs.com

 

La defensiva tiene que demostrar todavía de lo que es capaz, ya que hasta ahora no ha brillado como se esperaba en lo poco que llevamos de temporada, siendo las defensas de Gary Patterson bastante rocosas, con una DL poderosa metiendo presión y el uso de los safeties por todo el campo, suele dar muy buenos frutos al equipo. Hasta el momento, la defensiva ha permitido anotar 17’5 puntos por partido, en donde tan solo ha concedido 97 yardas terrestres y 192 de pase por partido. Los jugadores a seguir serán el DE Ochaun Mathis, el LB Dee Winters y el S La’Kendrick Van Zandt.

 

Todo puede pasar en la Batalla por la Sartén de Hierro, cualquiera de los dos puede ganarla ante las circunstancias en las que se presentan ambos contendientes. SMU viene con una ofensiva que jugando a ver quién anota más puntos, puede salir victorioso, aunque se enfrenta a un equipo de mayor entidad que sus tres rivales anteriores, y se enfrenta a una mejor defensiva. Además, hay que añadir que los Horned Frogs vienen de semana de descanso y juegan en su casa, por lo que deberán salir con la etiqueta de favoritos.

 

@LuisMa_80

 

@CoollegeNation 

#CoollegeNation – #BeTheCoolest

 

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