Tom Brady tiene abierta su continuidad en el equipo de New England e incluso seguir jugando. A pesar de su demostrado amor por Robert Kraft, Bill Belichick y los New England Patriots aún no ha decidido su futuro. Parece que ni él mismo aun lo tiene decidido.
Tom Brady, futuro incierto
En la rueda de prensa posterior a la derrota en Wildcard del sábado, y a preguntas de los periodistas sobre su continuidad en la próxima campaña, Tom Brady se limitó a afirmar que aun no lo sabe y que no es capaz de predecirlo. Creyendo firmemente que la decisión aún no está tomada y además añadiendo que sin embargo él sí que quiere seguir jugando, ¿Cuales son las situaciones o cuestiones que pueden afectar a esta decisión?
Recopilando las elementos considerados que pueden afectar: contrato, el vil dinero a recibir o la condición física entre otros. Por todos estos puntos, aún abiertos y probablemente otros menos evidentes, Tom Brady aún no puede decidir si jugará y lo que aún parece más importante, con quién jugará.
Tom Brady el contrato de las múltiples incógnitas
Este verano, en Agosto, nos desayunábamos con la extensión de contrato de Tom Brady. Lo que parecía en un principio un incremento del dinero a recibir este año de 15M$ hasta 23M$ y una extensión de dos años más, hasta 2021, al estudiarlo en detalle era básicamente el final de la relación contractual entre ambas partes en Marzo de 2020.
Tom Brady cobraría 23M$ en 2019 pero después ambas partes serán libres. De hecho New England perdería el derecho a ponerle el “franchise tag”. De facto el contrato era un “este año y luego ya veremos”
Mucho se ha hablado y se hablará sobre las condiciones deseadas por Tom Brady y las posibilidades de New England en dárselas. Los parámetros que todos podemos imaginar: dinero, extensión temporal y la cantidad garantizada son los puntos que saltan enseguida en cualquier conversación. En lo que se refiere al dinero, Tom Brady habrá cobrado 23M$ en este 2019. Esta cantidad está por debajo de varios equipos como Green Bay Packers, Seattle Seahawks o LA Rams han pagado este año a sus QBs franquicia. Pero está en un nivel similar a lo recibido por Drew Brees que podría considerarse una situación más similar a la que Tom Brady y New England pueden estar viviendo.
Por lo tanto, si Tom Brady buscara ser el QB mejor pagado, por supuesto que en la agencia libre algún equipo, puede que varios, estarían de acuerdo en hacerle el QB mejor pagado de la liga. En el entorno de los 35M$ por año. Otra cosa sería hablar de la longitud de ese contrato. Esa es otra pregunta ¿Qué duración quiere Tom Brady y cual están New England y los demás equipos dispuestos a darle? Mucho se puede elucubrar si estamos hablando de un contrato año a año o sin embargo quiere asegurarse los 3 años restantes hasta los ya famosos 45 años.
Solo podemos pensar que puede ser uno de los puntos claves. Si Tom Brady pretende tener un contrato por tres años con el dinero prácticamente garantizado puede ser uno de los puntos conflictivos y limitaría los equipos dispuestos. El riesgo es superior al de firmarle por uno o dos años.
En este punto, a diferencia del apartado de los emolumentos anuales, New England estaría por delante del resto. Darle tres años garantizados a tu QB franquicia, a la historia viva de tu equipo no sería un gran problema. Estoy convencido. Sería la manera de mostrar el respeto que se tiene por él en la franquicia. Además que Stidham, el QB reserva tiene contrato de rookie, elección de cuarta ronda, con un impacto anual menor al millón de dólares.
El dinero no debería ser un problema para Tom Brady después de una carrera con más de 200M$ recibidos únicamente en salarios y una esposa que gana y ha ganado más que él. Pero sin embargo sí que puede significar el honor de ser el mejor pagado. No es descabellado pensar que el mejor QB de la historia quiera ser el mejor pagado, aunque sea un único año. Puede estar aquí una de las claves, puesto que New England no paga valores de mercado quitando a dos o tres de sus posiciones. En estos momentos Dont’a Hightower o Devin McCourty. A Tom Brady nunca le ha pagado a valor de mercado de QB de esta NFL.
Tom Brady y su pelea contra el tiempo
Decía este verano que él debía probarse cada principio de temporada. Debía ver en cuanto podía hacer las 40 yardas, si podía seguir lanzando a 50 o 60 yardas y si seguía teniendo la potencia de brazo y precisión del año anterior.
Estas declaraciones ya nos daban ciertas pistas. A pesar de su empeño en jugar hasta los 45 y fundamentado en su amor por este deporte, sin embargo era consciente que no quería tener que retirarse después de lo que llaman los americanos “The cliff”. El acantilado, en español. Se refiere a la caída de nivel de manera repentina y acusada de los QBs al final de su carrera. Probablemente consciente de lo visto con el último año de QBs a los que ha respetado e incluso venerado como Joe Montana o Peyton Manning.
Él quiere jugar pero lo quiere hacer sin empañar su carrera con un año final no digno de su legado. Es por esto que el físico seguro será uno de los puntos realmente importantes para decidirse. Aunque la probable fecha, en marzo, deje en un segundo plano este punto. Tras la finalización de su contrato a mediados de Marzo de este año, deberá tener una decisión tomada. De otra manera estaríamos hablando de algo similar a lo que hacía Brett Favre. retirándose en primavera y volviendo cada verano. Hasta que los Packers decidieron dar el acertado paso con Aaron Rodgers. Si la decisión se retrasara podría estar impactando la planificación de la plantilla y el draft del equipo.
¿Pero quien no esperaría por Tom Brady?
Seguir jugando, pero ¿donde?
Tom Brady a la pregunta de si piensa en retirarse respondió ayer, tras el partido: “pretty unlikely. Hopefully unlikely”. Que en castellano sería algo así como: “bastante improbable. Espero que improbable”. Esto quiere decir que quiere jugar pero que no sabe qué sucederá.
Los que saben algo de la materia aseguran que quiere seguir jugando pero no está tan claro que decida continuar en el equipo que lo drafteo hace 20 años. A pesar de su amor declarado.
20 años de relación desgastan. Lo hacen con personas que se aman. Lo hacen con relaciones muy profundas y lo pueden hacer en la relación deportiva más longeva y exitosa, probablemente de la historia del deporte. Sin embargo que se nos olvide tan rápido las situaciones vividas hace no más de dos años, el asunto con Jimmy Garoppolo y su final traspaso a 49ers a mitad de temporada. Todo lo vivido tras la Superbowl perdida ante Philadelphia Eagles. Al año siguiente New England se desquitó ganando de nuevo ante Los Angeles Rams. Pero los asuntos probablemente quedan y siguen ahí.
La relación públicamente parece la misma y lo hemos visto hace poco en la TV en el programa en el que la NFL mostraba la elección de los QBs del equipo de estos primeros 100 años de NFL. La relación y el compromiso con ganar era claro de ambos.
¿Sirve todo esto para mantener una relación en el tiempo? Lo ha hecho hasta ahora. Entiendo que puede pensar en muchos otros equipos. El es de san Francisco, de la costa Oeste. La relación de su mujer con New York, donde residía… Muchas opciones. Pero Tom Brady es un espécimen únicamente pensando en “ganar, ganar y ganar”
Ahora mismo se me ocurren pocos sitios al nivel de seguridad de New England para seguir cumpliendo estos deseos.
Los otros motivos
Además de todos los elementos ya mencionados, pueden existir otros menos obvios pero igual de relevantes para su decisión. La salida de Josh McDaniels, que parece desear la posición de Head Coach este año. Su posible relevo. La oferta ofensiva que el equipo y Bill Belichick le ponga sobre la mesa. Esto ya ocurrió tras la temporada 2006 y le trajeron a Randy Moss.
Y luego pueden estar los personales. Los que no sabremos nunca y pueden estar influenciando también. Los deseos de su familia, de su mujer o el cambio de casa del que se ha hablado este verano y muchos otros más. Estos nunca se conocen pero suelen influir y mucho.
Después de exponer todo lo que sabemos de la situación parece claro que seguirá jugando y en mi modesta opinión en ningún otro sitio podría estar como en New England. Pero quién soy yo para hablar de otro sitio que no sea New England Patriots.