El milagro de Alex Smith

La vuelta de Alex Smith a los emparrillados ha sido una de las remontadas más increíbles de la historia de la NFL. Ni siquiera la de Patriots contra Falcons en la Super Bowl LI fue tan grande como de la que hablaremos hoy, porque de estar cerca de perder una pierna (incluso la vida) ha pasado a ser QB titular en dos años.

 

La lesión

Retrocedamos hasta el 18 de Noviembre de 2018. Los Washington Redskins (actualmente Washington Football Team) estaban líderes de división con una marca de 6-3 y tenían serias opciones de llegar a playoffs. Después de un sorprendente inicio, el equipo de la capital con su nuevo, aunque veterano (34), quarterback, se enfrentaba a unos Houston Texans que también habían empezado con fuerza. Houston ganaba por 10 puntos cuando en un 3º y 9 con 7:52 en el reloj en el tercer cuarto Alex Smith fue placado por dos contrincantes con la mala suerte que su pierna derecha se quedó atrapada y se dobló de manera violenta provocando así una fea lesión.

 

Alex Smith, el fatídico día / washingtonpost.com

 

El partido continuó y Washington perdió 23-21 ese partido pero no importaba porque donde se estaba perdiendo la temporada era en el hospital, aunque los médicos aun no lo sabían. Lo que pareció una dura lesión se iba a convertir en una verdadera pesadilla para la familia de Smith. Alex se rompió la tibia y la fíbula y esa lesión requería una operación. Después de la operación detectaron que Smith tenía una infección bacteriana llamada fascitis necrosante, también conocida como “bacteria carnívora” y que ocasiona la muerte del tejido corporal, por lo que requería una rápida intervención.

El doctor llegó a decirle textualmente a la mujer del QB: “Elizabeth, estamos haciendo todo lo posible. Y ahora mismo, nuestra primera prioridad es salvarle la vida. Y luego haremos todo lo posible por salvar su pierna. Cualquier cosa más allá sería un milagro”.

Los médicos que se encargaban de llevar todo el proceso lo comparaban con una lesión de un militar, no de un jugador de football. Además de la primera operación, Alex Smith precisó de 16 operaciones más antes de volver a pisar un campo de fútbol americano.

 

El regreso a los emparrillados

Después de un año muy duro para él y su familia, el 23 de septiembre de 2019, a Alex se le vio caminando (sin muletas) de nuevo en el FedEx Field.

 

 

Su objetivo era volver a jugar a fútbol americano. Con Dwayne Haskins como presumible titular en la ofensiva de Washington y con Kyle Allen de backup, Alex sabía que lo tenía difícil pero que podría tener una oportunidad. Tuvo poca participación en el Training Camp de agosto pero fue incluido en el roster como tercer quarterback. Cuando Ron Rivera decidió sentar a Haskins, Allen fue escogido como el QB titular de Washington y Alex se quedó como el primer suplente. El 11 de octubre de 2020, después de una lesión de Kyle Allen, Alex saltó al campo. Su mujer y sus hijos estaban en las gradas y rompieron a aplaudir. Después de tantas lágrimas y tantos esfuerzos, aquello por lo que había luchado se cumplía, Alex Smith volvía a jugar a fútbol americano.

 

El milagro ya estaba hecho. Alex ya se podría retirar. Había conseguido volver a jugar un snap en partido oficial después de su terrible lesión. Aun así, su papel protagonista no acabó allí. Aunque sus estadísticas no fueron buenas, Alex volvió a jugar el 8 de noviembre después de una grave lesión de Allen. Sus estadísticas se vieron emborronadas con dos intercepciones en el último cuarto aunque completó 24/32 pases para 325 yardas, datos nada desdeñables. Su progresión se confirmó en la derrota contra Lions el siguiente fin de semana con un total de 390 yardas de pase con un total de 38 pases completados de 55 intentados. Unas estadísticas espectaculares consiguiendo así máximos en su carrera profesional (tanto de yardas, como de pases intentados y completados). También enlazó por primera en su carrera dos partidos consecutivos con más de 300 yardas.

 

En el día que se escribe este artículo, Alex Smith sigue siendo titular del Washington Football Team. El 22 de noviembre consiguió ante Bengals su primera victoria desde el 11 de noviembre de 2018, una semana antes de lesionarse. Y posteriormente ganó a Cowboys en Thanksgiving. Una remontada digna de película y merecedora de ganar el CPOY, el Comeback Player Of the Year, la vuelta a los terrenos de juego más espectacular de un jugador. Con él también peleará por ese galardón Ben Roethlisberger, el QB de los invictos (en este punto de la temporada) Steelers, que también vuelve de lesión. De hecho, esta recuperación ha sido explicada en un documental de ESPN llamado Project 11, muy recomendable, donde explica el duro camino recorrido por el deportista. Así la historia se sigue escribiendo, cumpliéndose lo que el doctor que le atendió un día calificó como ‘milagro’, el milagro de Alex Smith.

 

 

Sergi Bladé

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