Estos últimos días, internet ha explotado con el contrato de Garoppolo. Ya lo conocéis, el mayor contrato de la historia de la NFL equivalente a 112 millones de euros repartidos en 5 años. Pero ¿es el jugador que más va a ver crecer su cuenta corriente? Seguramente no. Dejando de lado contratos publicitarios e ingresos ajenos al deporte, hoy centraremos la atención los impuestos (sí, ¡los impuestos!). En concreto en cómo estos afectan salarialmente a los jugadores y, por tanto, en otros campos como la Free Agency.
Lejos de la opulencia y el glamour de competir en el campo frente a millones de espectadores cada jornada, hay varios temas pertinentes que un jugador profesional debe abordar lejos de los focos. Uno de estos temas son claramente las consecuencias fiscales.
Al igual que todos los ciudadanos de USA, los atletas profesionales deben pagar dos tipos de impuestos sobre la renta: los federales y los estatales. Entrar en los primeros, si bien podría ser interesante, carece de valor para lo que nos atañe. Pero los impuestos estatales presentan características que indirectamente pueden afectar al devenir de una franquicia deportiva. Como su nombre indica, los impuestos estatales presentan diferencias en función del estado sobre el que se aplican. Pero ¿qué pasa cuando una persona realiza su trabajo en más de un estado como en el caso de los deportistas profesionales? Es aquí donde entra el denominado como jock tax o “impuesto de los deportistas”.
Vamos por partes. A pesar de su nombre, los jock taxes no son aplicables exclusivamente a deportistas profesionales. Se aplican a cualquier trabajador que viaje a otro estado como parte de su empleo. Sin embargo, reciben ese nombre debido a que, dentro del grupo demográfico que se ve afectado por los mismos, son éstos la clase más reconocible y sujeta a un mayor impacto por su aplicación.
Origen del impuesto
El origen de este impuesto es muy interesante. Si bien existe un caso que popularmente se acepta como el origen del mismo (que trataremos en breve), la primera mención de un estado que aplicara específicamente la ley tributaria a atletas profesionales se encontró en una apelación presentada ante la Junta Estatal de Igualación del Estado de California. Ésta fue por los impuestos adeudados por un jugador de San Diego Chargers en 1968: el kicker/punter Dennis Partee quien, a pesar de jugar en los Chargers, no era residente (y por tanto contribuyente) de California.
La disputa se relacionaba con la cantidad de ingresos que un estado podía reclamar a un atleta profesional no residente que jugara en el mismo. La Junta de Igualación del Estado de California dictaminó que California podría prorratear el porcentaje de los «días de trabajo» de Partee en el estado. Y, por tanto, gravar sobre el porcentaje de los ingresos que «ganó» en California los impuestos correspondientes. Para ello emplearon la fórmula:
[(Días laborables en California) / (Días laborables totales)] * Ingresos anuales.
«La Venganza de Michael Jordan»
Si bien el caso anterior es el más antiguo dentro de los jock taxes, el origen más conocido y aceptado popularmente de estos impuestos sobre los atletas se aleja del balón oval, para pasar al naranja. Hablamos del caso conocido como la «Venganza de Michael Jordan».
Según esta versión, los jock taxes se originaron en California en 1991. La historia cuenta que el estado de California, molesto por la derrota de Los Angeles Lakers ante los Chicago Bulls en las finales de la NBA (4-1), decidió recaudar el impuesto estatal sobre la renta contra el salario obtenido por Michael Jordan y sus compañeros de equipo ese año en el estado. Enfurecidos porque California había empezado a cobrar impuestos al héroe de Illinois, la legislatura de este estado, con el senador John Cullerton a la cabeza, respondió aprobando su propia ley de «impuestos especiales». En ésta se gravaba a los atletas profesionales visitantes que jugaron para un equipo cuyo estado de origen gravaba a los atletas visitantes (a día de hoy continúa así). Y así surgió «La venganza de Michael Jordan».
Como hemos explicado antes, esta historia popular y erróneamente aceptada como el origen de los impuestos sobre deportistas, no representa la creación de los mismos. Ya hemos mencionado que California comenzó a aplicar impuestos a los atletas profesionales no residentes 30 años antes. Y, no sólo California, muchos otros estados comenzaron la misma práctica poco después.
Nueva York emitió sus propios fallos judiciales sobre la tributación de los atletas profesionales en 1979 y 1982. Wisconsin también se pronunció sobre una disputa relacionada con la tributación de atletas profesionales en 1989. Pero siempre vende más una historia con Michael Jordan como protagonista, ¿verdad?. Lo que sí que es cierto es que desde que Illinois aumentó la conciencia sobre la idea de que los estados debían evaluar los impuestos aplicados específicamente a los atletas profesionales.
Día de trabajo
Casi todos los estados que alojan a un equipo de NFL, NBA, NHL o MLB han implementado algún tipo de jock tax. Esto no es del todo sorprendente. Los estados buscan constantemente ingresos y las personas adineradas que se ven obligadas a trabajar en su estado pero que no pueden votar a favor o en contra de sus leyes son objetivos fáciles. De esta manera, los jock taxes se han convertido en una corriente de ingresos bastante importante para los estados. Por ejemplo, durante el 2010 California recibió $ 171.7 millones en ingresos fiscales únicamente de atletas profesionales.
Ya hemos visto que según la teoría legal un deportista debe pagar impuestos estatales en el estado en el obtiene sus ingresos. Pero, ¿cuánto dinero gana un atleta en cada estado? ¿Un jugador gana su dinero sólo jugando partidos? O ¿lo gana cuando entrena, hace apariciones en los medios, training camps ,etc.?
Para resolver este problema, los estados han adoptado lo que se conoce como el método del «día de trabajo». De esta manera se calcula la cantidad de ingresos que suman los atletas en su estado. Definamos “días de trabajo”. Son los días empleados por el jugador dentro de la disciplina del equipo. Una vez definidos, se calculan las ganancias dentro del estado. Esto se hace con el porcentaje de días de trabajo pasados en el respectivo estado. Y se hace en comparación con el total de días de trabajo que el atleta tuvo ese año fiscal. Todo multiplicado por el salario del jugador.
Diferencias fiscales entre estados
Como ya hemos dicho anteriormente, además del impuesto adeudado a cada estado en el que juega un profesional, éste (como es habitual con cualquier contribuyente) tributa sobre su ingreso anual completo en el estado en que reside. Esta es la razón por la que puede ser importante para un atleta profesional residir en un estado que tenga bajos impuestos estatales. Y no se trata de ninguna tontería. Por ejemplo, durante la temporada del 2016, Phillip Rivers tuvo que pagar hasta el 50% de su salario de 21M en impuestos. ¡El 50%!
Como podéis apreciar en el gráfico facilitado, existen grandes diferencias entre los impuestos cargados en cada estado. Destaca en lo negativo California y, por otro lado, como estados con franquicia NFL que no cobran impuestos: Texas, Florida, Tennessee, Washington y, próximamente, Nevada.
City Tax
Por si esto no fuera razón suficiente para elegir una franquicia u otra dentro de la free agency, ciudades como la vigente campeona Philadelphia aplican una carga adicional denominada city tax. Tasa que, por ejemplo, en el caso de la casa de los Eagles, supone un 3,92% adicional. Este tipo de diferencias pueden acabar marcando la capacidad de una franquicia para atraer jugadores y, en consecuencia, determinar el porvenir de la misma.
Un ejemplo reciente y prestado del baloncesto podría ser la Southwest Division de la NBA. En ella juegan Houston, San Antonio, Dallas, Memphis y New Orleans. En los años 2011, 2014, 2015 y 2016 la división consiguió meter hasta cuatro de sus cinco equipos en Playoffs. ¿Sabéis que equipo quedó último de la división desde el 2012 al 2016? Los Pelicans de Nueva Orleans: curiosamente el único equipo que pertenece a un estado que cobra impuestos de la división. ¿Casualidad?
Casos concretos
A continuación os dejamos algunos datos de interés:
- Los jugadores que juegan para alguno de los equipos de la NFL en California pagan una tasa impositiva marginal del 13.3%. Este es el impuesto estatal más alto del país. Por esa razón, los jugadores de esos equipos ceden más de sus ingresos en impuestos que los jugadores en cualquier otro lugar del país. Garoppolo no se libra.
- La AFC South es la división de la NFL más favorable a los impuestos. Tres de los cuatro equipos juegan en estados sin impuestos (Texas, Florida y Tennessee). Ello significa que no hay impuestos de atleta en la mayoría de los partidos fuera de casa. Los impuestos para los jugadores en Houston, Jacksonville y Tennessee están entre los más bajos de la liga.
- La AFC West es la peor para los impuestos. Con dos equipos en California y otro en Kansas City (donde hay impuestos estatales y locales), la AFC Oeste es la peor división para los impuestos de atleta fuera de casa.
- La ciudad de Nueva York tiene algunos de los impuestos más altos del país. Las tasas marginales llegan al 12.7% cuando se incluyen tanto el impuesto estatal a la renta como el impuesto de la ciudad. Las buenas noticias para los jugadores de los Giants es que, en realidad, no juegan (o entrenan) en Nueva York. El estadio y las instalaciones de práctica de los Giants se encuentran en Nueva Jersey.
- Del mismo modo Washington no juega en Washington, DC. Esto significa que los jugadores del equipo evitan la tasa impositiva máxima del 8.95% de la ciudad. Además, mientras que sus partidos en casa se celebran en Maryland, entrenan en Virginia, que tiene una tasa máxima de 5.75%.
Más casos
- Durante los últimos años, el impuesto a la renta de Carolina del Norte ha cambiado. Partía de un impuesto progresivo con tasas tan altas como 7.75%. Han pasado a un impuesto fijo con tasas de 5.75%. Ese cambio, probablemente, ha significado cientos de miles de dólares en ahorros impositivos para los jugadores de los Panthers. De esta manera, han mejorado su capacidad de atraer FAs.
- El traslado al Levi’s Stadium de los 49ers situado en Santa Clara supuso un ahorro en impuesto para los jugadores de San Francisco. Ahorro debido a la diferencia de city taxes entre la ciudad de la bahía (1,5%) y Santa Clara (0%).
- En el estado de Nueva York, solo aquellos jugadores de los Bills que ganan más de 1M de dólares pagan la tasa impositiva máxima del estado de 8.82%. Si bien no supone un ahorro para FAs importantes, puede suponerlo para jugadores de rotación.
- Pennsylvania cuenta con acuerdos recíprocos de no imponer impuestos a los residentes de algunos otros estados, como Ohio y Maryland. Ello supone un importante ahorro para jugadores como Ben Roethlisberger.
- Los Indianápolis Colts tienen algunos de los mejores rivales divisionales. Tennessee, Texas y Florida no recaudan impuestos estatales sobre el ingreso regular. Lo cual significa que los jugadores de los Colts evitan el jock tax al menos esos tres partidos cada año.
- Derek Carr se hubiera ahorrado 3,1M en impuestos si los Raiders se hubiesen mudado a Las Vegas este año.
La Superbowl y los partidos en Londres
A todos los beneficios de organizar una Superbowl hay que añadirle el dinero recaudado en impuestos. Este año tanto Eagles como Patriots han tenido que dejar casi un 10% de sus ganancias y bonuses en Minneapolis. Uno de los casos concretos más curiosos en este sentido es el de Wentz. Él creció en Dakota del Norte y, en caso de mantener allí su residencia fiscal. Podría ver reducidos sus impuestos hasta un 2,9% gracias a los acuerdos interestatales. Por otro lado, jugar una SB en un estado como Texas es un chollo. Implica no tener que pagar ninguna penalización.
Los London Games son un regalo para todos los aficionados a la NFL en Europa. Pero para los jugadores NFL pueden suponer hasta un 45% de impuestos sobre las ganancias allí obtenidas. Esta es una de las razones principales de la difícil localización de una franquicia en el Reino Unido. Puede que se ha ido demorando a pesar de que haya voluntad de hacerlo.
Esperamos que el artículo os haya resultado interesante. Cuando veáis que un jugador escoge un destino que aparentemente no lo beneficia aquí encontréis una posible explicación. Además, puede que ahora volváis a envidiar más a Stafford que a Garoppolo.
@NKSplays