La Offseason de Rams: Segunda parte (Cortes)

En la primera parte de la agencia libre dije que teníamos varios agentes libres a los que renovar. En el anterior artículo, que podéis leer aquí, me refería a esos jugadores que sí o sí deben ser renovados. Rams.

Para este artículo me enfrentaré al momento más duro al que debe enfrentarse un entrenador y/o un general manager.

¿Quién no recuerda a Jeff Fisher cortando a jugadores durante la serie de Hard Knocks?

Las cosas como son, ¿qué jugadores deberían terminar su contrato este año?


El caso Austin

Sin duda alguna el primer nombre que viene a toda la parroquia de seguidores de los Rams es Tavon Austin.

Y sin lugar a dudas es el candidato más serio a ser cortado.

¿Qué aficionado de los Rams no ha oído hablar del susodicho sujeto?

La extensión de contrato que le firmamos hace unos años se ha demostrado como un lastre.

4 años y 42 millones de dólares firmó.

Sería agente libre en 2022.

¿Cuanto costaría cortarle ahora mismo? 5 millones de dólares.

Esos 5 millones se irían como dead money.

Si decidiésemos quedárnoslo (cosa nada recomendable) su cap hit sería de 8 millones.

Es decir, este año nos ahorraríamos 3 millones de su salario.

¿Qué hacer?

A principios de temporada ya pensaba que iba a ser candidato a ser cortado aunque dejase dead money. El transcurso de esta me ha hecho darme cuenta que todo lo que no sea cortarle es perder el tiempo.

¿Podría quedarse? Sí, claro. Pero también podría quedarse un jugador rookie que pueda aportar tanto en el ataque/defensa y en los equipos especiales. Porque sí, yo si llega a tener una temporada como la de 2016 me hubiese pensado el quedármelo porque al final en vez de 5 son 8 millones pero tienes retornador de las patadas y te vale para jugadas de engaño puntuales.

Esta temporada le ha crucificado. Problemas con el balón en los retornos provocaron que fuese sustituido por Pharoh Cooper que lo ha hecho excelente.

Esta temporada se le utilizó bastante más como corredor que como receptor. Con poco éxito en ambas posiciones.

El pick número 8 del Draft de 2013. Ni una sola vez ha superado las 1000 yardas totales (sin contar retornos).

Un desastre se mire por donde se mire.


Mark Barron ¿adiós muy buenas?

El veterano jugador, adquirido en 2014, podría tener sus días contados en la ciudad de las estrellas.

¿Por qué? Muy sencillo, sus problemas de lesiones contínuos no le permiten jugar una temporada completa. Su paso a ILB no le ha ayudado demasiado.

Recordemos que Mark Barron llegó a la liga de la mano de Tampa Bay Buccaneers para ocupar la demarcación de Safety.

Aquí se le ha reconvertido.

¿Su salario? Firmó 5 años y 45 millones. 9 millones al año, no está nada mal.

Si se le cortase se quedarían únicamente 3 millones en dead money.

Y sin embargo no las tengo todas conmigo que vaya a ser cortado. Tal vez podría ver su contrato reestructurado


Robert Quinn

Antes del día 23 yo hubiese optado por cortar o traspasar a Robert Quinn. El 23 saltó la noticia del trade por Peters. Las distintas informaciones que iban apareciendo hablaban de que los Chiefs intentaron meter a Quinn en el traspaso y los Rams se negaron.

¿Por qué? Eso nos preguntamos los aficionados de los Rams. Podría haber abaratado el traspaso (que se quedó en una cuarta ronda de este Draft y una segunda del siguiente).

Problemas de lesiones y un cambio de posición no le han favorecido.

¿Qué pasará con él? Cortarle nos daría cerca de 10 millones más para este año y sin embargo por lo apuntado antes dudo que lo hagamos.

Creo que no seguirá con ese contratazo pues si bien al final de la temporada mejoró sus números y las sensaciones, no parece merecedor de sus más de 10 millones anuales.

Por eso creo que le reestructuraremos. Sería lo mejor, liberaríamos espacio y el jugador, muy querido en el vestuario y considerado un líder, continuaría en el equipo.


Hasta aquí la segunda parte de lo que espero que sea la Offseason de los Rams.

¿Qué os está pareciendo? ¿Qué haríais vosotros?