En Match Point, una de las mejores películas de los últimos tiempos de Woody Allen, (SPOILER ALERT) el protagonista intenta lanzar un anillo al río Támesis tras cometer un asesinato, para deshacerse de las pruebas, y, como un golpe en tenis que toca la red y duda si caer de un lado o otro, el anillo termina por no caer al agua y se queda fuera. Ese momento, que durante la mayor parte de la película parece que va a condenar al protagonista, termina por ser su salvación.
En la pasada Super Bowl, de infame recuerdo para cualquier aficionado panther, hubo una jugada casi al inicio del partido que pudo cambiar el partido por completo. Cam completó un pase hacia Cotchery que los árbitros marcaron como incompleto. Rivera pidió challenge, y parecía claro que lo iban a dar como catch (el árbitro que ayuda en las retransmisiones, Mike Carey, así lo comentó) pero los árbitros dijeron que no había suficientes pruebas para cambiar lo que habían pitado.
Dos jugadas más tarde se produjo el primer strip sack de Von Miller, que terminó en TD, y el partido se decantó del lado Bronco.
Lo que voy a presentar ahora es un ejercicio de ciencia ficción, un qué pudo pasar en el partido si esa jugada hubiera sido arbitrada de manera diferente. Es posible que el resultado hubiera sido similar, pero me gustaría pensar que no habría sido así.
Super Bowl 50, un partido histórico
El partido comenzó con un drive en el cual el ataque Bronco sorprendió a la defensa Panther, y consiguieron un FG relativamente corto. Tras dos punts, Cam Newton consiguió conectar con Cotchery en un pase de 24 yardas, una jugada que al principio los árbitros marcaron como incompleto pero cambiaron tras el challenge de Rivera. El ataque Panther se estabilizó y consiguieron empatar el partido con un FG de Gano. Tras otro punt de Denver, los Panthers consiguieron un drive muy completo, que terminó en un TD de Jonathan Stewart de una yarda. Tras otro punt de Denver, la defensa de los Broncos paró al ataque de Carolina, y los equipos especiales de los Panthers cometieron un error en el retorno del punt que propició un FG de Denver sencillo, para poner el 10-6 en el marcador. Tolbert perdió un fumble, pero poco después Kony Ealy interceptó a Peyton Manning y el descanso llegó tras un sack de Demarcus Ware a Cam Newton.
En el descanso, a pesar de ir por encima en el marcador, las sensaciones eran que este tipo de partido beneficiaba más a Denver que a Carolina.
Al comenzar la segunda parte, los Panthers llegaron a FG range, pero Gano falló desde la yarda 44. En la siguiente posesión Peyton conectó dos pases de unas 20 yardas y los Broncos se acercaron más en el marcador, 10-9. Un nuevo error del ataque Panther, una intercepción provocada por las malas manos de Ginn Jr., casi termina de vuelta en manos de los Panthers, pero el fumble del safety TJ Ward fue recuperado por Denver. Con ese resultado, 10-9 a favor de Carolina, se llegaba al final del tercer cuarto, con muy malas vibraciones en el equipo de Carolina del Norte.
Al comenzar el último cuarto, Kony Ealy provocó un fumble que, esta vez sí, recuperó la defensa de Carolina. Gano anotó un FG, poniendo el 13-9 en el marcador. Tras punts en las siguientes 3 posesiones, Von Miller provocó un strip sack sobre Cam que terminó en un TD a la carrera de Anderson. Denver se ponía 16-13 en el marcador, y Cam tenía 3:08 para intentar empatar o ganar. Cam conectó con Ginn Jr. y Funchess, y corrió dos veces en tercer down, consiguiendo primeros downs, y cuando se terminaba el partido Gano anotó un FG de 35 yardas para empatar a 16 y enviar el partido a la primera prórroga en una Super Bowl en la historia.
La prórroga comenzó con dos punts, y las defensas imponiéndose a los ataques. En la tercera posesión, desde su yarda 27, Peyton intentó un pase para una screen, pero Thomas Davis Sr., con el brazo roto, lo vio venir, interceptó el pase y anotó el TD que decidió el partido. Los Carolina Panthers son los campeones de la Super Bowl, tras un resultado de 22-16, y, como no podía ser de otra manera, Thomas Davis fue elegido el MVP del partido. Qué poético y precioso final para la Super Bowl 50.
Keep Pounding.