Los Angeles Rams, una derrota increíble

Las cosas como son, a los Rams el jueves todo lo que podía salir mal les salió mal. No tuvieron una pizca de suerte de su lado. Y a la defensa les faltó nivel.

Después de ser completamente vapuleados por unos Tampa Bay Buccaneers el domingo 29 de septiembre los Rams no tenían ni un solo día de descanso ya que les tocaba semana corta. El jueves, después de una dura derrota, tocaba el posiblemente campo más difícil de la NFL. Unos Seahawks que llegaban lanzados. Problemas con la carrera eran lo más preocupante de este equipo ya que Chris Carson, el que está siendo el RB1 de la franquicia del estado de Washington había tenido problemas de fumbles durante las cuatro primeras jornadas ya que perdió hasta 4 balones.

Si bien el juego de carrera de Seattle ha sido difícil de frenar, teniendo más de 100 yardas de carrera en 4 de sus 5 partidos. Sin embargo el jugador que más está brillando en Seattle es Russell Wilson, el Quarterback de la franquicia del Noroeste de EEUU. No deja lugar a dudas, en estos cinco primeros partidos tiene unos números increíbles, pero la cosa no se queda en los números sino las sensaciones que también transmite el QB estrella de la liga.

Sus actuaciones solo pueden definirse como impresionantes. Lleva en 5 partidos 1409 yardas (casi 300 por partido), 12 touchdowns, y la maravillosa cantidad de 0 pases interceptados. Su nivel es para ser nombrado de forma legítima en la lucha contra el MVP de la temporada regular.

En el caso de los Rams quiero destacar dos cosas:

El nivel de Jared Goff

Tras un inicio de temporada de Goff muy dubitativo, parece que comienza a parecerse al QB que maravilló a todos a comienzos de la pasada temporada.

El nivel de Jared Goff en los dos últimos partidos ha sido muy bueno. Rozando la épica a pesar de un más que cuestionable playcalling de McVay, un juego deplorable de la OL, y viendo poco el juego de los RB en el equipo californiano.

Es cierto que ha lanzado 117 pases en dos partidos. De esos 117 pases ha completado 74, un 62,8% de pases completados. El número de pases que ha lanzado en dos partidos es insostenible, por lo que McVay deberá encontrar una forma de que Goff lance menos. Si nos fijamos en los números que ha tenido en cuanto a los touchdowns e intercepciones pues eso bajará los números de Goff, por el hecho de que en estos dos partidos lleva 3 TD y 4 INT. Sin embargo las sensaciones son otras bien distintas. Goff, cuando la OL le deja un mínimo de tiempo para lanzar y que se desarrollen las rutas de los receptores, se ha demostrado un QB muy fiable que lanza unos pases muy buenos.

Además, varias de sus intercepciones son muy evitables (la del partido ante Seahawks por el drop de Everett, dos de las del partido ante Buccaneers con un mínimo de bloqueos de la OL), teniendo además la mayoría de los TD de carrera vienen de buenas acciones de Goff con varios pases increíbles que fueron parados en las últimas cinco yardas.

El nivel de la defensa

Están a un nivel pésimo. No pudieron sacar casi ventaja de la pobre línea ofensiva de los Seattle Seahawks, ya que fuera de Aaron Donald la línea defensiva no consigue generar presión. Por si eso fuera poco, Clay Matthews terminó con la mandíbula rota lo que le tendrá más de un mes y medio sin jugar.

Fuente: AP Photo/Stephen Brashear

Las bajas de Rapp y Hager han sido importantes. A pesar del partido que hizo el UDFA rookie Troy Reeder, que parece un placador por defecto como hacía mucho no veíamos en los Rams. Pero puede que vuelvan ambos para el partido ante los Niners. Lo más importante es el nivel de la secundaria, que llevan dos partidos completamente horrorosos, sobre todo Aquib Talib y Marcus Peters en sus puestos de CB titulares, siendo quemados constantemente para grandes jugadas de los rivales.

El único jugador que mantiene el nivel es Cory Littleton, quien está siendo correcto y sobrio sin tener demasiados problemas.

 

El nivel de mala suerte

Los Rams no pudieron tener peor suerte contra los Seahawks. Comenzaron forzando un fumble dentro del propio territorio de los Seahawks que solo capitalizaron en 3 puntos. El estratosférico TD de Lockett es el TD con menor porcentaje de ser conseguido que se ha hecho desde 2017, con un paupérrimo 6,3% de posibilidades. Además, Todd Gurley tuvo un fumble después de un gran drive de los Rams dentro de la yarda 10 del campo de los Seahawks.

Uno de los pases que terminaron siendo incompleto de Jared Goff fue un casi TD de Woods. El cual, no pudo poner las rodillas dentro del campo antes de que sus codos tocasen la hierba fuera de la línea. Al final fue un pase incompleto, debido a esto los Rams se tuvieron que conformar con un FG.

Otra jugada con bastante infortunio para los Rams fue el TD de recepción que anotó el RB Chris Carson de los Seahawks. En la jugadaestuvo a punto de caérsele el balón.

Además, los Rams decidieron jugarse una conversión de dos puntos. A McVay no se le ocurrió otra forma de hacerlo que con una carrera diseñada para Goff. Parecía que iba a salir bien pero finalmente fue placado a menos de media yarda de conseguir entrar en la zona de anotación.

Nada salió bien

Dos de los pases incompletos de Jared Goff fueron clamorosos drops de Kupp y Everett (en el penúltimo ataque de los Rams en el partido). El de Everett además llevó consigo una intercepción absurda (por la forma de atrapar el balón) de Tedric Thompson que atrapa el balón de una forma muy similar a la recepción de Edelman en la SB ante Falcons.

Por si los Rams no hubiesen tenido suficiente desgracia, Greg Zuerlein falló un FG de menos de 50 yardas que se fue justo por encima de un palo. Este FG vino precedido de una falta tonta de Brian Allen que retrasó 5 yardas la posición de campo del FG.

Sí una sola cosa de estas se hubiese cumplido los Rams no estarían 3-2 sino 4-1 y las cosas que se oirían serían bastante distintas.

 

El próximo partido: contra Niners nos jugamos la vida

Ante los Niners frenar el ingenioso juego de carrera ideado por Kyle Shanahan será vital para los Rams. Además la OL deberá mejorar su desempeño, aunque sea poco a poco, para poder establecer un juego de carrera que permita a Goff no llevar el peso del partido siempre sobre sus hombros.

Me gustaría destacar además el importante papel que tendrán tanto los tres safeties (si finalmente llega Taylor Rapp a jugar el partido) como Littleton y su acompañante como ILB para frenar la carrera y a George Kittle. Jugador que se ha destapado como el mejor TE de la competición.