Me creo a estos Rams

Circula una historia, puede que falsa, atribuida a Napoleón Bonaparte. Según este relato, siempre que se le presentaba un candidato a oficial, y tras repasar su currículum, le preguntaba: «Bien, pero ¿tiene suerte?».


Tener suerte

Puede que esta temporada de LA sea la de la suerte. Rams lidera la NFC Oeste con un record de 5-2. Si me lo dicen al principio de temporada, no lo hubiera creído. Pero aquí estamos, con un poquito de suerte.  La suerte de fichar a Whitworth y a Sullivan para convertir una OL mala en una solvente que le dé tiempo a Goff a hacer sus cosas. Y la suerte de tener a Todd Gurley haciendo yardas por tierra y aire como si no costara. La suerte de que Robert Woods sea un WR2 que parece un WR1 (con la colaboración de Watkins y Kupp). Pero también la suerte de creer en un HC jovencísimo para enderezar la franquicia, Una que, con Jeff Fisher, iba con un cuchillo a un duelo de pistolas. La suerte de tener a 5 primeras rondas en el front seven. O la suerte de tener uno de los mejores dúos kicker/punter de la liga. Y paro aquí, si bien podría seguir hablando largo y tendido de la fortuna que favorece a los angelinos.

 

Aspirantes y rocosos

Como buen aficionado supersticioso me da miedo escribir esto. Vinny Bonsignore del Orange County Register decía que, pese al miedo a gafar al equipo diciendo esto, hay un hecho incuestionable: Los Angeles Rams son un aspirante. Está claro que es pronto y que ni siquiera hemos llegado a la mitad de la temporada, pero el equipo pinta bien.

Esta última jornada Rams le metió 33 puntos a unos Cardinals que plantaron un huevo. A priori no era todo tan bonito, los Cardinals han sido uno de los cocos de la división. Pero éstos son otros Rams. La defensa angelina que flaqueaba contra la carrera dejó a un tal Adrian Peterson en unos números flojillos (21 yardas, 1,9 yardas por carrera). Un ataque que cuenta con un receptor del calibre de Larry Fitzgerald que quedó en 3 recepciones y 29 yardas. Y lo que es más importante aún: que la única opción asequible de puntuar de los de Arizona fue un field goal corto fallado por Dawson.

 

Tirando todos del carro

Sí, fue un partido bueno de los carneros a todos los niveles. Afortunadamente, los Rams también han demostrado que pueden ganar cuando una de sus unidades flaquea. Contra 49ers el ataque tuvo que compensar el flojo partido de la defensa y los equipos especiales. Esa noche el descalabro carneril en los últimos minutos dio fundadas esperanzas a los mineros de que se podría cumplir su sueño de ‘Beat LA‘. Contra Cowboys, la pierna de Zuerlein y sus 23 puntos fueron los que mantuvieron a LA en el partido. Sobre los que se cimentó la victoria, remachada por un par de destellos de los WR y Gurley. Por último, y pese a no resultar en una victoria, contra Seahawks fue la defensa la que mantuvo al equipo con opciones de ganar hasta la última jugada.

 

Rivales nada fáciles

Recordemos que Goff es, en esencia, un rookie. Recordemos que Wade «Son of Bum» Phillips ha pasado la defensa base a una 3-4 sin variar el personal titular. Y recordemos que el cuerpo de receptores es nuevo por completo. Pero algo ha cambiado y hay que aprovechar esa inercia.

Ahora vienen Giants, una buena defensa sobre el papel (aunque está la #16 en puntos recibidos). Curiosamente los de New York eran uno de esos equipos que en la offseason aspiraban a todo y ahora, con 1-6, están a la espera de un milagro. Tras ellos un ataque arrollador como el de Texans (#3 en PPG) y otra defensa buena como Vikings (#5). Puede que perdamos uno, dos o los tres partidos. O no. Pero, si hay que poner etiquetas, podemos decir que el Greatest Show on Surf son el ataque número uno en puntos anotados, y la defensa está empezando a imponer respeto. En los últimos tres partidos ha recibido 13 puntos de media. Así que no creo que ninguno de estos equipos dé por sencillo un enfrentamiento contra Los Angeles.


Con todo ello, me creo a estos Rams. Ahora sí.

A día de hoy, la sensación que tengo es que el equipo andará entre 9 y 12 victorias. Los Rams con récord positivo, ¿quién lo iba a pensar? Cualquiera diría que, cuando le presentaron la opción de fichar a McVay, el mandamás de Los Angeles Rams preguntase: «Bien, pero ¿tiene suerte?».

@KorisCromartie