Tras un inicio prometedor dando la sorpresa frente a equipos como Eagles o Chargers, donde se consiguió la victoria, Detroit Lions han perdido tres partidos de forma consecutiva. Estas derrotas han puesto de manifiesto la mayor debilidad del equipo y su mayor problema. Sorpresivamente esta es la defensa, la gran parcela de Matt Patricia.
Lo que dicen las estadísticas
La defensa es la número 31 global de la liga, solo por encima de Bengals con un record 0-7. Equipos como Dolphins (0-6), Falcons (1-6), Redskins (1-6) ó Giants (2-5) tienen mejores números que el equipo de la Motortown.
Recibimos 428,7 yardas por partido, 6,1 yardas por intento y nos han hecho 24,5 primeros downs que nos deja como el peor equipo en este último apartado. Estas son las estadísticas globales, vamos a desglosarlas.
Frente al pase somos los 30 de toda la liga. Concediendo 289,5 yardas por partido y 7,4 yardas por intento lo que nos hace el tercer peor equipo de las 32 franquicias.
Frente a la carrera, la cosa tampoco funciona. Somos la 28 global con 139,2 yardas por partido y 4,9 yardas por intento.
Con estos números es difícil estar contentos. En las tres derrotas sufridas concedimos 438 yardas a Kansas City, 447 yardas a Green Bay y en el último partido 503 yardas a Minnesota. En todos estos encuentros hemos concedido más de 100 yardas de carrera y más de 250 yardas de pase. Es complicado ganar si no paramos ningún aspecto del juego.
En pass rush la tónica es la misma. Somos los 27 globales con 10 sacks. De todo ellos 5 se consiguieron en la primera jornada frente a Arizona, dando una estadística demoledora en el resto de los partidos con una media de menos de una captura por partido.
La secundaria es la 12 global en pass defensed con 35 y la 24 en intercepciones con 3, unos números muy bajos.
La única nota positiva son los fumbles forzados con 11 lo que nos sitúa los segundos de todos los equipos.
Reacción a los números
A priori tenemos jugadores y staff para ser de las mejores defensivas de la liga. Viendo los encuentros no da la sensación de ser tan mala, parece que cedemos muchas yardas pero nos volvemos duros en la end zone.
También ayuda a esta percepción los big plays en los momentos decisivos que nos daba el espejismo que sin esa defensa no hubiéramos ganado el partido. Una visión más profunda y calmada nos muestra una unidad con graves deficiencias y que no está a la altura de lo esperado. No se defiende la carrera, nos hacen muchos primeros downs y jugadas con lo que están mucho tiempo en el campo y no llegan frescos al final del encuentro.
El pass rush no llega al QB rival que tiene mucho tiempo en el pocket para leer progresiones. Esto hace que las rutas se desarrollen de forma eficiente quemando a la secundaria. Además casi siempre la cobertura es man to man dependiendo mucho de la calidad individual de los jugadores que sufren un gran desgaste. Como vemos se juntan todos los aspectos para que defensivamente seamos un desastre.
La frustración
Teniendo en cuenta que la defensa es la mayor virtud de Patricia es muy frustrante ver que no funciona y se cae de forma estrepitosa cada partido que pasa. La línea no ejerce presión al quarterback rival, los linebackers están desbordados y la secundaria se ve sobrepasada por el desarrollo de la jugada. La defensa se empeña en defender al hombre en la mayoría de las jugadas y la secundaria acaba quemada. El cuerpo de linebackers está diseñado para el pass rush y parar la carrera. Como no funciona, el staff ajusta para el pase y en cobertura están superados por los rivales.
Todo esto lo ven los rivales y lo explotan al máximo en cada partido realizando carreras exteriores o pases a la zona media. Nuestro staff no realiza ajustes a lo largo del partido con lo que el playcall se vuelve previsible.
Es necesario que Matt Patricia busque y encuentre soluciones pronto y demuestre que es de los mejores coach en la parcela defensiva. Con el declive de la defensa comienzan las dudas sobre si lo visto en New England es obra de Patricia o de Belichick. Es tan bueno Patricia o todo era obra de la mente de Belichick. Si no se encuentran soluciones la credibilidad de nuestro Head Coach se verá muy mermada y no sería el indicado para el puesto.
Sigo creyendo que Patricia puede mejorar al equipo y que esto es un bache salvable. Tenemos jugadores para ello y remando todos en la misma dirección podemos hacer un equipo que aspire a todo.
ONE PRIDE