Luego de 10 semanas de la NFL, Demarcus Lawrence lidera la liga en sacks (11.5). Esto es una gran señal para los fanáticos de Dallas, quienes estaban abrumados por el triste pass rush que el equipo presentó el año pasado. Pero esto puede volverse un poco triste al final. Si «D-Law» sigue en esta forma, puede volverse muy caro para que «The Lone Star Team» pueda conservarlo.
Gran temporada = Jugosa agencia libre
Los 11.5 sacks que D-Law lleva en la liga, además de ser la mejor marca esta temporada, podría llegar al récord de sacks en una temporada. Éste fue impuesto por Michael Strahan (DE, NYG) en 2001, y constó de 22.5 sacks. Aunque no llegase a los 22.5 sacks, si podría llegar a los 20 de DeMarcus Ware, quien ostenta el récord del equipo.
Lawrence llegaría a la agencia libre del 2018 como uno de los mejores jugadores. De entre todas las posiciones. ¿Qué pasó el año pasado con un jugador en su misma situación? Veamos el caso de Chandler Jones. Éste recibió de parte de los Cardinals el mayor contrato para un pass rusher el año pasado. El montante total fue de 5 años/$83 millones. Es decir, $16.6 millones por año. Igualmente esto es teórico, porque en 2017 va a costar $10 millones y a partir de ahí irá aumentando. Si D-Law pidiese esta cantidad de dinero, definitivamente Dallas no podría dárselo debido al tope salarial. ¿Las buenas noticias? Probablemente no pida esta cantidad a pesar de estar llevando una temporada histórica.
Factores que reducen el precio de Lawrence
La principal diferencia entre Jones y Lawrence es la cantidad de sacks en su carrera. Mientras que Chandler Jones tuvo 47 en 4 años en los Pats, Lawrence tuvo 20.5 en 3 años y medio. Y la mitad de estos vinieron en la «temporada de contrato». Éste es uno de los factores más temidos para los equipos al intentar contratar a un agente libre. Hay una buena cantidad documentada de jugadores que dan su 110% de esfuerzo en su temporada de contrato. Esto se debe a que buscan una gran extensión de su contrato, o un nuevo contrato en la agencia libre. Pero luego su rendimiento se ve muy disminuido.
Otra de las diferencias entre Jones y Lawrence es que este último tiene una mala historia con las lesiones. Su falta de producción en las primeras tres temporadas puede deberse más a esto que a una falta de esfuerzo. Por ejemplo, en su temporada de novato tuvo un inicio horrible. Luego en 2015 tuvo 7 sacks en las últimas 8 semanas de la temporada. Pero nuevamente en 2016 volvió a su historia con las lesiones.
El último factor que puede influir para que Lawrence no pida un contrato exorbitante es que en 2016 tuvo una suspensión de 4 partidos por usar PEDs; es decir, sustancias para mejorar el rendimiento. Ya sabemos que esto influye de una manera tremenda en la cabeza de los dueños y entrenadores a la hora de contratar/draftear jugadores.
Cuestión de hacer números
Suponiendo que Lawrence pida un contrato como el de Chandler Jones, ¿puede el equipo de Dallas pagarlo? La respuesta es sí.
Dallas tiene $10.6 millones libres esta temporada de acuerdo con OverTheCap. Suena genial, ¿no? Sólo un problema. Demarcus Lawrence no es el único jugador que podría irse a fin de temporada. En esta lista entran: Anthony Hitchens, David Irving, Darren McFadden, Alfred Morris, Jonathan Cooper, Brice Butler, Keith Smith, y Justin Durant, entre algunos otros.
Si Jerry Jones quiere conservar a Tank Lawrence, y al resto de los jugadores que podrían irse al final de la temporada, va a tener que sacar un as de la manga.
Martín Cosso (@_tinchotomas)