Rehacer el sueño

Rehacer el sueño

El pasado 3 de febrero se celebró en el Mercedes Benz Stadium de Atlanta la Super Bowl 53. Como dicta la historia, ningún equipo que haya celebrado la Super Bowl en su ciudad, la ha llegado a disputar, y los Atlanta Falcons no iban a ser la excepción. Los Dirty Birds lograron un récord de 7 victorias y 9 derrotas, quedando segundos en la NFC South justo por detrás del eterno rival que son los Saints. Esta agencia libre será para los Falcons, un punto de vital importancia a la hora de reforzarse de cara a la próxima temporada, tanto en ataque como en defensa.

 

¿Qué ha pasado?

 

El caso de Atlanta es, por lo que a bajas de componentes tanto ofensivos como defensivos respecta, un imán para las heridas. La “plaga” de la lesión que se ha sembrado en el roster de Atlanta esta temporada, ha dejado nada más y nada menos que a seis jugadores titulares fuera durante gran parte de la season o en su totalidad. De esos seis jugadores, tan solo el linebacker Deion Jones pudo volver a jugar tras estar 10 partidos fuera de los terrenos de juego.

A pesar de que Julio Jones enfatizara que la “Brotherhood” se mantenía centrada y unida, los resultados no llegaron. La ausencia de ambos safeties principales y el playcaller capitán, solo hizo que deteriorar la confianza de los jugadores que, al fin y al cabo, puede decantar la balanza por un equipo u otro en un encuentro.

Es por esa razón, que las oficinas de los Falcons en Flowery Branch, Georgia, se encuentran ahora mismo en zafarrancho de combate. La agencia libre empezó el pasado 12 de febrero y hay una serie de puntos que los Falcons deberían priorizar a la hora de fichar o «draftear» jugadores. Punto por punto: Los de Quinn se han situado decimos en la liga por puntos anotados, mientras que la defensa ha sido la vigésima séptima en yardas totales permitidas. Es en la defensa dónde Dimitroff y Blank deberán centrarse de cara al próximo draft.

Además, la línea ofensiva necesita un lavado de cara que permita una mayor protección al quarterback franquicia Matt Ryan. Según el Head Coach Dan Quinn, las únicas posiciones con las que se siente cómodo en la línea de ataque son el Left Tackle (Jake Mathews) y el Center (Alex Mack), ambos Pro Bowlers. Aprovechar la agencia libre y el draft son primordiales para que los Falcons puedan volver a estar en la “columna de las victorias”.

 

Las trincheras

 

La explosividad del ataque de los Falcons que se pudiera ver en 2016, ha quedado mermada esta temporada por una falta de profundidad en la posición de la línea de ataque. Las bajas de Andy Levitre, el recién fichado Brandon Fusco o del Right Tackle Ryan Schraeder ha provocado que Matt Ryan haya sido uno de los quarterbacks que más golpes haya recibido durante la campaña del 2018. Según el analista Matthew Tabeek en su sección Straight form the Beek, el reportero enfatizaba en la necesidad de los Falcons de aportar una profundidad al grupo de líneas de ataque de los Dirty Birds, un factor que permitiría a Matt Ryan demostrar de lo que es capaz.

Un claro ejemplo de esa voluntad de ampliar la cantidad de jugadores en la línea de ataque se puede ver reflejada con la ampliación del contrato por 3 años del Tackle Ty Sambrailo. El que fuera escogido en la primera ronda del 2015 por los Denver Broncos, llegó a Atlanta por una quinta ronda en 2017 tras solo disputar siete encuentros en 2 años. Esta temporada, Ty Sambrailo cubrió las posiciones de guardia izquierdo y de Tackle derecho, sin destacar mucho en ninguna de las posiciones. A pesar de ser un jugador reserva, el Head Coach Dan Quinn ha destacado su “versatilidad como una de sus mayores cualidades” que “ayudarán mucho al equipo en la línea de ataque”.

Un jugador que parece ser que no volverá a las filas de los Falcons parece que será el Guard Ben Garland, que tras las bajas de Andy Levitre y Brandon Fusco, vio su tiempo de juego aumentado. El antiguamente nominado al trofeo Walter Payton Man of the Year en 2017, realizó buenas actuaciones a la hora de abrir huecos para los corredores. Pero su talón de Aquiles ha sido la protección de pase, razón por la cual los Falcons han decidido prescindir de sus servicios.   

OL en apogeo / Usatoday.com

Además, la tesitura de la línea ofensiva ha afectado a la producción del backfield rojinegro tanto o más que al quarterback de los Falcons. Con la baja de Devonta Freeman durante gran parte de la temporada, ni Tevin Coleman ni Ito Smith lograron producir un buen juego de carrera, consecuencia directa de una mala actuación en las “trincheras”. Como consecuencia directa, los Falcons terminaron en la posición número 27 de la liga, con un total de 98.7 yardas de carrera logradas por partido. Con el talento que cuentan los Falcons en sus corredores, una buena línea de ataque podría dar una gran ventaja al juego ofensivo de los Dirty Birds.

 

Las defensas ganan campeonatos

 

Tal y como dijo la leyenda del football Paul “Bear” Bryant, “El ataque vende entradas. La defensa gana campeonatos”. Esta filosofía es la que Dan Quinn ha querido instaurar en los Atlanta Falcons desde que abandonó los Seattle Seahawks. La voluntad de hacer a los Falcons no solo un equipo explosivo en ataque, sino también uno igual de martilleante en defensa, parece haber encontrado un bache en el camino.

Durante la campaña de los Falcons en 2018, la defensa tan solo ha logrado 23 sacks, situándose como la vigésima octava de la liga. Un dato que en un principio debería alertar a los seguidores de los Falcons, ya que el equipo ha invertido dos primeras rondas en «draftear» a dos pass rushers (Vic Beasley en 2015 y Takkarist Mckinley en 2017) en menos de dos años.

Hacer efectiva la defensa es un objetivo primordial para Dan Quinn ahora que va a asumir las obligaciones de ser coordinador defensivo de los Falcons. Y es que la defensa se encuentra ahora mismo en proceso de remodelación, tras la marcha de dos cornerbacks titulares como son Brian Poole o Robert Alford.

Aun así, la profundidad que el equipo tiene en la secundaria es suficiente como para cubrir ambas posiciones con jugadores como el Damontae Kazee o Isaiah Oliver, ambos han realizado buenas temporadas y parecen preparados para tomar el relevo. Cabe destacar que Blidi Wreh-Wilson acaba de ser renovado por una temporada, lo que consolida un poco más la profundidad en la secundaria rojinegra.

Grady Jarrett / thefalcoholic.com

Por otro lado, el caso del defensive tackle Grady Jarrett pasa a ser uno de los temas más importantes de la off season. El jugador logró la pasada temporada un total de 53 presiones al quarterback y 6 sacks, siendo uno de los mejores jugadores de la liga a la hora afectar el juego ofensivo según Por Football Focus.

Es por eso que según ha informado CBS Sports HQ, los Falcons no han utilizado el Franchise Tag en el jugador debido a que la renovación del contrato con el jugador podría estar cerca de finalizarse. Esto debe sonar como agua de mayo para los seguidores de los Dirty Birds, ya que Jarrett ha demostrado ser una pieza fundamental de esta joven defensa.

Mucho menos optimista es la situación de Vic Beasley con los Falcons. El que fue líder de sacks de la liga en 2016, ha visto su producción defensiva mermada hasta los mínimos tras lograr 5 sacks y un total de 20 placajes la pasada temporada. Esta situación podría marcar su marcha del equipo en el caso de que los Falcons no aceptarán la opción de su quinto año en su vigente contrato. Además, la renovación del veterano defensive end Steve Means y el linebacker Bruce Carter, podría suponer un preludio a la marcha del número 44 de los Falcons.

 

Posibles desenlaces

 

Para poder darle una vuelta de tuerca a esta realidad, el fichaje de un guard en la agencia libre podría hacer resurgir el juego de carrera de los Falcons. Un ejemplo es el caso del jugador Rodger Saffold que ha firmado una gran temporada con Los Angeles Rams y que según diversas fuentes podría ser un refuerzo capital en la línea ofensiva de los Falcons. En el lado defensivo del juego, los Falcons podrían optar por fichar un veterano defensive end como Brandon Graham de los Philadelphia Eagles, o bien centrarse en encontrar un pass rusher en el draft.

Christian Wilkins / Nytimes.com

Para finalizar, algunos de los jugadores que podrían recaer en las filas del equipo rojinegro podrían ser el talentoso Ed Oliver, de la Universidad de Houston o bien el joven líder e inspiración Christian Wilkins, de Clemson. Ambos defensive linemen, son proyectados a ser elegidos en las primeras instancias del draft, y a lo mejor los Falcons deberían realizar algún intercambio que les pudiera dar una posición en el draft mejor que la que tienen (14). Lo que parece seguro es que los Falcons están preparados para inyectar de identidad a una joven defensa que, salvando las distancias, parece querer ser un reflejo de la temida “Legion of Boom”.

 

Santi Dommel Méndez