Los Saints entraban en el draft en una situación ideal: un roster muy completo y ningún tipo de urgencia. Iba a ser un Draft distinto. En virtual. Sin red carpet, sin abucheos a Goodell en directo. Y los Saints, con sólo cinco picks para los tres días (24, 88, 130, 169 y 203). Pero con confianza plena en el front office de la franquicia: encabezado por Mike Loomis y Sean Payton, además de la mano de Jeff Ireland. Ireland cuenta sus drafts en Louisiana con grandes aciertos. Suyo es el sello de ese Draft ya legendario de 2017. Y con esa confianza llegó la hora. Las 2am, bol de palomitas, Spanish Bowl Radio sintonizada y el canal de Telegram de Casa Saints en la mano. Empezaba el Draft 2020 de la NFL.
En La Abadía hicimos un mock centrado en las principales carencias sobretodo de profundidad del roster. Las concretamos en las siguientes: LB, WR, CB y OL. Ya fuimos calentando por la tarde que si los Saints veían caer a Isaiah Simmons entre el 11 y el 14, parece ser que tenían un acuerdo pactado para subir a por él. Los Cardinals, como franquicia seria que es, no lo dejó escapar. Así que el globo se deshinchó en el pick 8.
Los Saints habían hecho su trabajo, y según avanzaban las selecciones parecían cómodos y tranquilos con su big board y lo que les podía caer. Hasta que los Los Angeles Chargers subieron (en el 23) a por Kenneth Murray, el LB de Oklahoma que, en ese momento, parecía ser por quien estaban más interesados los Saints. Parecía que se desmoronaba un poco todo.
Saints On The Clock
Mi gran apuesta para este Draft tenía nombre y apellidos: Patrick Queen, LB de LSU. Y estaba disponible. Tenía el corazón acelerado porque estaba disponible y veía el fit muy claro. En el telegram de Casa Saints otro nombre cobraba fuerza: Jordan Love, el QB de brazo increíble de Utah. Junto a ellos Jeff Gladney, el CB de TCU era otro que nos había gustado mucho. Parecía que por esos derroteros podría llegar la elección de los Saints, sobretodo porque los grandes receptores también ya habían salido. Nada más lejos de la realidad…
R1P24 Cesar Ruiz, IOL, Michigan
Lo hemos sabido luego: los principales prospects en lo alto de la big board de los Saints (más allá de Simmons) eran 3: Cesar Ruiz, Javon Kinlaw (DT, escogido por los Niners en el pick 14) y AJ Terrell (CB, escogido por los Falcons en el pick 16). Y Ruiz, seguramente ayudado por Dallas que se fue a BPA (mejor jugador disponible) con el 17 a por CeeDee Lamb, cayó para que los Saints los escogieran. Poéticamente, como comenta el gran David de la Abadía (@daovir en Twitter), se nos fue un LB para escoger un “gordito” de la linea ofensiva. Como ya nos pasó en 2017 con un tal Reuben Foster y Ramzcyk. En este caso, por eso, los Saints tenían mejor valorado a Ruiz que a Murray o Queen, por lo que queda poético pero no es exactamente lo mismo.
Los chicos de Route Running nos comentan en su guía que Ruiz tiene un físico privilegiado para la posición: flexibilidad, movilidad, rapidez y agilidad. Es capaz de ganar a cualquier jugador por su poderoso tren superior. Y es un portento bloqueando para la carrera: tanto en carreras de poder entre tackles como, y ojo con eso, subiendo al segundo nivel. Entrando en directo por la radio comenté que ese aspecto del juego podría ser importante: primero porque siempre lo ha sido (véase renovación de Peat) y, después, para preparar esa OL para Taysom Hill como QB titular de los Saints (la respuesta en directo que obtuve mejor me la quedo para mí, pero apuntada queda).
En cuanto a debilidades, comentan que Ruiz es ligeramente impaciente en protección del pase, va a buscar más que esperar a que le lleguen. Eso a veces puede ser un problema ante determinados rusher. También que quizás le falta algo de experiencia y conocimiento del juego para poder empezar de Center en la NFL desde ya. Que es más probable que empiece en la posición de guardia. Por lo que hemos leído no es tan seguro que deje el centro de la línea, a pesar que Erik McCoy se ha desempeñado bien en 2019 allí. Pero puede haber una competencia real allí. Y el reciente corte de Larry Warford deja muy claro eso.
Otra cosa que nos gusta ver es el RAS: parámetro atlético desarrollado por @MathBomb de cada prospect. El RAS (Raw Athletic Skills) analiza el tamaño y parámetros físicos en “crudo” de cada jugador. Es un aspecto que los Saints han tenido muy presente en los últimos drafts y parece que es una tendencia generalizada en la liga. La nota global de RAS de Cesar Ruiz es de 9.07 sobre 10, lo que corresponde a la élite de su posición. Y lo que baja ese grade es precisamente su tamaño: le falta algo de altura. Pero eso no debería ser un problema con alguien como Brees detrás, no?
El segundo día de Draft de los Saints
Con el fichaje de Ruiz llegamos al segundo día de Draft. En estas segunda y tercera rondas, los Saints sólo contaban con un pick: el número 88 global (mediada la tercera ronda). Ya en muchos mocks que hice había llegado a una conclusión: del 24 al 88 es mucho tiempo para que nuestros chicos estén quietos sin hacer nada. Contrariamente a lo que esperaba, parecía que sí: esta vez Payton en su casa, tranquilo, con su bebida y sus chicles (juicy fruits), mantenía la calma. Y así acabó la segunda ronda. Empezó la tercera y había un prospect, en una posición de necesidad, que estaba cayendo muchísimo. Así que Sean cogió el teléfono y subió del 88 al 74, dejando una tercera de 2021 a los Cleveland Browns para coger a…
R3P74 Zack Baun, LB, Wisconsin
Con este pick todo lo acaecido en el primer día del Draft cobra mucho más sentido y, sólo con Zack Baun, mejora la percepción global del draft de los Saints. Baun era un jugador que proyectaba para final de primera ronda y encontrarlo mediada la tercera ronda es una gran suerte. Una muestra de orina diluida en la Combine fue seguramente la principal causa de esa caída.
Volvemos a lo que nos dicen los chicos de RR en su maravillosa guía: lo primero que vuelven a destacar es su capacidad física, cosa que le hace adaptable a múltiples spots y esquemas defensivos. En nuestra 4-3 lo más seguro es que ocupe un sitio en el SAM, cubriendo TE en cobertura (en off the ball es muy bueno según nos cuentan) y entrando al blitz o al rush por el centro. Baun puede hacer ambas cosas con relativa facilidad. Además es un buen placador a pesar de su tamaño, puesto que lo suple con coraje y su capacidad de liderazgo.
Baun será uno de los primeros rookies en tener contribución alta en la rotación defensiva de los Saints. Máxime teniendo las dudas que siempre generan a nivel físico Alex Anzalone y Kiko Alonso. En ese sentido Baun también ha tenido problemas con las lesiones en 2017 y 2018. Esperemos no sea un factor y encaje en esa línea de LB que ha perdido a su coordinador en los últimos años: Mike Nolan.
En lo referente al RAS estamos ante un jugador que no llega a ser élite pero lo roza (7.85 puntos en global). Lastran esa nota sobretodo el tamaño y su capacidad de salto, tanto vertical como horizontal. Esta nota coincide en lo que nos apuntan desde Route Running, que le falta algo a nivel físico para ser un true off the ball.
Pasado ese pick, y superado el susto que los Saints se quedaran con Jake Fromm o algún otro QB, volví al sofá a actualizarme con Casa Saints. Allí empecé a ver la lista de los picks que quedaban para terminar la segunda jornada. Y me vino un flash: quedan todavía demasiadas selecciones como para que esto ya se haya terminado para hoy. Y eso es lo parecía hasta que, en el penúltimo pick del día saltó la sorpresa: nos vendíamos el resto del draft a los Vikings por el 105 global…
R3P105 Adam Trautman, TE, Dayton
Durante toda la tercera ronda, Pablo en la radio había deseado a un ala cerrada para sus Patriots. Y los Patriots le habían ya dejado dos: uno bloqueador y otro receptor. Pero Pablo quería a Adam Trautman. Y nos odió cuando lo cogimos, aunque fuera un momento sólo. El draft de los Saints quedaba completamente redondo en dos días, y dejaban a Sean Payton un tercer día tranquilo para disfrutar de la familia y jugar un poco a la consola.
Trautman lleva apenas pocos años jugando de TE. Él era QB en High School y por tamaño alguien le aconsejó jugar en el ala cerrada. Es un estudioso del juego y, en palabras de Jeff Ireland tras su elección: su capacidad para coger pases les había atraído, pero lo que les enamoró de él fueron sus bloqueos en la Senior Bowl. Ireland lo ve como “instant contributor” en el Y-TE.
En la guía de Route Running los comentarios van en ese sentido: es un jugador muy fuerte en el punto de ataque y a quien le encanta el contacto. Además es muy ágil en espacios cortos y con muy buenas manos (Red Zone). Es muy versátil: ha jugado en muchos spots (slot, abierto, en línea, en el backfield como HB) y por su capacidad atlética ganas muchas yardas después de la recepción. Como punto negativo, más allá de su poca experiencia en la posición, es los rivales a los que se ha enfrentado en College. Jugaba en División II.
El RAS de Trautman es élite para la posición: 8.75. El principal punto donde le baja la anotación es a medida que va incrementando la distancia en velocidad: en 10y es una bala, en 20y algo menos, y en 40y roza la mediocridad. El tamaño, fuerza y todo lo demás supera en mucho la media.
Y el tercer día, Payton descansó… o no.
Empezaron las rondas profundas del Draft y los Saints sin elecciones, ya que las tenían todas los Vikings. Con los tres jugadores escogidos en los días anteriores estábamos ya muy contentos y empezando a hacer cábalas de quien caía como UDFA. Allí controlábamos nuestro big board particular e íbamos viendo sobretodo en las posiciones que convenimos que faltaba personal: receptor, cornerback y quizás interior de la línea defensiva. Y casi al final de la séptima ronda, saltó la sorpresa. Le dimos una sexta de 2021 a los Texans para escoger a un QB, si un QB, en esta clase.
R7P240 Tommy Stevens, QB, Mississippi State
Tras el draft trascendió que los Saints llamaron a Tommy Stevens para ver la posibilidad de incorporarlo como agente libre sin «draftear». Tommy se negó hasta en tres llamadas: una con Payton, otra con Payton y Loomis, y otra al final cuando, tras la negativa, Sean Payton le dijo que se olvidara de su acuerdo con los Panthers, que lo iban a «draftear» a él.
Y es que Sean Payton pensó: ni de broma se me escapa este alto y atlético QB. Ya desde el principio los reportes que tuvimos de él es que antes de Miss St había jugado en Penn State (si ésa Penn State, os suena?) y que allí había tenido un papel de OW (la posición que se ha inventado con Taysom Hill). Era un Taysom 2.0. Y sin Taysom sin firmar su tender, empezaron a saltar alarmas entre la parroquia WhoDat. Nada más allá de la realidad: tener a otro QB que pueda alinearse en muchas posiciones del ataque (equipos especiales incluídos) te permite muchas cosas.
La primera es tener un backup de una arma diferencial del ataque de los Saints. Caso de percance puedes seguir aplicando el mismo playbook. El segundo sigue teniendo mucho sentido en el plan para Taysom: liberarle de responsabilidades. Tommy puede coger su rol de equipos especiales y empezar su carrera desde allí. Porque físico lo tiene el bueno de Tommy, eso es una obviedad.
No tiene suficientes pruebas para tener una nota RAS de MathBomb, pero se sabe que su tamaño es prototípico para la élite del QB. En su Proday: 4.49 en el 40y, 7.09 en el 3 cone, 19 reps en press banca, 4.19 en el shuttle. Una auténtica barbaridad por la que los Saints vendieron una sexta ronda de 2021.
Conclusiones
Valorar un draft con una nota es muy complicado, básicamente porque es lanzar un brindis al sol. Se dio de tal manera que, por lo menos, los prospects que más se querían nos llegaron en lugares factibles, sin perder mucho capital de 2021 (una tercera y una sexta de un draft en el que en esas rondas tendremos picks compensatorios a priori). Debemos estar muy contentos y, más allá de que sólo sean cuatro elecciones, pensar que estas cuatro pueden aportar y mucho en el equipo. Un equipo que partía de una base muy sólida y un roster completísimo. Si al final se patea ese primer balón en Septiembre u Octubre, en casa ante los Bucs de Tom Brady, tendremos un equipo top de nuevo. Luego el balón hablará.
Salud y WhoDat