La ingeniería financiera de la NFL… ¿a quién se le ocurriría esa idea? Una ingente cantidad de números, cláusulas, cálculos y demás cuentas que lo único que hacen es crear todo un galimatías para los aficionados.
En este artículo intentaremos explicaros cómo funciona el Salary Cap y cómo funcionan los contratos en la NFL. O al menos de la forma más detallada posible. Siempre existen ramificaciones, cláusulas, y trucos que sería muy complicado de explicar. Así que, con que entendáis el funcionamiento general, nos vale.
Pero antes de empezar, os tengo que pedir dos cosas:
La primera, que olvidéis de (casi) todo lo que sabéis a cerca del Salary Cap. Probablemente esté equivocado. Por eso, empezad a leer el artículo con la mente abierta.
Y la segunda, que os arméis de paciencia, un bolígrafo con mucha tinta, un cuaderno con muchas hojas y el ábaco de Doraemon.
¿Lo tenéis todo? Bien, vamos a empezar. Es complicado, sí. Pero si yo, que soy de letras, os lo estoy explicando, vosotros también podéis entenderlo.
Salary Cap
El Salary Cap fue un concepto financiero introducido en 1994. Hasta entonces, los equipos no tenían un techo de gasto. Los equipos con propietarios más ricos podían invertir todo el dinero que quisieran en sus jugadores. Mientras, las franquicias más “pobres” o los dueños más “agarrados” vivían a años luz.
El Salary Cap lo que hizo fue crear un techo de gasto. Es decir, ninguna franquicia podía gastar más de una cierta cantidad de dinero. El objetivo era crear una liga más competitiva al igualar el poder adquisitivo de los equipos.
En 1994, el Salary Cap fue de 34,6 M de $. Para la temporada 2019 ha sido fijado en 188,2 M de $.
¿Cómo se establece el Salary Cap? Básicamente se usa como referencia los beneficios de la NFL: a más beneficios, mayor será el Salary Cap.
En la última revisión del CBA (Collective Bargain Agreement, Acuerdo de Negociación Colectiva) en 2011, se introdujo también un suelo de gasto. Cada franquicia está obligada a gastar un mínimo del 89% del Salary Cap en un período fijo de 4 años (el actual es 2017-2020).
OJO: Esto no quiere decir que cada año tengan que gastar un mínimo del 89%. Solamente en el global de los 4 años. Pongamos un ejemplo sencillo:
Salary Cap | Salary Cap Usado | % | |
---|---|---|---|
Año 1 | 100.000.000 | 85.000.000 | 85 |
Año 2 | 100.000.000 | 87.000.000 | 87 |
Año 3 | 100.000.000 | 86.000.000 | 86 |
Año 4 | 100.000.000 | 99.000.000 | 99 |
Total | 400.000.000 | 357.000.000 | 89,25 |
Como vemos, en 3 de los 4 años del período, la franquicia está por debajo del 89%. Sin embargo, en el último año gastan más. El número final es superior al 89%. Por tanto, la franquicia cumple con las reglas.
¿Qué pasa si una franquicia gasta menos? Primero, que la franquicia deberá pagar una multa a la NFL. Y segundo que la diferencia se reparte proporcionalmente entre todos los jugadores que estuvieron en esa franquicia durante dicho cuatrienio.
Supongamos que en el ejemplo anterior la franquicia sólo ha usado 350.000.000 (87,5%). El 89% son 356.000.000 así que la diferencia, esos 6.000.000, se repartirán proporcionalmente entre todos los jugadores que pasaron por el equipo en esos cuatro años. No es mucho, pero los jugadores lucharon por ello.
Además, en ese mismo período de 4 años, la suma del Salary Cap usado por todas las franquicias ha de ser superior al 95%. Si la cifra es menor, la diferencia se reparte, de nuevo, proporcionalmente entre todos los jugadores que han estado en la NFL en ese período.
En este enlace podéis ver los números oficiales de cada franquicia es cuestión de Salary Cap.
Carryover
Pero la gran pregunta es: ¿puede una franquicia gastar más del Salary Cap? La respuesta es no… y sí.
Desde la última reforma del CBA existe otra figura financiera: el Carryover. Básicamente, el dinero que una franquicia no gasta en una temporada puede ser trasladado (carried over) y gastado al año siguiente.
Volvamos al ejemplo de la tabla anterior:
Salary Cap | Salary Cap + Carryover | Salary Cap Usado | % | Carryover | |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 | 100.000.000 | – | 85.000.000 | 85 | 15.000.000 |
Año 2 | 100.000.000 | 115.000.000 | 84.000.000 | 73 | 31.000.000 |
Año 3 | 100.000.000 | 131.000.000 | 87.000.000 | 66 | 44.000.000 |
Año 4 | 100.000.000 | 144.000.000 | 101.000.000 | 70 | – |
Total | 400.000.000 | – | 357.000.000 | 89,25 |
Ahora se empieza a complicar, ¿verdad?
En el año 1, a nuestra franquicia le sobraron 15.000.000, así que decidió trasladarlos al año siguiente, aumentando así su Salary Cap para el año 2. En el año 2 le sobraron 31.000.000 y los trasladó al año 3. Y así sucesivamente. La suma del Salary Cap establecido por la NFL más el Carryover se llama Adjusted Salary Cap o Salary Cap ajustado.
Sin embargo, la norma del 89% sigue vigente. En este caso, en ningún año individual la franquicia supera el 89%. Pero en global de los 4 años sí que lo hace. Y vemos que en el año 4 supera, teóricamente, el Salary Cap establecido.
Esa es la función del Carryover. Puedes gastar en años venideros lo que no gastaste el año anterior. En el link anterior también podéis ver el Carryover de cada equipo y el Salary Cap ajustado (Salary Cap + Carryover) de cada una. Cada equipo tendrá un Salary Cap ajustado diferente, dependiendo de su Carryover.
Eso sí, el Carryover no es automático. Cada franquicia debe notificar a la NFL qué cantidad quiere trasladar al año siguiente antes de que comience el año nuevo de la NFL.
Regla de los 51
Y la última gran pregunta es: ¿cuentan todos los contratos contra el Salary Cap? La respuesta es no. O al menos no siempre.
Así, entre el Año Nuevo de la NFL (13 de marzo) y la medianoche del día anterior al primer partido de Temporada Regular, solamente los 51 contratos más altos cuentan contra el Salary Cap. Una vez arranca la Regular Season y los rosters están limitados de nuevo a 53 jugadores, cuentan todos los contratos. Más que nada, esto se debe a una cuestión de pragmatismo.
El roster de una franquicia NFL está compuesto por 53 jugadores. Sin embargo, en la preseason, el número de jugadores sube hasta 90. Es decir, 37 jugadores más. Pongamos que esos 37 jugadores cobran cada uno 500.000 $.
37 x 500.000 = 18.000.000 $
Si los contratos de todos los jugadores contaran contra el Salary Cap, la mitad de las franquicias no podrían permitirse contratar UDFA o Agentes libres veteranos que sólo sean “carne de Training Camp”.
Por eso, hasta que el roster vuelve a la “normalidad” de los 53 jugadores, solamente los 51 contratos más altos cuentan contra el Salary Cap.
¿Entendido hasta ahora cómo funciona el Salary Cap?
Contrato
Movámonos ahora a los contratos. En este enlace podéis leer cómo es un contrato estándar en la NFL.
¿Lo habéis leído? Enhorabuena, ya podéis ser agentes de jugadores.
Sencillo, ¿verdad? Lo cierto es que no requiere ningún tipo de cualificación ser agente de jugadores. Solamente saber negociar. Y es que los contratos son la madre del cordero en la NFL. Es donde “sucede la magia”.
Los contratos son estándar según el que habéis visto. Solamente un par de cosas se pueden negociar… pero son las cosas importantes.
Estructura
Y la primera cosa importante que tenéis que saber sobre los contratos: no os fiéis de lo que os digan sobre ellos.
Un contrato de NFL consta de tres partes fundamentales: la duración, el salario base y los bonus. Aunque todas ellas están supeditadas a una fuerza mayor: el dinero garantizado. En este punto vamos a hablaros de cómo se estructura un contrato.
En muchas ocasiones veréis un tweet así:
https://twitter.com/Christ_IV/status/1107377314638295040
Alguien que hace la cuenta simple:
Dinero total/duración = dinero por año.
Siento decepcionaros pero, como diría Donald Trump:
Es un poco más complicado que eso. La persona que puso el tweet estructura el contrato de Bell así:
Años | Salario Anual | Salario acumlado |
---|---|---|
2019 | 13.125.000 | 13.125.000 |
2020 | 13.125.000 | 26.250.000 |
2021 | 13.125.000 | 39.375.000 |
2022 | 13.125.000 | 52.500.000 |
En realidad, el contrato de Le’Veon Bell está así estructurado:
Salario/año | Signing Bonus | Roster Bonus | Otros | Bonus | Total |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 2.000.000 | 8.000.000 | 4.468.750 | 500.000 | 14.968.750 |
Año 2 (2020) | 8.500.000 | 0 | 5.000.000 | 0 | 13.500.000 |
Año 3 (2021) | 8.000.000 | 0 | 3.500.000 | 0 | 11.500.000 |
Año 4 (2022) | 9.500.000 | 0 | 3.500.000 | 0 | 13.000.000 |
En la columna “Total” podéis ver lo que Le’Veon Bell va a cobrar cada año. Y a poco que seáis observadores, veréis que la estructura del contrato está muy lejos de ser la de la simple fórmula dinero total/duración.
No os preocupéis, os iremos desgranando qué significa cada cosa.
Otra cosa importante que el tweet omite es lo que verdaderamente determina y condiciona un contrato: el dinero garantizado.
El dinero garantizado es aquella cantidad que el jugador va a cobrar sí o sí por parte de la franquicia. Da igual si es cortado tras un año o tras 4. Obviamente, cuanto más dinero garantizado haya en un contrato significa que el equipo confía más en el jugador. Cuanto menos dinero garantizado haya, más riesgo tiene el jugador de ser cortado, ya que podría ser cortado sin mayor coste.
Volvamos al ejemplo de Bell. El contrato de Bell incluye que, de los 52,5 M de $ que vale su contrato, 27 M de $ de ellos son garantizados. El Signing Bonus, como veremos, siempre es garantizado. El resto de bonus se vuelven garantizados una vez cumplidos. Si aún sobra dinero garantizado sin asignar, servirá para garantizar el salario base. Así cada año.
Pero vamos a simplificarlo. El dinero garantizado es el 51,4% del contrato de Bell. Y el 51,4% de la duración del contrato de Bell son 2,06 años.
Así que, básicamente y redondeando, Bell ha firmado un contrato de 2 años por 28 M de $ más 2 años “opcionales” por 24,5 M de $. Esos dos años “opcionales” son los años 3 (2021) y 4 (2022), que al no estar garantizados, son una incógnita, pues Bell es entonces “cortable”, ya que deja poco dinero muerto.
¿Cortable? ¿Dinero muerto? Tranquilos, os lo explico más adelante. Ahora sólo estamos viendo cómo funciona la estructura real de un contrato. Luego pondré ejemplos con todo junto para que lo visualicéis mejor.
Siguiendo con Bell, este mismo ejemplo nos viene de perlas para explicaros una diferencia IMPORTANTE: Cash y Cap Hit.
El Cash es el dinero que el jugador cobra esa temporada.
El Cap Hit es el dinero que cuenta contra el Salary Cap cada año. El Cap Hit es DISTINTO del Cash. En el caso de Bell, este es su Cash y su Cap Hit:
Cash | Cap Hit | |
---|---|---|
Año 1 (2019) | 14.968.750 | 8.968.750 |
Año 2 (2020) | 13.500.000 | 15.500.000 |
Año 3 (2021) | 11.500.000 | 13.500.000 |
Año 4 (2022) | 13.000.000 | 15.000.000 |
Como veis, no coinciden. Tampoco os preocupéis, ya os explicaremos también cómo se llega a eso.
Y la última diferencia importante: los impuestos. Los impuestos afectan al Cash pero no al Cap Hit.
En el caso de Bell, va a recibir en 2018 14.968.750 $ brutos. Tras quitarle los impuestos del estado de Nueva Jersey (8,97%), nos queda que Bell tendrá 13.626.053,12 $ netos.
Si hubiera firmado por los Houston Texans, Bell recibiría 14.968.750 $ netos, pues Texas no tiene impuestos a equipos profesionales. Y si lo hubiera hecho, pongamos, con los 49ers, pues recibiría 12.977.906,25 $ netos.
Para el Cap Hit esto no es importante, ya que el Salary Cap y el Cap Hit se rige por cantidades brutas. Sin embargo, para el jugador, para el cash, sí puede suponer un buen pellizco.
Bastante información, ¿verdad? Espero que me estéis siguiendo sin problemas.
Salario Base
Conocida la estructura, vamos al primer punto de un contrato: el salario base.
Como su propio nombre indica, el salario base es lo que cobra un jugador por estar en el roster. Más fácil imposible.
El agente y el equipo negocian libremente las cantidades y cómo se reparten. Por regla general, el primer año es el de menor salario base (ya que se cobra el Signing Bonus) y después va ascendiendo. Sea como sea, no existe ninguna restricción.
Bueno, miento. Sí que existe una. En el último CBA, los jugadores lucharon (y mucho) por un mínimo salarial. Así, desde 2011 (y hasta 2020, cuando termina el actual CBA) existe un “salario mínimo” en la NFL basado en las temporadas que ese jugador lleva en la NFL. Para que una temporada se cuente como jugada, el jugador debe haber estado 6 o más partidos en el roster o en la IR de un equipo.
Una vez que tenemos fijado el salario base, vayamos ahora a cómo son pagados los jugadores en la NFL. Aunque los jugadores están bajo contrato durante todo el año, solamente reciben salario durante la Temporada Regular. Su salario base se divide entre 17 (16 partidos más la semana de Bye) y se paga semanal o bisemanalmente. Cada división del salario base es lo que se conoce como pay check. Es decir, solamente los jugadores que formen parte del roster de 53 durante la temporada regular cobran dinero por jugar a football.
Seguimos con Bell. Su salario base para 2018, como hemos visto en la tabla de arriba, es de 2.000.000 $. Si lo dividimos entre 17, tenemos que Bell va a recibir cada lunes entre la Week 1 y la Week 17 un cheque por valor de 117.647,06 $ que suman los 2 M de $.
Entonces… ¿significa eso que los jugadores no cobran nada en Play-Offs, off-season y pretemporada? Sí y no.
Como hemos visto, el salario de un jugador de NFL va de la Week 1 a la Week 17. Una vez que se termina la Temporada Regular, el jugador deja de percibir dinero por parte de la franquicia.
Sin embargo, en el CBA existen un par de cláusulas al respecto. La NFL tiene un fondo designado a pagar a los jugadores de los equipos que se clasifiquen para Play-Offs. Es decir, el jugador recibe su último cheque por parte de su franquicia tras la Week 17. Pero, si el equipo se ha clasificado para Play-Offs, recibirá uno por parte de la NFL.
Estos, por ejemplo, son los salarios pagados a los jugadores de los equipos que alcanzaron los Play-Offs la temporada pasada, en 2018:
- Equipo Wild-Card (Seed #5 y #6): 27.000 $
- Equipo Wild-Card ganador de división (Seed #3 y #4): 29.000 $
- Ronda Divisional: 29.000 $
- Campeonato de Conferencia: 54.000 $
- Perdedor del Super Bowl: 59.000 $
- Ganador del Super Bowl: 118.000 $
Si queréis ver su evolución con el tiempo, aquí tenéis la gráfica de lo que cobraron los jugadores de los equipos ganadores y perdedores del SB entre 2011 y 2020:
Dejemos a Bell y pongamos un ejemplo mejor para aclarar esto: Ndamukong Suh.
Suh firmó en 2018 un contrato de un año y 14 M de $ de salario base con los Rams. Eso significa que durante la temporada regular, cada semana, Suh recibía un cheque por valor de 823.530 $ hasta la Week 17. Llegan los Play-Offs. Los Rams juegan la ronda divisional y Suh recibe un cheque por 29.000 $. En la final de conferencia, valor del cheque que cobra Suh es de 54.000 $. Y por jugar, pero no ganar, el Super Bowl, Suh recibe 59.000 $. En total, por 3 partidos de Play-Offs, Suh ha cobrado 142.000 $ por parte de la NFL. 142.000$ por 3 partidos de Play-Offs mientras que en temporada regular ganaba casi 6 veces más en un solo partido.
Pero pongamos el ejemplo al revés: Ogbonnia Okoronkwo.
Okoronkwo firmó en 2018 un contrato con Rams por un valor total de algo más de 2,7 M de $. Su salario base para 2018 era de 438.702 $. Es decir, Okoronkwo tenía un cheque semanal de 25.806 $ durante la temporada regular por parte de Rams. El equipo se clasifica para Play-Offs y Okoronkwo recibe de la NFL un cheque de 29.000 $ por el partido de divisionales. Luego otro de 54.000 $ por la final de conferencia y uno más, de 59.000 $ por jugar el Super Bowl. En 3 partidos de Play-Offs, Okoronkwo ha ganado un tercio (32,4 %) de lo que había ganado en 17 partidos. Y todos esos cheques eran superiores a su salario semanal durante la temporada.
La NFL, que es quien paga estas primas/salario de Play-Offs, no distingue entre jugadores, contratos o rendimiento. Paga exactamente las mismas cantidades a todos los jugadores. Estas cantidades, al ser pagadas por la NFL, no cuentan contra el Salary Cap.
En pretemporada existe un sistema similar. La NFL paga unas ciertas cantidades, menores que las de Play-Offs, a los jugadores en el roster de cada equipo.
Pongamos el ejemplo de un UDFA que firma su primer contrato en abril, sin Signing Bonus. Este UDFA no verá un solo dólar hasta la Week 1… si sigue en el roster. Así que, básicamente, estará entrenando entre abril y septiembre sin cobrar nada. Sin embargo, por cada partido de pretemporada que dispute, la NFL le pagará una pequeña cantidad.
Es duro ser jugador de NFL, pero seguro que no os habíais imaginado que tanto, ¿verdad?
Bonus
Los bonus son cantidades extraordinarias que una franquicia pagará a un jugador por alcanzar determinadas metas u objetivos. Los tipos de bonus que existen son bastante amplios, así que intentaré resumirlos aquí.
Signing Bonus
Es el bonus más sencillo de entender de todos. Es un bonus por firmar el contrato. El jugador tiene un objetivo: firmar un contrato con la franquicia. En el momento que estampa su firma en el papel, objetivo logrado. En el ejemplo de Bell ya conocido, el RB tiene un Signing Bonus de 8 M de $. Eso significa que, solamente por firmar el contrato, los Jets le extienden un cheque por valor de 8 M de $.
Da igual cuando se firme el contrato. Marzo, mayo o noviembre. El Signing Bonus se cobra en el momento de firmar el contrato. Y, obviamente, sólo hay un Signing Bonus por contrato.
Como el Signing Bonus se cobra de manera inmediata, siempre es una cantidad garantizada y siempre contará contra el Salary Cap. Por eso, no todos los contratos tienen un Signing Bonus. Muchos UDFA o FA veteranos baratos no tienen Signing Bonus o tienen uno muy pequeño, ya que esto contaría contra el Salary Cap.
Sin embargo, el Signing Bonus cuenta de manera particular contra el Salary Cap. Aunque el jugador lo cobra de una vez al firmar, su impacto en el Salary Cap se divide entre los años del contrato. A esto se le llama prorratear el Signing Bonus. Volviendo al caso de Bell, muy sencillo. Signing Bonus de 8 M de $, dividido entre 4 años, igual a un impacto en el Salary Cap de 2 M/año.
Importante. El prorrateo del Signing Bonus sólo puede hacerse entre un máximo de 5 años. Si un jugador firma un contrato por 6 años, su Signing Bonus no se dividirá, por tanto, entre 6, sino entre 5.
Roster Bonus
Este otro de los bonus más comunes de ver y también bastante sencillo. El objetivo que debe cumplir aquí el jugador es estar en el roster de la franquicia en un determinado día. Si lo logra, es decir, si rinde bien en el campo y no es cortado antes, cobra este bonus.
Generalmente estos bonus suelen fijarse para el 3er, 5º o 7º día de la NFL. Por si no lo sabéis, el Año Nuevo de la NFL es el 13 de marzo. Ese es el día en el que los contratos acaban y el día que empieza la FA. El 3er día será por tanto el 15 de marzo, el 5ª el 17 y el 7ª el 19 de marzo. Suelen ponerse en esas fechas tempranas para que el jugador, en caso de ser cortado, tenga tiempo de firmar por un nuevo equipo.
Este bonus se vuelve garantizado y cuenta contra el Salary Cap una vez se cobre. Si el jugador es cortado antes, el equipo se ahorra esa cantidad. Generalmente son vistos como “team option”, es decir, el equipo tiene que decidir antes de esa fecha si cuenta contigo para la temporada siguiente o no.
Volvamos al contrato de Bell, que ya nos los empezamos a saber de memoria. Bell firma por Jets el 13 de marzo de 2019. Ese mismo día cobra sus 8 M de $ de Signing Bonus. En el contrato de Bell hay también un Roster Bonus. Si Bell sigue en el roster de Jets, pongamos, el 19 de marzo de 2019, cobrará 4.468.750 $. Como ha seguido, el día 20 cobró esa cantidad.
Para 2020 Bell tiene un Roster Bonus de 5 M de $. Si sigue en el roster para el 15 de marzo de 2020, lo cobrará. Mismo caso para 2021 y 2022.
Ningún misterio. Eso sí, el Roster Bonus cuenta íntegramente contra el Salary Cap el año que se cobra. Al contrario que el Signing Bonus, no se puede prorratear.
¿Os acordáis de esta tabla?
Cash | Cap Hit | |
---|---|---|
Año 1 (2019) | 14.968.750 | 8.968.750 |
Año 2 (2020) | 13.500.000 | 15.500.000 |
Año 3 (2021) | 11.500.000 | 13.500.000 |
Año 4 (2022) | 13.000.000 | 15.000.000 |
Bien, ahora podemos saber más cosas. El Cash está claro. El Cap Hit es donde teníamos dudas. Pues bien, este es el resultado desgranado:
Salario base | SB Prorrat. | Roster Bonus | Otros Bonus | Total | |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 2.000.000 | 2.000.000 | 4.468.750 | 500.000 | 8.968.750 |
Año 2 (2020) | 8.500.000 | 2.000.000 | 5.000.000 | 0 | 15.500.000 |
Año 3 (2021) | 8.000.000 | 2.000.000 | 3.500.000 | 0 | 13.500.000 |
Año 4 (2022) | 9.500.000 | 2.000.000 | 3.500.000 | 0 | 15.000.000 |
Ahora se entiende mejor, ¿verdad? Ya sabemos de dónde sale el Signing Bonus prorrateado y lo que es el Roster Bonus. Lo sumamos al salario base y ya tenemos el Cap Hit (Columna “Total”). De nuevo recordad, Cash y Cap Hit no tienen nada que ver.
Pero todavía nos queda un bonus por descubrir.
Workout Bonus
Como todos los bonus, no tiene demasiado misterio. Es lo que su nombre indica. El jugador recibirá su bonus si acude a los entrenamientos voluntarios del equipo. Si acude al porcentaje acordado de entrenamientos voluntarios, cobrará su Workout Bonus. Si se queda en casa, pues no lo cobrará.
Incentivos
Y por último, tenemos los incentivos. Este bonus se cobra por rendimiento sobre el campo. El equipo fija unos objetivos al jugador (X yardas de carrera, X TD, X snaps…) y, si éste los cumple, cobrará el incentivo cuando lo haya logrado.
Existen dos tipos de incentivos:
Likely to be earned (LTBE)
Como el nombre nos dice, son aquellos incentivos que el jugador debería alcanzar sin problemas. Si el objetivo es alcanzable o no, se basa en sus estadísticas los años previos.
Supongamos que ese “Otros Bonus” del contrato de Bell es un incentivo que dice que, si supera las 500yds. de carrera en 2019, le pagan 500.000 $. Como Bell ha superado en todas sus temporadas las 500yds. de carrera sin problema, este incentivo cuenta como “likely to be earned” y es sumado al Salary Cap ANTES de la temporada 2019.
Pero, ¿qué pasa si Bell tiene un año malísimo y sólo logra 480yds. de carrera? Obviamente, no cobrará el bonus. Pero al equipo ya le han sido descontados los 500.000$. La solución es que la NFL le “devuelve” ese espacio salarial la temporada siguiente. Es decir, los Jets tendrían en 2020 500.000$ más en Salary Cap que el resto.
Not likely to be earned (NLTBE)
Como habréis deducido, en este caso el objetivo es poco realista o complicado de alcanzar en condiciones “normales” según las estadísticas del jugador.
Sigamos con el ejemplo de Bell. Ahora el incentivo es de 500.000 $ por superar las 2500yds. de carrera en 2019. Como Bell, ni ningún RB nunca, lo ha logrado, el incentivo se cataloga como “not likely to be earned”. Eso significa que no cuenta contra el Salary Cap de ese año.
Bien. Resulta que Bell se sale y logra 2600yds. de carrera. El RB recibe su dinero, pero la NFL lo descontará del Salary Cap de Jets al año siguiente, en 2020. Es decir, ese año los Jets tendrían 500.000$ menos en Salary Cap que el resto.
Ejemplo Práctico: Nuevo Contrato
Ahora que ya conocemos (casi) todos los intríngulis de un contrato NFL, vamos a desgranar un par de ellos.
Ejemplo 1: Le’Veon Bell
Vamos a terminar ya con Le’Veon Bell:
Cash | Cap Hit | |
---|---|---|
Año 1 (2019) | 14.968.750 | 8.968.750 |
Año 2 (2020) | 13.500.000 | 15.500.000 |
Año 3 (2021) | 11.500.000 | 13.500.000 |
Año 4 (2022) | 13.000.000 | 15.000.000 |
En el gráfico podemos ver mejor la diferencia entre Cash y Cap Hit:
Como podéis ver, el Cash el primer año es bastante mayor que el Cap Hit. Generalmente, un GM no piensa, contractualmente hablando, más allá de 2 años. Por eso, se suelen poner grandes cantidades en año futuros, lejanos. Estos números inflan el contrato, pero pocas veces se llegan a cobrar.
En esta tabla, sin embargo, es mucho más importante:
Cap Hit | Dinero Muerto | Dinero Ahorrado | |
---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 8.968.750 | 25.000.000 | -16.031.250 |
Año 2 (2020) | 15.500.000 | 17.000.000 | -1.500.000 |
Año 3 (2021) | 13.500.000 | 4.000.000 | 9.500.000 |
Año 4 (2022) | 15.000.000 | 2.000.000 | 13.000.000 |
La columna importante es la de la derecha “Dinero Ahorrado”. Esa columna nos indica el Cap Room (espacio salarial) que ganaría Jets si corta a Bell. En los años 1 y 2, el número es negativo. Eso indica que Bell no es “cortable”.
Sin embargo, partir del año 3 (2021) a los Jets les sale más rentable cortar a Bell que mantenerle en el equipo. Esto se debe a que el dinero ahorrado es superior al dinero muerto que deja. De ahí que comentaba antes que el contrato de Bell en realidad es de 2 años por 28 M de $. Por un lado, es la cantidad que tiene garantizada. Por otro, es el tiempo donde su presencia en el equipo, incluso en el banquillo, es más barato que el corte.
Por cierto, el dinero muerto es la cantidad de dinero garantizado en un contrato que la franquicia está pagando a un jugador que ya no está en el equipo. Por eso, si Jets cortara a Bell en 2021, les quedarían 4 M de $ de dinero muerto. Esos 4 M de $ es el prorrateo del Signing Bonus para los años 2021 y 2022, que se “acelera” y se descuenta de una tacada en el año del corte. Sin embargo, se ahorrarían 13,5 M de $ de su salario base…
Si, por lo que fuera, Jets corta a Bell antes, el impacto sería mucho mayor, aunque también existe una válvula de escape para amortiguar el golpe. Es lo que se conoce como la “Regla del 1 de Junio”. Si el jugador es cortado después de esa fecha, el dinero muerto que deja se puede repartir entre la temporada actual y la siguiente. Es decir, pongamos que Bell es cortado el 2 de junio de 2020. Dejaría 17 M de $ de dinero muerto. Pero en lugar de contar todo contra el Salary Cap de 2020, los Jets pueden dividir esos 17 M de $ entre 2020 y 2021.
También existe la posibilidad de “etiquetar” hasta un máximo de 2 jugadores como “cortados tras el 1 de junio” aunque sean cortados antes. Supongamos que Bell es cortado el 15 de marzo de 2020. En teoría, sus 17 M de $ contarían enteramente contra el Salary Cap en 2020. Pero Jets le etiqueta como “cortado tras el 1 de junio”. Eso implica que hasta el 1 de junio, los 17 M de $ siguen contando contra el Salary Cap de Jets. Pero cuando llegue esa fecha, Jets podrá dividir el impacto del dinero muerto.
Cambiando de tema, tras el segundo año, y en función de la situación financiera de Jets y del rendimiento de Bell, podríamos ver un corte, una reestructuración o una extensión. Eso os lo cuento enseguida.
Ejemplo 2: Trey Flowers
Vamos a ver ahora el contrato que Trey Flowers firmó con Lions esta FA:
The #Lions are giving Trey Flowers a five-year, $90 million contract that includes $56M in guarantees, source said. $40M fully guaranteed at signing. #Patriots weren't going there. Big deal for Detroit's new big edge presence.
— Tom Pelissero (@TomPelissero) March 12, 2019
De nuevo, volvemos a ver números muy grandes. Y vemos que hablan de 18 M/año. Pero no debemos caer en el error. Siempre es mejor esperar unos días a que salgan los detalles y estructura del contrato para saber el valor real del mismo.
Pasado el impacto inicial, vamos a páginas como www.spotrac.com o www.overthecap.com que han sido nuestras páginas de referencia para este artículo, y vemos los detalles:
Salario Base | SB Prorrat. | Roster Bonus | Cash | Cap Hit | |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 805.000 | 5.614.000 | 0 | 28.875.000 | 6.419.000 |
Año 2 | 11.125.000 | 5.614.000 | 0 | 11.125.000 | 16.739.000 |
Año 3 (2021) | 14.375.000 | 5.614.000 | 0 | 14.375.000 | 19.989.000 |
Año 4 (2022) | 16.000.000 | 5.614.000 | 1.625.000 | 17.625.000 | 23.239.000 |
Año 5 (2023) | 16.000.000 | 5.614.000 | 2.000.000 | 18.000.000 | 23.614.000 |
Veamos la diferencia entre Cash y Cap Hit de nuevo:
Pero esto no nos saca de dudas. ¿Cobrará Flowers sus 90 M de $?
Lo que tenemos que hacer es volver a echar cuentas del dinero garantizado, que es lo que importa. Al ver su contrato, nos dicen que tiene 56 M de $ garantizados, pero de ellos, solamente 40 M de $ son garantizados al firmar. Esta diferencia es importante, porque nos dice que existen dos tipos de dinero garantizado:
- Dinero completamente garantizado: aquél garantizado desde la misma firma del contrato y que se cobrará pase lo que pase.
- Dinero garantizado variable: aquél que se cobrará si se cumplen una serie de condiciones en un momento determinado. Es decir, no está garantizado de entrada, pero podría llegar a estarlo una vez se cumplan esas condiciones. Generalmente, y como es el caso de Flowers, los 16 M de $ de dinero garantizado variable corresponden al Roster Bonus y parte del Salario Base del año 4 (2022). Es decir, si Flowers sigue en el roster para entonces, su salario de ese año se garantiza. Pero sólo se garantizará entonces, no antes.
Así que vamos calculando:
40 M de $ garantizados al firmar de un total de 90 M de $ suponen el 44,4%. Y el 44% del tiempo del contrato son 2,22 años.
Redondeando, podemos decir que, en realidad, el contrato de Flowers es de 2 años por 40 M de $.
Vamos ahora a ver si, el Cap Hit, el Dinero Muerto y el Dinero Ahorrado por año, respaldan nuestras cuentas:
Cap Hit | Dinero Muerto | Dinero Ahorrado | |
---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 6.419.000 | 40.000.000 | -33.581.000 |
Año 2 (2020) | 16.739.000 | 33.581.000 | -16.842.000 |
Año 3 (2021) | 19.989.000 | 16.842.000 | 3.147.000 |
Año 4 (2022) | 23.239.000 | 11.228.000 | 12.011.000 |
Año 5 (2023) | 23.614.000 | 5.614.000 | 18.000.000 |
Antes no lo he mencionado pero el Dinero muerto se calcula así:
Dinero Garantizado Pagado – Dinero GARANTIZADO sin pagar = Dinero Muerto
Y se calcula siempre a año vencido, es decir, en 2020 se calcula lo de 2019.
Para Flowers, si es cortado en 2019 (año 1), dejará 40 M de $ en dinero muerto. Si es cortado en 2020 (año 2), dejará 33.581.000 $.
Es decir, en 2019, Lions ha pagado a Flowers 6.419.000 $ de su total de 40 M de $ garantizados. Así que, en 2020, todavía le quedan esos más de 33,5 M de $.
Y el Dinero Ahorrado:
Cap Hit – Dinero Muerto = Dinero Ahorrado
En el ejemplo de Flowers para el año 1 (2019):
6.419.000 – 40.000.000 = (- 33.581.000)
Para el año 2:
6.419.000 + 16.739.000 – 40.000.000 = (- 16.482.000)
Para el año 3:
6.419.000 + 16.739.000 + 19.989.000 – 40.000.000 = 3.147.000
Esta es su gráfica:
Nuestras sospechas se confirman. Entre el 2º y 3er Año vemos una fuerte bajada del Dinero Muerto, por lo que Flowers es “cortable” tras solamente 2 años y 40 M de $, aunque con un margen financiero más o menos bajo.
El Año 3 (2021) es un año “bisagra”. El ahorro de cortarle (unos 3 M de $) es relativamente pequeño, así que es un año donde Flowers deberá demostrar que vale los 16 M de $ garantizados que se le pagarán en el 4º año (2022). Si su rendimiento no es el esperado, es muy probable que Flowers sea cortado tras 3 años, justo antes de cobrar el Roster Bonus y garantizar su salario de 2022.
Quizás Flowers nunca llegue a cobrar esos 90 M de $… Aunque, obviamente, si rinde bien en el campo, sí que podría hacerlo.
Ejemplo 3: Jamie Collins
Y voy con otro ejemplo. Concretamente, quiero destacar este contrato que Jamie Collins firmó hace poco con Patriots. Es un contrato complejo, pero muy interesante, porque nos ayuda mucho a entender los bonus:
Patriots LB Jamie Collins' 1-year deal is complicated. The details …
• $150K to sign
• $900K base ($100K guaranteed)
• $850K in per-game roster bonuses
• $100K workout bonus
• $2M in (complex) playing-time incentives
• $500K Pro Bowl incentive
• $500K All-Pro incentive— Albert Breer (@AlbertBreer) May 17, 2019
Tranquilidad. Vamos a trabajarlo todos juntos de la mano.
Collins tiene un Signing Bonus de 150.000 $. En el momento que firma (16/05), cobra ese Bonus. Además, tiene un salario base de 900.000 $, Como en un principio se presupone que todos los jugadores bajo contrato van a hacer el roster, el Cap Hit de Collins es de 1.050.000 S.
Vayamos a supuestos. De los 900.000 $ de su salario base, 100.000 $ son garantizados. Eso significa que, aunque Collins sea cortado mañana y no llegue a septiembre, cobrará esos 100.000 $. El resto, 800.000 $, no son garantizados. Para cobrarlos, deberá estar en el roster. Si fuera cortado, dejaría 250.000 $ de dinero muerto… pero ahorraría 800.000 $.
Volvemos a la realidad. Tiene un Workout Bonus de 100.000 $. Es decir, si acude a las OTA, lo cobrará, sino, pues obviamente no. Al igual que el salario, se presupone que el jugador irá (el año pasado fue, es un bonus “likely to be earned”) y lo cobrará. Su Cap Hit sube a 1.150.000 $. En caso de ser cortado tras los OTA, el dinero muerto sería de 350.000 $ y el ahorro seguiría siendo de 800.000 $. Sigue siendo “cortable”.
Pasamos ahora a los incentivos. 850.000 $ por jugar todos los partidos. Como en 2018 Collins jugó (y fue titular) en los 16 partidos, este incentivo se etiqueta como “likely to be earned” y cuenta contra el Cap. El Cap Hit es ya de 2.000.000 $.
Luego tiene un total de 6 incentivos por snaps jugados.
Si juega el 50% de los snaps en 2019, cobrará 250.000 $.
Y Si juega el 60%, otros 250.000 $ más.
Si está sobre el campo el 70% de los snaps, pues otros 250.000 $.
Y si juega el 80%, cobrará otros 250.000 $.
Estos 4 incentivos están etiquetados como “likely to be earned” porque en 2018 Collins jugó el 90,7% de los snaps. Eso significa que 1 M de $ más se suma a su Cap Hit, que ya es de 3.000.000 $. Sin embargo, en Cash, Collins sólo ha visto a día de hoy 150.000 $ de su Signing Bonus. (O 250.000 $ si estás leyendo esto una vez pasadas las OTA)
Pero todavía le quedan 2 incentivos de snaps más:
500.000 $ por jugar el 91% de los snaps.
500.000 $ por estar sobre el campo en el 95% de los snaps o más.
Como sabemos que en 2018 jugó el 90,7% de los snaps y ese número no llega al 91%, estos dos incentivos se etiquetan como “not likely to be earned”.
Y por último, tiene dos incentivos más. Uno por jugar la Pro Bowl (500.000 $) y otro por ser nombrado All Pro (500.000 $). Como en 2018 ninguna de estas dos cosas sucedió, estos incentivos también son etiquetados como “not likely to be earned”.
Es decir, a día de hoy, Collins cuenta 3 M de $ contra el Cap de Patriots.
Y si logra todos sus incentivos, restará 2 M de $ más el año que viene.
Sin embargo, si no logra ninguno, añadirá 1.850.000 $ al Cap de 2020. O la parte correspondiente a los incentivos “likely to be earned” no cumplidos.
Ejemplo 4: Kyler Murray
Y, por último, el de un rookie. Concretamente el del #1 del Draft de 2019, Kyler Murray.
Kyler Murray, firmó por 35.158.645 $. Eso nos da una media de 8.789.661,25 $ al año, ¿verdad? Pues ya deberíais saber que eso no es así. Murray no va a cobrar de este modo:
Salario Base | Signing Bonus | Total Cash | |
---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 495.000 | 23.589.923 | 24.084.923 |
Año 2 (2020) | 2.093.120 | 0 | 2.093.120 |
Año 3 (2021) | 3.691.241 | 0 | 3.691.241 |
Año 4 (2022) | 5.289.361 | 0 | 5.289.361 |
Mientras tanto, este va a ser su Cap Hit:
Salario Base | SB Prorrateado | Cap Hit | |
---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 495.000 | 5.897.480,75 | 6.392.480,75 |
Año 2 (2020) | 2.093.120 | 5.897.480,75 | 7.990.600,75 |
Año 3 (2021) | 3.691.241 | 5.897.480,75 | 9.588.721,75 |
Año 4 (2022) | 5.289.361 | 5.897.480,75 | 11.186.841,75 |
En su primer año (2019), Murray se va a embolsar nada más y nada menos que un poco más de 24 M de $. Sin embargo, su Cap Hit es de “sólo” algo más de 6 M de $. A partir del segundo año (2020), la situación se invierte. Murray cobrará unos 2 M de $ pero su Cap Hit será de casi 8 M de $. Aquí una gráfica, para que sea más visual:
Contrato de Kyler Murray
De nuevo, mucho cash de inmediato (que es lo que quiere el jugador) y poco Cap Hit (que es lo que quiere el equipo). Pero a medida que los años pasan, el Cap Hit crece. Aunque eso, como ya os he dicho, será problema del futuro.
Además, los contratos rookies son 100% garantizados, el dinero muerto que dejará Murray cada año es el siguiente:
Cap Hit | Dinero Muerto | Dinero Ahorrado | |
---|---|---|---|
Año 1 (2019) | 6.392.480,75 | 35.158.651 | -28.766.170,25 |
Año 2 (2020) | 7.990.600,75 | 28.766.170,25 | -20.775.569,5 |
Año 3 (2021) | 9.588.721,75 | 20.775.569,5 | -11.186.841,75 |
Año 4 (2022) | 11.186.841,75 | 11.186.841,75 | 0 |
Esto provoca que el dinero ahorrado nunca supere el dinero muerto:
Por tanto, en los contratos rookies, un corte antes de los 4 años de duración no es económicamente viable para el equipo. Eso aporta seguridad a los recién llegados a la NFL.
Sin embargo, eso no quita que algún equipo se quiera deshacer de una mala elección, aun cuando tenga que pagar (económicamente) las consecuencias… nunca mejor dicho. El ejemplo de Laquon Treadwell en los Vikings es un buen ejemplo. El equipo, deportivamente, se quiere deshacer del jugador. Pero económicamente tiene problemas de Salary Cap, y al tener Treadwell un contrato de rookie 100% garantizado, a Vikings le sale más rentable que se quede en el roster a cortarle.
Reestructuraciones
Os comentaba antes que Bell podría ser objeto de una reestructuración tras 2 años. Existen dos tipos:
Pay Cut
Probablemente sea lo más sencillo de entender de todo. Como su nombre indica, es reducir el salario base del jugador… sin que éste reciba nada a cambio. Generalmente se utiliza con jugadores que quieren permanecer en el equipo y donde la alternativa es cortar al jugador.
Sigamos con el ejemplo de Bell. 8 M de $ es su salario base para 2021 y 9,5 M de $ para 2022. Sin embargo, los Jets tienen poco espacio salarial y preguntan a Bell si se rebajaría el salario base a 5 M/año. La otra opción sería cortarle. Si Bell acepta el Pay Cut, Jets ganaría, por arte de magia, 3 M de $ de espacio salarial en 2021 y 4,5 M de $ en 2022.
Obvia decir que ver a un jugador aceptar un Pay Cut es tremendamente extraño. El ejemplo más sonado, por las cantidades, fue el de Tavon Austin (WR) con Rams en 2017.
Y el último ejemplo fue el del WR de Panthers Torrey Smith. Smith iba a cobrar en 2019 5 M de $ no garantizados. Smith aceptó un Pay Cut de 2 M de $ para que el equipo tuviera espacio salarial suficiente como para firmar a Gerald McCoy (DT). Sin embargo, el equipo, en compensación, no le pagará un salario base de 3 M de $ no garantizados, sino que ha convertido 1 M de $ en Signing Bonus. En 2019 Smith cobrará 3 M de $ y su Cap Hit seguirá siendo de 3 M de $, pero siempre es preferible tener 1 M de $ seguro ahora y 2 M de $ después a tener 3 M de $ después.
Conversión
Y luego tenemos la conversión. Aquí el jugador no pierde dinero, como en el Pay Cut, sino que el dinero de su contrato se “convierte”. Ahora lo veremos.
Hay que decir que esta es una de las maniobras más peligrosas que hay en la ingeniería financiera de la NFL. Básicamente implica ganar espacio salarial a corto plazo (el año actual y, como mucho, el siguiente) a costa de hipotecar el futuro.
Una conversión funciona de la siguiente manera: El equipo “convierte” la mayor parte del salario base de un jugador en Signing Bonus. Pongamos el ejemplo de Bell. Su salario base para 2021 es de 8.000.000 $ y su Cap Hit de 13.500.000 $. Bien, Jets entonces convence al jugador para que, de sus 8 M de $ de salario base, 7 M de $ pasen a ser Signing Bonus y solamente 1 M de $ quede como salario base. Esos 7 M de $ del nuevo Signing Bonus se prorratean entre la cantidad de años que quedan en el contrato, en este caso 2. Así que serían 3,5 M de $/año.
Ahora viene el momento de las cuentas. 13,5 M de $ era el Cap Hit antes de la conversión. Tras la conversión hay que restar a ese número 7 M de $ (el salario base convertido) y sumar 3,5 M de $ (el prorrateo del nuevo Signing Bonus). Para 2022 habría que sumar los 3,5 M de $ del prorrateo del nuevo Signing Bonus. Eso nos deja esta tabla:
Cap Hit ANTES | Cap Hit DESPUES | |
---|---|---|
Año 3 (2021) | 13.500.000 | 10.000.000 |
Año 4 (2022) | 15.000.000 | 18.500.000 |
Jets gana en 2020 3,5 M de $ en espacio salarial… a cambio de sumarlos en 2021. Es decir, Jets simplemente ha alargado el “problema” un año. En equipos con una ventana ganadora muy reducida, es un riesgo que se puede correr. Ganar el máximo espacio salarial en este año y el siguiente, lograr una oportunidad mayor al Super Bowl… e hipotecar el futuro teniendo que desmantelar el equipo después, salga deportivamente bien o no.
Ejemplo: Von Miller
El ejemplo más sonado de conversión fue el que Broncos hizo con Von Miller. Esta era su estructura antes de la conversión:
Salario Base | Signing Bonus | Otros Bonus | Cap Hit | |
---|---|---|---|---|
Año 1 (2016) | 2.000.000 | 3.400.000 | 6.100.000 | 11.500.000 |
Año 2 (2017) | 16.500.000 | 3.400.000 | 0 | 19.900.000 |
Año 3 (2018) | 19.000.000 | 3.400.000 | 500.000 | 22.900.000 |
Año 4 (2019) | 17.500.000 | 3.400.000 | 500.000 | 21.400.000 |
Año 5 (2020) | 18.000.000 | 3.400.000 | 500.000 | 21.900.000 |
Año 6 (2021) | 18.000.000 | 0 | 500.000 | 18.500.000 |
Como vemos, la subida de Cap Hit en 2017 y 2018 es importante. Además, como Von Miller firmó un contrato por 6 años, vemos que su Signing Bonus sólo se divide entre 5, como os dije antes. Por eso en 2021 no tiene Signing Bonus prorrateado.
Deportivamente, Denver lleva varios años sin llegar a Play Offs y buscan un QB. Y por ello hacen una oferta por Case Keenum. ¿Cuál es problema? Que Denver anda justo de espacio salarial y lo necesita para firmar a Kennum.
Entonces Denver toma una decisión: convertir el contrato de Von Miller. De los 19 M de $ de salario base de Von Miller en 2018, 16,9 M de $ pasan a ser Signing Bonus, dejando 2,1 M de $ de salario base. Tras prorratear el nuevo Signing Bonus (16,9 / 4 = 4,225), tenemos esta tabla:
Cap Hit ANTES | Cap Hit DESPUES | Cambio en Cap Hit | |
---|---|---|---|
Año 1 (2016) | 11.500.000 | 11.500.000 | 0 |
Año 2 (2017) | 19.900.000 | 19.900.000 | 0 |
CONVERSIÓN | |||
Año 3 (2018) | 22.900.000 | 9.725.000 | -12.675.000 |
Año 4 (2019) | 21.400.000 | 25.125.000 | 4.225.000 |
Año 5 (2020) | 21.900.000 | 25.625.000 | 4.225.000 |
Año 6 (2021) | 21.900.000 | 22.225.000 | 4.225.000 |
Sí, Denver gana 12.675.000 M de $ en 2018, suficiente para pagar a su QB… pero con un problema grave. Entre 2019 y 2021 Von Miller y Keenum supondrán el 25% del espacio salarial. Y si Keenum no es el QB que les lleva al siguiente nivel, su situación financiera (y deportiva) en los próximos años está muy comprometida.
Por ello, las conversiones siempre hay que hacerlas ponderando mucho los riesgos. Quizás la jugada salga bien y logres un “One Year Wonder” y ganar el Super Bowl. Pero quizás (seguramente) la jugada salga mal y los próximos años pueden ser muy oscuros.
Extensiones
Y por último tenemos las extensiones.
Generalmente, un jugador es renovado cuando su contrato llega a su fin. En el caso de Bell, el contrato expira el 13 de marzo de 2023. Una renovación suele suceder algunos días o semanas antes, en febrero o marzo. Así, el contrato vigente se acaba y se inicia uno nuevo.
En el caso de las extensiones, éstas se realizan cuando al contrato del jugador aún le quedan varios años de vigencia. Los años de la extensión se suman a los del contrato original. Es decir, supongamos que a Bell le quedan 2 años de contrato y firma una extensión por 3 años. Le quedan entonces un total de 5 años de contrato.
La extensión es un contrato en sí mismo. Se negocian el salario base, los bonus, incentivos y dinero garantizado. En una extensión es posible modificar los valores del contrato original. Sin embargo, no es posible reducirlos, sólo “recolocarlos”. En el ejemplo se verá mejor.
Además, el Signing Bonus de una extensión se reparte entre todos los años restantes, no sólo los de la extensión. Como hemos dicho que le quedaban 2 años de contrato más 3 de la extensión, el Signing Bonus se prorrateará entre 5 años.
Ejemplo: Aaron Rodgers
El año pasado, Aaron Rodgers firmaba una extensión de su contrato, pero no ha sido la única. Vamos a desgranarlas para ver cómo funcionan:
Rodgers tenía un contrato que acababa el 13 de marzo de 2015. Pero en abril 2013 firmó una extensión por 5 años y 110 M de $. Ese contrato se acabaría, por tanto, el 13 de marzo de 2020. En total era un contrato de 7 años y unos 128 M de $ (110 de la extensión + 18 del contrato previo). Esta era su estructura:
Salario base | SB Prorrat. | Roster Bonus | Otros Bonus | Cap Hit | |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 (2013) | 4.500.000 | 6.650.000 | 0 | 500.000 | 11.650.000 |
Año 2 (2014) | 900.000 | 6.650.000 | 9.500.000 | 500.000 | 17.550.000 |
Año 3 (2015) | 1.000.000 | 6.650.000 | 10.100.000 | 500.000 | 18.250.000 |
Año 4 (2016) | 11.500.000 | 6.650.000 | 600.000 | 500.000 | 19.250.000 |
Año 5 (2017) | 12.550.000 | 6.650.000 | 600.000 | 500.000 | 20.300.000 |
Año 6 (2018) | 19.800.000 | 0 | 262.500 | 500.000 | 20.562.500 |
Año 7 (2019) | 20.000.000 | 0 | 600.000 | 500.000 | 21.100.000 |
Con lo que nos vamos a quedar es:
El prorrateo del Signing Bonus cuenta 5 años, no los 7.
El salario base es sorprendentemente bajo en los primeros años. ¿Por qué? Básicamente, porque se compensa con los bonus. Además, el bonus se paga de una vez y no en 17. Y como se cobra íntegro y al momento, muchos jugadores lo prefieren al salario base. Es lo que comentaba arriba con el Pay Cut de Torrey Smith.
Pero vamos a la última extensión. En 2018, dos años antes de que acabe el contrato, Rodgers firma otra extensión. Esta vez por 4 años y 134 M de $. Eso le deja con contrato hasta el 13 de marzo de 2024.
Si observamos la tabla anterior, vemos que a Rodgers le faltan por cobrar casi 42 M de $ de su anterior contrato (año 6 + año 7). Si a esa cantidad le sumamos la de la extensión, tenemos que Rodgers ha firmado un contrato por 6 años y unos 176 M de $.
Este nuevo contrato se estructura así:
Salario base | SB Prorrat. | Roster Bonus | Otros Bonus | Cap Hit | |
---|---|---|---|---|---|
Año 1 (2018) | 1.100.000 | 11.500.000 | 7.800.000 | 500.000 | 20.900.000 |
Año 2 (2019) | 1.100.000 | 11.500.000 | 13.400.000 | 500.000 | 26.500.000 |
Año 3 (2020) | 1.100.000 | 11.500.000 | 19.500.000 | 500.000 | 32.600.000 |
Año 4 (2021) | 14.700.000 | 11.500.000 | 6.800.000 | 500.000 | 33.500.000 |
Año 5 (2022) | 25.000.000 | 11.500.000 | 0 | 500.000 | 37.000.000 |
Año 6 (2023) | 25.000.000 | 0 | 0 | 500.000 | 25.500.000 |
De nuevo, vemos el mismo patrón que en la extensión anterior:
El prorrateo del Signing Bonus sucede en los 5 primeros años del contrato, aunque éste tenga 6.
Y el salario base para los 3 primeros años es muy bajo, de nuevo, porque se compensa con el Signing Bonus y el Roster Bonus. Además, está por encima del salario mínimo de veterano que comentaba antes. Esto es obligatorio para todos los contratos de todos los jugadores.
Pero de nuevo debemos hacernos la pregunta: ¿de verdad va a cobrar Rodgers todo ese dinero?
Pues vamos a echar cuentas. De sus 176 M de $, 98,7 M de $ son garantizados, el 56%. Y el 56% del contrato es 3,36 años.
¿Y si lo que ha firmado Rodgers es realidad un contrato por 3 años y 99 M de $?
Nuestras sospechas se confirman cuando, viendo los detalles del contrato, los 3 primeros años son garantizados y, a partir del cuarto (2021) empiezan a entrar variables y fechas.
Así que vamos a hacer la tabla de dinero ahorrado y su gráfica:
Cap Hit | Dinero Muerto | Dinero Ahorrado | |
---|---|---|---|
Año 1 (2018) | 20.900.000 | 80.300.000 | -59.400.000 |
Año 2 (2019) | 26.500.000 | 59.400.000 | -32.900.000 |
Año 3 (2020) | 32.600.000 | 53.700.000 | -21.100.000 |
Año 4 (2021) | 33.500.000 | 23.000.000 | 10.500.000 |
Año 5 (2022) | 37.000.000 | 11.500.000 | 25.500.000 |
Año 6 (2023) | 25.500.000 | 0 | 25.500.000 |
Aquí podemos ver una clara bajada del dinero muerto entre el año 3 y el año 4. Eso nos indica que, a partir de ese momento, Rodgers es “cortable”. Curiosamente cuando su Cap Hit es más alto… Quizás en 2021 o 2022 a más tardar, Green Bay tenga que hacer frente a una decisión importante.
Como decía antes, en la NFL no se piensa, contractualmente, más allá de 2 o 3 años.
Conclusiones
El Salary Cap y el funcionamiento de los contratos en la NFL puede resultar complejo. Sin embargo, como habéis visto, también es entendible para el “fan de a pie”. O al menos a grosso modo.
Obviamente, nos hemos dejado muchas cosas en el tintero (qué pasa con los lesionados o sancionados, cortes a mitad de temporada,…) pero no queríamos complicarlo y alargarlo más.
El actual CBA concluye tras la temporada 2020. Eso quiere decir que para la temporada 2021 se debe negociar uno nuevo. De lo contrario, la amenaza de un Lock-Out será bastante plausible. Una de las peticiones más probables de los jugadores será contratos más garantizados. Eso nos llevará seguramente a contratos más cortos (de 2 a 3 años) con más dinero garantizado y el fin de las exorbitantes cifras que vemos a veces y que en pocos casos llegan a cumplirse al 100%. Otro posible caballo de batalla serán mejores pagas en partidos de pretemporada y Play-Offs.
Sea como sea, las bases del funcionamiento del Salary Cap y los contratos seguirán siendo las mismas.
Espero que hayáis aprendido bastante y todo esté más o menos claro. De todas formas, si tenéis alguna duda, podéis preguntarme sin ningún tipo de problema en Twitter a @deblas16 e intentaré aclarároslo de la mejor manera posible.
El mejor articulo que he leído en mi vida sobre el tema.
Solo tengo una duda.
que pasa con los jugadores que deciden retirarse y aún no termina su contrato, sigue teniendo golpe al salary cap?
imagino que en los contratos deben de manejar X cantidad garantizada por lesión.
¿De donde salen los 25 millones de dinero muerto del primer año de contrato de Bell?
Gracias y felicitaciones por el artículo.
Que porcentaje de los aficionados a la NFL conocen estos conceptos (aprox.) y…..que porcentaje de los jugadores en el roster de cada equipo ignoran estos mismos conceptos ? Y…..la pregunta final: Solo el General Manager de cada franquicia conoce el manejo de esta ingenieria financiera? O….tambien TODOS los dueños la conocen. Gracias por la intresantisima informacion.