Un partido para el olvido (2ª parte)

Otra semana dolorosa. La segunda consecutiva con una derrota por más de 20 puntos, y la tercera del año. Algo está fallando en Dallas, y debe solucionarse rápido. Matemáticamente la temporada no está perdida, pero se siente como si así fuera.


Una culpa repartida

«Decepcionado» no es la palabra que estoy buscando, ya que no era esperable ganar contra Filadelfia. «Disgustado» es la palabra correcta. La que usaría para describir cómo los fanáticos de Dallas nos sentimos tras la derrota del domingo. Sí, lo sabemos. Tres Pro-Bowlers estaban fuera (Lee, Smith y Elliott), pero no es excusa para perder 2 partidos consecutivos de esa manera terrible.

¿Sobre quién cae la derrota contra Filadelfia? Yo creo que fue un fracaso a nivel equipo. Y eso incluye a los entrenadores y coordinadores. Garrett demostró una tremenda falta de pantalones al despejar en un 4th&2, perdiendo por 14 puntos. Y falta de creatividad e inteligencia al no hacer ni un solo ajuste luego del descanso. Scott Linehan se quedó sin ideas, repitiendo las mismas jugadas que no funcionaron en toda la noche. En este momento puedo recordar un pase al flat a Dez en 3rd&17, en el que no sacó ni dos yardas. Esa clase de jugadas es inaceptable, sobre todo viendo que no funcionó en todo el partido.

Y Dak… ¿qué puedo decir? Prescott tuvo el peor partido de su carrera. Sus números: 30.4 de rating, 145 yardas lanzadas, 0 TDs y 3 intercepciones. Y pases MUY desacertados. Simplemente hay que olvidarse de este partido (uno más), seguir adelante. Y el jueves ganarle a Chargers para poder subir un poco los ánimos, y poder hacer un «Playoff-run«.

Fuente: Newsday

 

De haber chances para ganar, las hubo

Aún así, hubo cosas rescatables en este partido. El juego terrestre estuvo bien. Alfred Morris puso unas muy buenas 91 yardas en las estadísticas. Por otra parte, la defensa estuvo muy bien en la primera mitad. Si bien en el primer drive de Philly les permitieron anotar, en el segundo cuarto no dejaron mover las cadenas ni una sola vez. Dieron a la ofensiva muchas oportunidades para ganar el partido, aún luego de las dos intercepciones de Dak que pusieron a los Eagles en una buena posición para anotar. El partido era ganable a esas alturas. En la segunda mitad, el equipo lucía perdido y la defensa no tuvo chance.

Recuerdan la temporada 2015, ¿no? En esa temporada, al menos el equipo se mantuvo competitivo en la mayoría de los partidos, hasta en los que Tony Romo no jugó. Pero estas últimas dos semanas fueron atroces. Los Cowboys tenían una buena racha de 3 partidos, y estaban encaminados a los playoffs con un récord de 5-3. Pero eso era antes. Si Dallas tenía esperanzas de estar en la conversación de los playoffs, en este momento están casi esfumadas, con un récord 5-5.


¡No todo está perdido!

Si echamos un vistazo al resto de la conferencia nacional, los Cowboys no están 100% eliminados de playoffs. Pero van a tener que lograr un récord de 11-5, o 10-6 (bastante improbable) para asegurarse un lugar como comodín. Digo que es bastante improbable, porque si bien Dallas se enfrenta a tres equipos con un récord perdedor en tres semanas consecutivas, el equipo de Jerry Jones no da suficientes garantías como para decir «Sí, vamos a ganarle a Chargers, Giants, y Redskins».

En el caso de que Chargers se lleve la victoria en Día de Acción de Gracias este jueves, lo mejor sería tankear y pensar en la temporada 2018.

 

Martín Cosso (@_tinchotomas)