El vuelo de los Ravens hacia el Draft
Poco tiempo queda ya para que veamos el resultado del próximo draft, mientras tanto y a la espera de que eso ocurra, no está de más ver la situación en la que se encuentran en Baltimore en este momento en cada una de las posiciones.
Así que, pónganse cómodos porque van a leer un análisis detallado de la plantilla de Ravens antes del draft. Dividiremos el artículo en dos, hoy es el turno del ataque.
EN ATAQUE
Quarterback
Hay algo que es irrefutable: Joe Flacco será el QB titular de los Ravens (si no hay lesión de por medio). Uno de los principales motivos es el contrato que ata a Flacco al equipo, el otro no es el amor hacia el flequillo de Flacco, sino la convicción por parte de las cabezas pensantes del equipo, de que bien utilizado y con los problemas causados por las lesión estas dos últimas temporadas ya olvidados, Flacco debería ser importante para el devenir del ataque como ya lo fue en el pasado. Para ello, necesita un playbook más amable con sus características y tener un juego de ataque más equilibrado, que no lo obligue a lanzar más de sesenta veces por partido y apoyarlo con un juego de carrera sólido. De hecho, mantener a Marty Mornhinweg como OC (con el cual siente bastante afinidad), así como que éste pueda poner de manifiesto su playbook y olvidar el error que fue Marc Trestman, sumado a la llegada de Greg Roman, debería ayudar a Flacco a recuperar el nivel perdido.
Como backup “sólido” tendremos a Ryan Mallet, que gracias a tener unas características similares a Flacco, y a que en la temporada que le sustituyó no lo hizo mal, se convertiría en un repuesto de emergencia con más garantías que otros QBs de la liga. Si todo va bien, Mallet no será necesario, y de serlo, es un jugador que restará lo menos posible, una vez que parece que ha amueblado por fin su cabeza tras la salida desastrosa de Houston. Por otro lado, Dustin Vaughan no debería ser más que otro brazo para lanzar en los entrenamientos. Su mejor opción, en principio, será volver al equipo de prácticas en temporada regular, pero como todo, dependerá del nivel de Mallet en esta postemporada y de si es capaz de superarlo, aunque en este momento parte con bastante desventaja en la lucha. En cuanto al draft, no deberíamos esperar ninguna sorpresa, seguramente los Ravens no seleccionarán a nadie para sustituir a Flacco en el futuro, lo cual entristecerá a muchos de sus detractores, pero aún parece pronto para poder asegurar nada.
Running Back
La posición de RB antes del draft promete una batalla interesante en algunos aspectos. Terrance West partirá como RB número uno, más por los problemas de Dixon, que por sus propias capacidades. No es que vea a West como lo ven otros; como un RB mediocre, me parece un RB Note/Sur que con sus ganas y empuje, puede llegar a ser un jugador muy interesante para ser backup del titular y desgastar defensas con su juego. Si bien es cierto que le cuesta muchas veces el cambio de dirección en carrera, la temporada pasada cuando el juego por tierra no fue abandonado si dio sobradas muestras de ser una pieza interesante dentro del equipo.
La llegada de Danny Woodhead viene a cubrir una faceta que estaba un poco descuidada la temporada pasada y que fue cubierta en la segunda mitad del campeonato por Kyle Juszczyk, ahora en los 49ers. No obstante, a pesar de su edad y su última lesión grave, es indudable que Woodhead es un arma peligrosa en los terceros downs y tiene una capacidad de bloqueo excepcional pese a su tamaño. Eso, unido a unas manos virtuosas de un WR bastante bueno, le convierte en una adquisición de lo más notoria. Solo cabe esperar que la edad y las lesiones le respeten. En tercer lugar, no de posición sino de mención, se encuentra el que debería llevar sobre los hombros el presente y futuro del backfield, con unas características similares a las de West y Woodhead juntos: Kenneth Dixon.
El jugador tiene todo para triunfar; muy buena velocidad y potencia, además de unas manos más que notables para atrapar pases. En su etapa de College tuvo problemas con los fumbles pero eso no lo hemos visto en NFL. Es pura potencia con cambios de dirección más que interesantes y muy difícil de tumbar, ya no solo por ser elusivo si no por la fuerza en los acarreos. Una lesión, los cuatro primeros partidos de la temporada pasada, y una suspensión estos primeros cuatro partidos de la próxima, junto con un mal uso de la carrera por parte de un playbook cuestionable, han hecho que Dixon no se haya podido lucir como debería hasta ahora. Eso debe cambiar.
Un escalón por debajo se encuentra Javorius Allen y no por capacidad, ya que hace dos temporadas suplió de manera eficiente la baja de Justin Forsett, el gran problema que tuvo Allen fue algún que otro fumble que le relegó del equipo titular añadido a problemas personales en su segunda temporada. Esperemos que todo eso haya quedado atrás y pase a ser un jugador que luche por un puesto en el equipo. Quizá debería mejorar su manera de correr para evitar esos fumbles pero es algo, que si logra, le debería ayudar a hacerse un hueco en el roster final.
Hablando de escalones, quedarían dos jugadores, el primero de ellos es Lorenzo Taliaferro. Se trata de un RB que gustaba mucho en su momento, pero cuyas lesiones no le han permitido evolucionar. En Baltimore suena que por sus características, podría ocupar el puesto de Kyle Juszczyk en la posición de FB. El segundo jugador es Stephen Houston, que sorprendió a propios y extraños en la pretemporada pasada, con actuaciones notables que le han ayudado a llegar hasta aquí, poseyendo unas capacidades similares a Dixon, aunque en menor medida. Solo de Houston depende pelear por un puesto, de ahí que la lucha por el backfield sea apasionante, un backfield de mayor calidad de la que se presupone. En el draft podemos esperar la selección de un RB en rondas tardías, ya que aunque Dixon parece ser el RB de presente y futuro eso no debe impedir la búsqueda de talento, a pesar de que es una posición en la que las necesidades no parece que sean apremiantes. Ojo a Leonard Fournette, que si milagrosamente se pone a tiro, podría ser una opción de primera ronda. Al menos eso es lo que han asegurado algunas voces dentro del entorno de Baltimore, afirmando que es un jugador que enamora al equipo. Una cosa está clara, muchos aficionados estamos esperando ese juego de carrera duro y fuerte que nos ha apasionado siempre del equipo.
Tight End
Pasemos a la posición de TE, una posición también muy poblada pero poco asentada por diversos motivos. En primer lugar y con sorpresa, por sus graves lesiones de cadera tenemos a Dennis Pitta. Éste que ha sido el mejor amigo de Flacco en el campo la temporada pasada y uno de sus objetivos principales para asegurar el pase. Debido a sus grandes problemas con la cadera en el pasado, que parece haber perdido ese instinto en la Red Zone, que no suele ganar yardas tras recepción y que como bloqueador para proteger a Flacco es bastante malo, ha sido lo que ha cuestionado su labor en el juego, de ahí que hayan surgido rumores que le sitúen en un cambio de posición al WR como receptor de posesión, habrá que ver qué en que queda la situación de Pitta. El TE que debería haberse hecho con la titularidad, por ser el sucesor de Pitta, no es otro que Crockett Gillmore, pero una vez más, las lesiones nos vuelven a golpear y son las que han hecho que su progresión se haya detenido. Lo que está claro es que Gillmore sano, es un TE que a diferencia de Pitta, se convierte en un gran bloqueador y muy duro en la recepción. Si Gillmore consigue dejar atrás sus problemas físicos, debería, por características, ser el TE más importante en el juego.
El tercero en discordia, por importancia al ser elegido hace dos años en segunda ronda, es Maxx Williams, un jugador que como el anterior, ha tenido muchos problemas de lesiones y en dos años no ha mostrado el por qué fue seleccionado. Calificado como el mejor TE de su promoción, Williams ha dejado más sombras que luces en su camino por el equipo y a la espera, una vez más, de dejar atrás las fatídicas lesiones – lacra que nos está golpeando últimamente – deberíamos empezar a ver de ese jugador el buen bloqueador y buen playmaker que se esperaba. El tiempo dirá si fue buena elección o no.
Nick Boyle fue una de las sorpresas hace dos años, TE espectacular en su juego, muy fuerte y junto con Gillmore y Watson los mejores especialistas en bloqueos, su llegada a Baltimore como undrafted junto a Maxx Williams, en una segunda ronda, no le impidieron superarle en el campo y en el juego, solo una larga sanción la temporada pasada evitó que su progresión avanzara, viéndose frenado en la misma. Como con Taliaferro, se está insinuando, por sus habilidades, que Boyle podría ocupar el puesto vacante de FB. Todo hay que decir que viendo la poblada nómina de TEs y su físico, es una demarcación en la que podría desenvolverse.
Por último, tenemos a Benjamin Watson. El veterano llegó hace un año iluminado por la mano de Drew Brees en los Saints, pero una lesión grave en pretemporada le dejó un año en blanco, en el que se presuponía iba a ser clave por su capacidad de bloqueo y seguridad en la recepción. En este momento es uno de los candidatos a ser cortado, si los acontecimientos no dictan lo contrario. En el draft no deberíamos esperar adquisición alguna por la abundancia de jugadores en la posición, aunque siempre hay un “temor” de que con el primer pick y si está disponible O.J. Howard, sea la selección de primera ronda y no es un temor por la poca capacidad del TE, ya que es muy bueno, si no por el hecho de que no es una necesidad apremiante. A pesar de ello, tampoco sorprendería ver a un Bucky Hodges más adelante.
Center
Tras la marcha de Jeremy Zuttah a los 49ers, se busca Center en el equipo, un Center que ya esté en el barco o que venga de fuera. Actualmente la posición está formada por John Urschel, Ryan Jensen y Matt Skura. Son estos tres los que pelearán por el puesto. John Urschel no es un jugador muy grande y suple su falta de tamaño con inteligencia, mucha inteligencia, pero en los momentos en los que sustituyó a Zuttah la temporada pasada, no fue un factor definidor y como con Zuttah dejó la sensación de que la línea ofensiva por donde cedía era por el centro. Ryan Jensen ha ejercido más de Guard que de Center, en el que se ha visto superado siempre por Urschel.
Jensen, con unas características más de Mauler que Urschel, en principio fue seleccionado para ser el futuro reemplazo de Zuttah, tal vez ya sea el momento de darle el testigo de la posición y que demuestre que puede ser un valor al alza. El primer año de Jensen ocupando el puesto de LG, cuando Kelechi Osemele pasó al LT para cubrir la lesión de Eugene Monroe, no lo hizo nada mal. Sin embargo, la temporada pasada bajó mucho el nivel y sembró muchas dudas en su futuro, habrá que ver si una vez estable en la posición de Center es capaz de hacerse con la misma.
El tercero en disputa por la posición es el jugador novato undrafted; Matt Skura, los elogios a sus capacidades mentales para ejercer la posición no paran de manifestarse en todo momento, se habla que puede ser un factor muy positivo para el futuro su tremendo IQ y las discrepancias vienen más en la parte física, ya que es un Center al que le cuesta mucho anclarse y evitar la fuerza bruta de linieros defensivos grandes y poderosos. Si es capaz de mejorar en ese aspecto no hay duda de que puede ganarle la partida y muy bien a sus oponentes en la disputa por el puesto. En cuanto al draft, la marcha de Zuttah y las dudas que despiertan los relevos están provocando que suene mucho el nombre de Ethan Pocic en tercera ronda, se dijo en offseason que se buscaba una OL más fuerte que la del año pasado y eso será una tarea cuanto menos complicada.
Guard
Acercándonos al Guard, hay dos jugadores claros favoritos para la posición, uno es Marshal Yanda, el mejor RG de la NFL y todo un estandarte del equipo. Tras una temporada en la que ha sufrido una lesión en el hombro y ha jugado en el LG de manera brillante, no se puede pensar en otra cosa que no sea una vez más en Yanda siendo el mejor en el lado derecho de la OL pero ya no es un chaval y habría que ir pensando en un relevo futuro de garantías. Mientras tanto, a la espera de que aún dure muchos años, es indiscutible y habrá que ver como supera la operación en el hombro.
En el LG hay otro nombre que se ha afianzado en un año en la posición y no es otro que el del novato Alex Lewis, al que de nuevo, una lesión, le obligó a salir de la titularidad. Este jugador ha demostrado que de momento no tiene techo y ha sido muy sólido en el lado izquierdo interior de la ofensiva, sustituyendo de manera notable la importante baja de Kelechi Osemele. Debemos esperar mucho más de él y debería ser el LG titular, eso si no hay una garantía para el RT y no es desplazado a ese lado, de lo contrario Stanley y Lewis serán el fortín del lado izquierdo de la línea durante mucho tiempo.
Como backups del equipo para el Guard y tras irse Vladimir Ducasse a los Bills con Juan Castillo, aparte de John Urschel y Ryan Jensen que podrían ocupar la posición “sin problemas”, tenemos a Jarell Broxton y Jarrod Pughsley de los cuales no hemos visto mucho o más bien nada al provenir del equipo de prácticas. Broxton es el típico mauler en el Guard, lo que puede aportar mucha fuerza en la posición y Pughsley viene de Colts y después Chiefs a dar profundidad a la posición. De ambas opciones y por lo que dicen Broxton parece tener mejor pinta a la hora de entrar en el equipo, otra adquisición undrafted, un jugador bastante grande. Es cierto que los Ravens no suelen tener más de ocho linieros ofensivos en el roster final, por lo que la batalla aquí una vez más se tornará interesante, sin contar los que puedan ser firmados mediante draft o agencia libre. En el draft podemos esperar añadir algún otro Guard para que entre en la disputa como Dan Feeney y Dion Dawkins o tal vez un Tackle como Cam Robinson o Taylor Moton, que debido a su gran físico y a su velocidad escasa puedan actuar en la posición de Guard.
Tackle
En cuanto a Tackle tenemos luces y sombras, la luz la aporta Ronnie Stanley, que el año pasado fue bastante notable. Como siempre y para no variar, su progresión se vio interrumpida por una lesión y a su vuelta tuvo que lidiar con Damon Harrison que se lo comió con patatas. Cuando la recuperación fue plena, en la recta media y final de la temporada regular, con ayuda de Yanda que cambió a LG, Stanley demostró por qué es considerado un gran acierto en el draft anterior y toda una promesa de futuro. Técnicamente es un LT bastante bueno y si a eso unimos el hecho de que es muy rápido de pies, esto asegura que su titularidad en el puesto es un hecho y se espera que poco a poco vaya creciendo su aportación. La “sombra” viene del lado derecho de la línea, con la marcha de Ricky Wagner a los Lions. Ahora el RT queda vacante, aunque parece que en Baltimore hay confianza en dos jugadores para cubrir el puesto, uno es Stephane Nembot y el otro es De’Ondre Wesley. Cierto es que ambos han estado lesionados la temporada pasada pero el haberse mantenido en el equipo es un claro indicativo de que se confía en sus capacidades. Tanto uno como otro tienen el físico adecuado para ocupar la posición. Son dos jugadores grandes y fuertes y diría que en este momento el que tiene todas las papeletas para ser el RT es Nembot cuyo físico gustó, y mucho, en Baltimore. El tercero en la disputa sería James Hurst, aunque últimamente están surgiendo rumores de que los Ravens terminarán por dejarle ir. La trayectoria de Hurst en lo Ravens no ha sido como para presumir, es cierto que la temporada pasada no tuvo momentos tan desastrosos como en épocas anteriores pero siempre ha demostrado que le viene grande ocupar la posición y más para ser un Tackle titular. Los aficionados recordamos como su gran logro haber lesionado de gravedad a Flacco y ese mérito no es como para sacar pecho.
En el draft seguramente se seleccionará un Tackle pero no me queda tan claro que sea para ocupar el puesto de RT como titular inmediato, a no ser que sea una elección de primera ronda. En principio el chaval que llegue al equipo lo hará para disputarle el RT a Nembot y Wesley aunque como he dicho diría que Nembot parte con una ligera ventaja. Lo que es indudable es que Ronnie Stanley es el dueño del LT y en el draft hay opciones más que interesantes como los ya mencionados Taylor Moton, Cam Robinson, Ryan Ramczyk o Antonio Garcia para complementar el Tackle como mencionó Eric DeCosta en una entrevista reciente. También habrá que ver si Alex Lewis se mantiene en el LG, en principio es lo que se quiere en el equipo y solo un desastre provocaría que se moviese al RT, un desastre que sería no encontrar un RT de garantías en el roster actual, el draft o la agencia libre.
Wide Receiver
Llegamos ahora sí a una de las posiciones que más dudas despierta y no es otra que la de receptores. El que se haya ido Steve Smith Sr. es algo muy importante para un equipo que le tenía como WR número uno y todo un seguro en el pase. Tras la marcha de SSS nos hemos quedado como pieza más importante a Mike Wallace, que se ha ganado con creces la opción de permanecer en el equipo. Recordando al Wallace de los Steelers, la temporada pasada fue el receptor más importante, con unas manos más seguras y que parte como el WR número uno en esta por lo hecho en el pasado. Si mantiene el nivel, Wallace será importante para Flacco porque ha demostrado que es más que un receptor en profundo y que puede crear juego en posiciones intermedias aunque para ello no debe volver a las manos blandas del pasado ni bajar en su motivación en el juego. Ahora Wallace es el receptor veterano del equipo y el que será un guía para los chavales que le precedan.
El otro receptor que en este momento parte como favorito para ser titular, no es otro que Breshad Perriman. El primera ronda tuvo un primer año desaparecido y un segundo con destellos aunque poco participativo, este año ya debería ser su año y desplazar a Wallace a ser el segundo y no el primer receptor, al menos es lo que se espera de él y lo que se ha dicho de boca de John Harbaugh. Para ello, debe primero olvidar las lesiones y luego mantener su velocidad y mejorar las manos para atrapar los pases de Flacco. Es importante para Perriman y Flacco, que una vez olvidadas las lesiones, creen la química adecuada en los entrenamientos y eso al menos es lo que podemos esperar esta temporada o lo que todos deseamos. El tercer receptor en importancia se lo disputan tanto Chris Moore como Darren Waller, el primero está despertando muchos elogios últimamente y creo que lo veremos crecer esta temporada, salvo algún drop inexplicable el año pasado, su participación para ser rookie de cuarta ronda fue bastante notable y demostró ganas en el juego siendo importante en equipos especiales, anotando en recuperaciones, retornando algún ovoide e imponiendo su velocidad, debería ser un arma más en profundo para Flacco junto a Wallace y Perriman. Con respecto al TE reconvertido en WR; Darren Waller, es justo decir que ha sido importante también en las ofensivas, demostrando que su capacidad de bloqueo desde la posición de receptor ayuda y mucho y que tiene unas manos lo suficientemente seguras para que continuemos oyendo hablar de él más adelante, la combinación de tamaño y velocidad en su caso es un plus que debe hacerle brillar.
Como receptor de slot no hay otro como Michael Campanaro. No se puede discutir la calidad de este pequeño receptor pero su fragilidad también es indiscutible, hay que esperar que sea más resistente porque de ser así debería aportarnos muchas opciones en ataque e incluso retornando pero para ello es importante que no caiga lesionado más. Nada más verlo en el campo se distingue su capacidad para crear juego con una explosividad significativa.
A partir de aquí se abre un abanico más dudoso de posibilidades, por un lado tenemos al héroe de un solo partido de los Seahawks; Chris Matthews cuyo físico debería aportar esa posesión que hemos perdido en la posición con la marcha de SSS, veremos si es capaz de mantenerse en el equipo y si puede sacar partido de esa altura. Es el receptor más alto que tenemos ahora mismo en el roster con sus 6-5, solo superado por Darren Waller y sus 6-6. Keenan Reynolds también es un interrogante, el QB reconvertido en receptor y que fue seleccionado para ser el retornador del equipo, apoyado en la tranquilidad de estar en el equipo de prácticas, presenta unos informes en los que se menciona que ha mejorado mucho en la posición, habrá que comprobar si es suficiente para convertirse en el próximo Edelman, o no es capaz de crecer y evolucionar lo necesario para permanecer en el equipo.
En último lugar se encuentran Vince Mayle, una adquisición al final de la temporada pasada de 25 años que venía de los Colts tras pasar por los Browns y que a su velocidad podría añadir un importante factor en el juego de posesión. El otro jugador en liza no es otro que el receptor “afro”: Kenny Bell. Conocido por venir de Buccaneers, su velocidad y agresividad en el juego pueden ser importantes tanto en la ofensiva como en el juego de equipos especiales retornando. En el draft tarde o temprano debería caer un WR para buscar más calidad en el puesto y debido a que muchos jugadores pueden funcionar o no pero no dejan de ser interrogantes. No se puede ocultar que Corey Davis o Mike Williams serían factores determinantes en ataque en la primera ronda y aportarían un valor añadido para Flacco. Pero más adelante hay opciones como JuJu Smith-Schuster, Chris Godwin o Carlos Henderson que serían también piezas ofensivas apetecibles. Habría que evitar a correcalles en el draft o a jugadores como John Ross que no tienen el físico adecuado para la AFC Norte.
Sin más dilación espero que os haya gustado el análisis del ataque de Ravens antes del draft. Mañana turno de la defensa.
Francisco Sánchez.