«I’ve come to talk with you again, because a vision is softly creeping.”
Supongo que seréis una gran mayoría los que, empezando a leer este artículo, habréis tarareado mentalmente o incluso algún atrevido se habrá animado a cantar en bajito el gran hit de Simon y Garfunkel que colapsó las radios en Estados Unidos a mediados de los años 60, y una de mis canciones favoritas desde que tengo uso de razón.
Y es que, siguiendo la traducción más literal de las primeras tres estrofas de la canción, se me ha venido repentinamente un símil con lo que son los Kansas City Chiefs en las dos primeras jornadas de la NFL y os explico por qué:
El ataque está siendo ineficiente y poco fluido por primera vez en mucho tiempo en la franquicia. Han habido partidos malos en estos últimos 5 años en ataque, pero sin llegar a tener la sensación que muchos estamos teniendo en estos dos primeros partidos. Muchas veces las sensaciones son… Eso, sensaciones; el problema viene cuando los datos te lo afirman, lo que tú crees ver en el campo.
En estos dos primeros partidos, Kansas City es el 8º equipo en yardas por partido (357.5), pero el #22 en puntos (17.5) y estos dos datos casan muy bien con ser el #18 en anotar en Redzone (se anota el 57% de las veces que el equipo llega a esta zona).
Es muy fácil de interpretar lo anterior: El equipo no produce lo que tiene que producir un actual campeón de Super Bowl y un contendiente a volver a levantar el Vince Lombardi. Un equipo aspirante no puede ser el #19 de la liga en touchdowns anotados (2 por partido) y el #24 en puntos por jugada (0.294). Por no hablar de que el ataque es el #23 en conversiones de tercer down (33.33%) y el #13 en conversiones de 4º down. A esto último os quiero añadir lo siguiente: La pasada temporada, los Chiefs fueron el #31 en conversiones de tercer down cuando la jugada solamente requería una yarda o menos, convirtiendo el 48.3% de las 29 veces que se presentó esta tesitura.
Cuando Mahomes ha decidido pasar en este tipo de jugadas, consiguieron el primer down en 6 de 12 veces. Además, los Chiefs fueron el único equipo en toda la pasada temporada que rechazó el QB Sneak en jugadas de 3&1 ó 4&1, cosa que no contrasta para nada con que el quarterback texano, desde que está en la liga, es el que mayor porcentaje de éxito tiene en esta jugada. En las 7 temporadas que lleva en la liga, ha conseguido 9 primeros downs en 10 intentos mediante QB Sneak.
Y ojo, todo esto no es criticar ni mucho menos, es plasmar en datos las sensaciones en ataque en los dos primeros partidos de temporada. Pero el domingo vimos alguna luz verde en ataque: Al más puro estilo Andy Reid, integró en el ataque desde el primer snap a Kadarius Toney después de todas las críticas recibidas, al punto de tener que haberse borrado perfiles en redes sociales. Otro WR muy criticado fue Skyy Moore y el primer touchdown del partido contra Jaguars fue suyo.
Kelce anotó pero se le vio con falta de ritmo aún con algún drop que no nos tiene acostumbrados. Eché en falta más juego de carrera, pero… Eso lo hablamos otro día, porque hoy hemos venido a hablar de la defensa.
Kansas City Chiefs está «rankeada» como la séptima mejor defensa de esta temporada con una cantidad de datos exultantemente buenos:
3ª mejor defensa en puntos concedidos (15), 3ª mejor defensa en Redzone (33.33% de anotaciones permitidas en Redzone), 4ª defensa en touchdowns recibidos (1.5 por partido), 4ª defensa en puntos permitidos por jugada (0.224), 5ª defensa en porcentaje de pases completados permitidos (58.44%), 7ª mejor defensa en terceros downs parados (29.63%).
Hay varias estadísticas más muy interesantes como la defensa #12 que menos yardas permite de carrera, que, sobre el papel, será una cifra que se ajustará más para bien con la llegada de Chris Jones.
Os pediría que los dos párrafos anteriores los leyeseis de nuevo porque quizá, un equipo como Kansas City, a medida que vaya avanzando la temporada irá equilibrando los dos lados del balón a medida que el ataque empiece a carburar pero tener estos datos en defensa es una noticia excelsa.
En el partido contra Jaguars pudimos ver otro gran partido de Chris Jones que volvió por la puerta grande. Limitó mucho el juego de carrera por dentro de la DL que tanto daño hizo Detroit y mandó mucha presión a Trevor Lawrence por el centro de su OL, que es una de las cosas más incómodas para un QB. El pass rush en general fue muy bueno con un Felix Anudike-Uzomah que contó con varios snaps, Karlaftis sigue creciendo y un Derrick Nnadi que, con el ‘95’ a su lado siempre vive mejor.
Leo Chenal tuvo un muy buen partido con una jugada contra Travis Etienne en la que lee muy bien al RB. Nick Bolton cuajó un excelso partido a pesar de que tuvo que ser atendido en la tienda de campaña. L’Jarius Sneed tuvo una tarde muy difícil contra Calvin Ridley en un match up donde el CB dejó al ‘0’ en 32 yardas.
Y, para mí, el mayor dato es dejar a un equipo con el ataque de los Jacksonville Jaguars con solamente 3 field goals y ningún touchdown. Esto es para levantarte y aplaudir.
Ah, se me olvidaba. Anoche Patrick Mahomes y Kansas City llegaban a un acuerdo para reestructurar su contrato y convertirse en el QB que más dinero va a recibir en las próximas temporadas, superando así en promedio a las renovaciones de Joe Burrow, Lamar Jackson, Justin Herbert y Jalen Hurts.
Todo esto es un indicativo de que la manera de trabajar que hay en Kansas City es muy clara. “In The Sound of Silence«